𝐌𝐲 𝐒𝐰𝐞𝐞𝐭 𝐋𝐨𝐯𝐞

↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡ 𝕮𝖆𝖕𝖎́𝖙𝖚𝖑𝖔 001 ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫

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‡ ❀.' -❛  𝐍𝐄𝐖 𝐎𝐑𝐋𝐄𝐀𝐍𝐒
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𝐈𝐠: @𝐈𝐚𝐦𝐌𝐢𝐦𝐢𝟎𝟓𝟎𝟐 
𝐓𝐢𝐤 𝐓𝐨𝐤: @𝐈𝐚𝐦𝐌𝐢𝐦𝐢𝟎𝟓𝟎𝟐
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Podía sentir el viento sobre mi rostro y el movimiento del auto, las voces de mis padres parecían un eco lejano en lo que pasaba a mi alrededor mientras sentía el hormigueo de mi cuerpo con mayor fuerza, desde mis manos hasta los pies cada vez más fuerte. El olor al combustible quemándose era una molestia que solo aumentaba mi mareo del momento sin embargo al mismo tiempo parecía ser contrarrestado con el aire que se colaba por la ventana abierta del auto.

Apenas podía percibir ese aroma de pasto, no hacia falta abrir los ojos ahora aún podía descansar otro poco.

Solo un poco más.

El sonoro ruido de personas llegó a mis oídos con la espléndida música jazz de los establecimientos, incluso al pasar por lo que creo fue una panadería lleno mis sentidos y me hicieron levantarme de golpe solo para asomar mi rostro a la ventana. New Orleans, finalmente en New Orleans.

La risa de un hombre con un tono fuerte pero algo rasposo sin exagerar demaciado me hablo.

— Ya despertaste Mary ¿no te gusta la vista?.

Mi mente analizaba cada cosa, tanto de descifrar si eso fue lo que dijo realmente pero al pasar unos segundos finalmente a firme a medias:

— El pan... Más bien el pan me llamo la atención.

— Oh Mary no consumada tanto pan, vas a engordar y no propio de una dama ¿quien te va a querer si te descuidas?.

Una mujer de hermoso rizos rubios bien arreglada llamo mi atención con su mirada severa mientras el señor de cabello negro interrumpió ese comentario.

— Un poco de pan no le hará mal, además mi hija se casará con el hombre que la ame tal cual cariño.

— Siempre la conscientes.

Ese último comentario sonó más a un reclamo que llevaba soñando hace tiempo, molesto y cansado de tocar el mismo tema; mi mirada fue a la ventana mientras pasábamos en las calles hasta que finalmente pasaron a ser casas cada vez un poco más retiradas, rodeadas de zonas boscosas y el sonido de las aves llenaba el ambiente mientras poco a poco el atardecer cubría el cielo de las pacíficas residencias, lograba distintas que al menos cada casa estaba de diez a posiblemente quince minutos caminando, aunque claro en auto era a menos de cinco minutos.

Mire la casa nueva a la que ahora llamaríamos hogar, el auto se detuvo mientras mi padre bajaba a abrir la cerca de madera que había al rededor, cubriendo y protegiendo los arbustos y rosales que adornaban la entrada del hermoso lugar.

— Tu padre es un tercio, le dije que rosas rojas no.

Mi madre se bajo del auto y seguido de ella yo para ver el lugar, mi padre en la puerta de la casa abriendo y entrando mientras mi madre miraba el jardín con desaprobación pero sabía que posiblemente así sería cualquier cosa que no le guste, tal vez solo intuición o el recuerdo de las miradas a lo largo de los años.

— Creo que son hermosas — susurre.

Entre finalmente a la casa de madera, con aspecto algo sombrío pero tan elegante al mismo tiempo en cada acabado de madera, muebles y alfombra que se extendía a lo largo del pasillo con puertas diferentes, la primera la más larga que al pasar pude ver una hermosa sala de estar con sofás rojos aterciopelados. Era silenciosa, tan calmada.

Mi padre me sorprendió al llamarme desde la última puerta del fondo del pasillo que me indicaba podría ser la cocina debido a los gabinetes que se veían.

— Mary, deberías ir a ver las habitaciones, elige la que más te gusta.

Sonreí y asenti para subir casi corriendo a la segunda planta para poder ver un gran ventanal por las escaleras al subir que brindaba la luz del atardecer, tal vez era la madera limpia perl relucia en su reflejo los rayos camine abriendo las puertas mirando algunas habitaciones pequeñas que posiblemente serían para huéspedes y un baño para visitas igual, finalmente llegue a una de los habitaciones principales, era grande con una hermosa puerta de vidrio para salir a un pequeños balcón donde se veía a lo lejos entre árboles el tejado de otra casa.

Esta sería mi nueva vida.