Capitulo 5 | Visita

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El peliverde sintió palidecer, su alma salió de su cuerpo cuando escuchó aquella frase

Mierda mierda mierda mierda!

No llevo ni medio día como omega y ya me descubrieron

-.Eh?.- respondió mientras volteaba lentamente con la mirada baja y nerviosa.

-.Me pareció verte saliendo del aula de omegas...no es así?.- respondió Iida con la cabeza hacia un lado y algo confundido -. No te ví entrando a nuestro salón.

-. Ah! haha, claro que estuve ahí...pero cuando regresé del baño ya había comenzado la charla así que entré por la puerta de atrás y me senté por ahí....estuve todo el tiempo ahí por que soy alfa.- dijo el peliverde pasando su mano por su cabeza mientras sonreía nerviosamente. Quizás la última frase lo hacía parecer sospechoso.

El pelinegro entrecerró los ojos observándo lentamente su rostro tratando de leer las expresiones de su compañera, eso era algo que se le daba bien ya que su respuesta no le parecía tan convincente.

Eso no explica que hacia saliendo de aquí...de donde se reunirían los omegas

De verdad estuvo en nuestro salón?

No no no, Midoriya parece ser alguien sincero; no debería dudar de mis compañeros el primer día...aunque algo no me cuadre aquí.

-.Bueno...si necesitas algo, no dudes en decirme; siempre estoy dispuesto en ayudar a un amigo .- respondió mientras levantaba el dedo pulgar hacia su peliverde amigo.

Amigo...

Izuku suspiro agradecido, su corazón dejó de latir rápido y contestó con una sonrisa sincera hacia el pelinegro

-.Espero que nos llevemos bien, Iida.

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Luego de despedirse de sus compañeros y nuevos amigos, si!...ya los consideraba sus amigos, se dirigió de regreso a su hogar.

El profesor Aizawa los había dejado irse temprano, tenía que rellenar la base de datos y actualizar el perfil de cada estudiante en base a los resultados de hoy y de aquellos  que no habían podido presentar.

Antes de volver a su casa, decidió pasar por la casa de su mejor amigo. Su madre saldría a supermercado por lo que no había apuro en regresar rápido.

Compró la leche de fresa que tanto le gustaba al rubio y algunos pasteles con bastante azúcar impalpable. Bakugó siempre trataba de ocultar su gusto por las cosas dulces frente a los demás.

Haha... ya que estarás encerrado estos días, no tendrás que preocuparte en que alguien te vea comiendo esto...

Sin darse cuenta, ya se encontraba frente la puerta de su mejor amigo. Tocó el timbre y esperó hasta que abrieran la puerta.

-.Izuku?

Mitsuki (de boruto? xd) la madre de Bakugó abrió la puerta con intención de abrazar al peliverde ya que no lo veía desde la semana pasada.

En ese instante en el que la puerta se abría lentamente desde su perspectiva, una onda de feromonas golpeó fuertemente al omega; sus pupilas verdes se dilataron, su garganta se empezó a secar y sintió como su temperatura comenzaba a elevarse.

Sus manos perdieron fuerza al igual que sus piernas amenazaban con dejarlo caer. Iba a sufrir un desmayo.

-. Te encuentras bien, cariño? .- dijo Mitsuki algo preocupada mientras notaba como el pelvierde se encontraba pálido y hasta tambaleando un poco.

-.T-Tome, esto para Kacchan, me t-tengo que irme.- respondió entregándole rápidamente las bolsas; se dió la vuelta, y juntando todas sus fuerzas, salió corriendo lo más rápido que pudo.

Agradeció que la casa de su mejor amigo se encontraba a unas casas de la suya.

Solo un poco más...

Abrió la puerta de su casa y subió corriendo hacia su habitación. Cerró azotando la puerta y cayó casi desmayado en su cama.

Siento que estoy ardiendo...que me sucede

K-Kacchan...

Ni creas que seré tu alfa! | Katsudeku Omegaverse (KTDK / BKDK) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora