El origen de Los Animatrónicos - Parte 3

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-Ultima oportunidad- 

Freddy siguió trabajo como mesero, pero con el paso de los días él se convirtió, sin quererlo, en el asistente de Golden, el moreno lo aguantaba porque al final ganaba buena paga más unas propinas que el rubio le entregaba.

Golden muchas veces se peleaba con Freddy por el cómo le hablaba y el cómo se refería a él por su apellido, pero el al no saber de números, Freddy terminaba haciendo todo lo que tuviera que ver con cuentas, lo que hacía que no lo pudiera cambiar de puesto

Un día Freddy fue a la parte de atrás del edificio donde están los almacenes para terminar el inventario, pero algo que le llamo un poco la atención era lo que parecía un armario de color blanco, no entendía él porque estaba en ese lugar, con algo de curiosidad se acercó a él y con dificultad logo abrir ese armario recibido por un viento helado saliendo de este provocándole escalofríos

Freddy – aAaAy gruuu ¿qué carajos es esto?

Golden – con que metiendo la nariz en donde no -cerrando la puerta- esto mi metiche amigo es una nevera

Freddy – ¿una nevera? ¿De dónde la sacaste?

Golden – la mande a pedir de Europa

Freddy – ¿y cómo para que la compraste?

Golden – para llevar los vinos más seguros y más frescos ¿brillante idea verdad?

Freddy – estúpido diría yo

Golden – ¿cómo te atreves a insultarme?

Freddy – hombre, estas hasta el cuello de deudas y se te ocurre comprar esto ¿estás loco?

Golden – la compre justo por eso, así podremos llevar más de nuestros licores a todo el país y quizás incluso fuera de este, así pagare mi deuda con el abuelo más rápido

Freddy – en lugar de gastarte tu salario en una nevera innecesaria, debiste gastarlo en otras cosas más importantes

Golden – ¿sí? ¿Cómo en qué? Según tú

Freddy – como en arreglar las bodegas de los licores, la acabo de revisar y los remaches están muy oxidadas y ni hablar de la madera que ya se está pudriendo porque no las barnizaron bien

Golden – estas exagerando, están bien, resiste mucho

Freddy – ¿resistir? de un tirón arrancarías los remaches

Golden – claro que no

Freddy – que si necio

Dalas-oye chico, si el Sr. Golden dice que esa inversión no vale la pena es porque no lo vale

Freddy – nadie te hablo lame suelas

Golden – no le hables así, tu deberías actuar un poco como el

Freddy – no se ni para que me molesto en advertirte –saca su apuntador- ¿cuánto costo esa nevera?

Golden – sumando él envió 100$

Freddy – ¡¿100?! Que caro -escribiendo- ok ya tengo la cuenta lista

Golden – ¿y bien?

Freddy – sumando tu paga de esta semana más la propina, wow, ganaste 280$

Golden – ¿en serio? Nada mal

Freddy – pero le restaremos los 100$ que gastaste, más otros gastos que no mencionare, quedando un total de 80$

Golden – eso es muy poco

Freddy – ¿te parece poco?

Golden – bueno, puedo ser peor

FHS MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora