DuXiNo----

una vez más, soaring (parte2/2)

Un fuerte gruñido se escuchó a lo lejos, el lugar comenzó a temblar, y los infectados eran derribados poco a poco, los chicos ya sabian de que se trataba.

- Duxo! Prepara tu Molotov!.. ¡¿Duxo?!

El chico se quedó congelado, sabía que uno de esos había matado a un querido compañero. El muchacho retrocedía con  pequeños pasos, quería huir pero ¿A dónde? ¿El refugio? Ese monstruo tiraría la puerta con un solo golpe. Soaring y Kendo estaba igual, estaban temblando y casi llorando.
Aquino tomó del suéter a duxo y lo azotó a la pared.

- ¡¿Que carajo haces?! ¡No es momento de temblar!
El muchacho parpadeó varias veces.

- n-nos pides que nos enfrentemos a él? Aquino eso es ... Lucasta ... Él lo mató!
- se lo que sucedió, se que fue una gran perdida pero no podemos retroceder,la ayuda está en camino ¿Entiendes? Hazlo por lucasta

En ese momento duxo despertó, sabía que Aquino tenía razón y sabía que a lucasta no le gustaría verlo así, entonces tomo una Molotov y la tiro en dirección del tank.

- no duden vaciar su cargador con ese maldito!
Dijo cejo, quien disparaba, al parecer el enorme infectado se dirigía a Alex, bajó y al suelo e intento esquivar a algunos infectados, los chicos peleaban como podían, natalan tiro una bomba casera para distraer a los infectados comunes, funcionaba pero ellos no dejaban de llegar. Pasaron minutos, disparando, eludiendo, recargando, gritando, esquivando y corriendo, parecían horas, pero los chicos no se cansaban, el tank no duró mucho después de eso, estuvo a punto de golpear a Alex en un par de ocasiones, el fuego cesó por un momento pero fue reviviendo con la pirotecnia, cuando el tank estuvo por subir el escenario se colgó de donde salían fuegos artificiales, cejo no dudo en postrarse en sus enormes pies para volver a subir la palanca, está vez, el cielo no se iluminó sino que impactaron directamente en la cara del infectado provocando quemaduras de tercer grado, era tétrico, no desbordaba mucha sangre pero no tenía rostro, sus ojos, nariz y dientes  estaban expuestos, finalmente duxo remató con un hachazo que le atravesó el cráneo en línea vertical, arranco el hacha con esfuerzo y la tiro accidentalmente hacia un costado cayendo  en las gradas.

Todos concluyeron con su respiración agitada.

-mier... Da ...

Dijo Kendo antes de caer sentado

- descansa un poco la ayu-...

Fue interrumpido natalan cuando un reflector los alumbró y una fuerte brisa de aire los alertó, era un helicóptero que se dirigía hacia las gradas, desafortunadamente con él trajo otra enorme horda.

- vamos, es nuestra oportunidad!

Kendo se puso de pie y corrieron hacia el helicóptero, todo parecía irbien, dentro de lo que cabía, los infectados rodearon el helicóptero, Alex, cejo, Kendo ya estaban a bordo, se dedicaban a cubrir a los restantes, soaring se quedó congelado pues sus municiones se habían agotado y en frente de él se encontraba un hunter, él no tenía una idea clara en el momento, natalan al llegar al helicóptero junto Aquino y duxo noto su ausencia al voltear vio como el infectado se le abalanzó en sima, natalan sintió como le arrebataban una parte de él, no lo dudo fue de tras de soaring sin perderlo de vista, no parpadeaba, veía como en segundos le desgarraban  el abdomen al chico, que en el suelo lloraba y rogaba por no morir allí, se retorcía de dolor y por más que intentaba quitárselo de en sima era inútil, su estómago está completamente abierto y sus órganos al descubierto.
-¡Noooooo!
Gritó
Natalan llegó tarde, un enorme charco de sangre cubrirá a su compañero, se quedó congelado al ver qué el rostro de soaring solo caían lágrimas, ya no gritaba, ya no se quejaba...
Dio un paso más y al pisar parte del charco noto que al lado estaba el hacha que duxo había tirado. Se inclinó, la tomo y con fuerza empujó al infectado a un lado, se paro arriba de el, un pie cada costado del infectado, noto que sus garras estaban empapadas de la sangre del aún vivo, natalan comenzó a golpearlo desde el vientre con el filo del arma blanca como si de un pedazo de tronco se tratara, desde la perspectiva del hunter se veían los ojos de natalan, llenos de enojo y rencor

- ¡Se lo prometí! ¡¿Por qué?! ¡¿Porque así?!

Cuestionaba el pelinegro mientras seguía con su violenta acción, el sudor estaba en su rostro al igual que la sangre y viceras de infectado. Era tétrico ver a natalan reaccionar así, cada que el levantaba y empuñaba el hacha en contra recordaba la voz de soaring, recordaba cuando le dijo que tenía miedo, cuando natalan estaba herido y soaring lo protegió, el día que llegó golpeado por ir en busca de ayuda o medicamentos y finalmente cuando prometió cuidarlo pase lo que pase. Al terminar, el torso del hunter estaba prácticamente molido, en la chaqueta de natalan estaban partes de sus órganos, se dirigió a soaring, cayó de rodillas ante el y acaricio su rostro, ninguno de los dos paro de llorar, el cuerpo de soaring comenzaba a enfriarse.

- n-na...t..

Pronunció con dificultad

- ¡Lo siento! ¡No debes morir! ¡No aquí! ¡No así! Porfavor... Pelea, una vez más, soaring

Aquino y duxo para ese entonces se habían devuelto donde ellos, vieron el estado de soaring y escucharon las plegarias de natalan, no dijeron nada, dejaron que se despidieran.

- ve...te
- no sin ti
Natalan pego su frente con la de soaring, estaba arrodillado, se sentía derrotado

- no debí soltarte, no debí dejarte atrás....

El helicóptero comenzaba a despegar Aquino y duxo sabían que tenían que irse pero ¿Cómo se llevarían a natalan? Soaring seguía vivo ¿Lo dejarían de carnada?

- tienes ...que... Hacer...lo.., aqui...no y duxo... Vinieron... Por ti... Vete

Natalan volvió a sentarse normalmente, tomo las manos de soaring y dispuesto a decirle adiós...

- soaring yo...!

- lo sé... Yo... También...

Con eso, una última gota recorrió la mejilla del muchacho, quién descansará sobre su propia sangre hasta que está se seque y él se pudra... Natalan se acercó a sus labios y le dio un primer y último beso a su frío cuerpo, se puso de pie y entre su ropa buscaba algo, era un collar con la inicial S (de soaring) la arranco del cadáver y se la ato en el cuello. Caminaron al helicóptero y con todo el pesar del mundo los tres subieron

- ¿Y soaring?

Preguntó Alex, a lo que Aquino con su mirada distante desvió a natalan quien tenía un semblante perdido. Con eso el señor que manejaba el trasporte dijo

- lo siento mucho...

Y despegó.