↬†ஓீۣۣۣۣ፝ۜ፝ۜ͜͜͡͡ 𝕮𝖆𝖕𝖎́𝖙𝖚𝖑𝖔 020 ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ†↫

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‡ ❀.' -❛  𝐘𝐨𝐮 𝐃𝐨𝐧'𝐭 𝐎𝐰𝐧 𝐌𝐞
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𝐈𝐠: @𝐈𝐚𝐦𝐌𝐢𝐦𝐢𝟎𝟓𝟎𝟐 
𝐓𝐢𝐤 𝐓𝐨𝐤: @𝐈𝐚𝐦𝐌𝐢𝐦𝐢𝟎𝟓𝟎𝟐
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Tome aire mientras terminaba de acomodar mi vestido blanco lleno de piedras hermosas que lo hacían brillar como un diamante. El moño grande de satin en mi espalda baja del vestido decía que era el regalo para la familia esa noche claramente.

Salí con pasos lentos mientras veía a las personas a mi alrededor esperando saber que tan buen era y porque era una maravilla según algunos hombres. Aunque claro que los esposos que estaban ahí ya habían buscando mi atención en su mayoría, fingiendo sorpresa pero los jóvenes bueno ellos esperaban ansiosos.

Debía agradar a los hombres pero mi objetivo principal esa noche era enamorar a las mujeres con la letra.

You Don't Own Me

Comenzó a sonar mientras tomaba el micrófono, claro, esa niche sería la primera vez que la escucharla en New Orleans.

Mis labios rojos contra el micrófono cantando, buscando sentir y transmitir la emoción, la luz dándome indicando que comenzaban la fiesta, las bailarinas que me acompañaron sacando a bailar a los jóvenes solteros para que pronto se unieran los demás a la pista frente el escenario. Finalmente el instrumental bajaba mientras llegaba a su final la canción y hasta ese momento nunca antes había sentido tal alegría de ver a algunas mujeres aplaudir ante mi interpretación.

Brooklyn Baby fue la siguiente canción, recuerdo haber cambiado algunas cosas puesto me recordaba a Alastor, así que el sentimiento estaba al recordar su sonrisa y cantar la como si el estuviera ahí.

El baile lento comenzó, las parejas salían a bailar mientras su espalda plasmada en mi memoria seguía ahí, los abrazos, las pláticas.

La noche siguió así, tras mi última canción antes de mi descanso y cambio de ropa, mientras cantaba al amor para las parejas frente a mi lo vi, entre la gente del lugar.

Su traje negro pero mariposa de color rojo, su cabello arreglado por esa ocasión mientras me veía fijamente.

Mi corazón dio un vuelco tan sólo cuando me sonrió pero debía seguir, tome aire para seguir cantando hasta que dieron aviso de mi pausa, Williams me ayudó a bajar y acepte por modales siendo llevaba a la zona de la comida para tomar lo que quisiera, el se fue para atender a sus invitados o más bien coquetear descaradamente sin embargo esa era una de mis menos importante preocupaciones de la noche, mi mano fue a los vinos que estaban dando para refrescar mi garganta mientras pensaba en que el estaba ahí. No debía acercarme, debía alejarme porque eso quería el ¿no?.

Sin embargo mientras tomaba y veía a las personas alguien tomó mi mano libre por mi espalda haciendo que me sobresalte pensando al momento que era Williams, pero al girarme el se inclinó tomando mi mano para dejar un beso en los nudillos.

Su sonrisa coqueta, su ojos listos para regalar sueños pasajeros esta noche entre risas y pláticas, sus lentes que le hacían verde más listó.

— Señorita ¿le gustaría bailar?.

¿Seria buen momento para confesar que no sabía bailar? ¿Que no era buena con pareja en baile? ¿Que posiblemente haría el ridículo si me sacaba a bailar?.

— No se bailar....

Susurro apenas con lo que devuelva mientras mis mejillas ardían, estaba totalmente quiera mirándolo como si fuera la cosa más hermosa del mundo en ese instante pero así era, se veía tan bien.

— Entonces ¿me permite acompañarla esta noche?.

Asenti sin ninguna duda en mi rostro, mientras tomaba mi cop dejándola en la mesa de los aperitivos y llevando me de su brazo hasta donde sentarme sin embargo a nuestro paso las miradas iban curiosas de ambos. Era entendible pues había llegado casi el año de habernos alejado de la nada, desde que el se aisló ahora me llevaba a su lado. Me abrió la silla para poder ayudarme a sentar y se arrodilló ante mis para quitar mis tacones tan grandes que fueron especialmente hecho para esa noche con el vestido, sus manos cubiertas por guantes blancos comenzaron a masajear mi tobillo mientras los susurros comenzaban tan rápido como los celos de las chicas.

— Deberías estar bailando, creo que hay señoritas que esperan.

Susurro mientras el actuaba como si nunca hubiera pasado nada pero ¿como logró sanar mi corazón en una sonrisa? Pero algo era seguro de ese momento entre las luces de aquella fiesta con decoró a cada parte que veías y era que esa noche Alastor había vuelto a mi vida.

𝐌𝐲 𝐒𝐰𝐞𝐞𝐭 𝐋𝐨𝐯𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora