Snake Soul {Sebastian Sallow}

Capitulo 5: Reencuentro

Habían pasado dos semanas desde que envié la lechuza a Mario y mis castigos con Sebastian no mejoraron, estuvimos una semana entera ordenando libros y pelando patatas en la cocina, pero por nuestras peleas nos extendieron el castigo a un mes, nuestro trabajo era colocar todos los libros que los alumnos movian y dejaban tirados, dado que por la biblioteca pasan mas de 200 alumnos al dia no era muy difícil que todo estuviera desordenado.
Durante esas semanas estuve investigando acerca de la magia antigua, debía de conseguir algo pero no sabía bien el que, como dijo Persival en el recuerdo del pensadero debo superar las pruebas para ser digna de este poder, aparte de eso quise investigar sobre mi familia y mi madre pero no encontré nada de información.

Después de la clase de herbología quedé con Mario en la torre de astronomía.
-Hola Lucy recibí tu lechuza pero, ¿puedes contármelo con más detalle? Mi ataque a los furtivos se extendió bastante, tuve que salvar a dos dragones por lo que no tuve mucho tiempo de investigar.
-Bueno no te preocupes entiendo que estuvieras ocupado, yo he estado también cumpliendo con los castigos.
-¿Sigues castigada? No me jodas que Sebastian y tú seguís igual.-suspiro Mario.
-¡Es imposible estar con él! me hace rabiar más que nadie y por su culpa mi poder se descontrola muchas veces, he probado de todo para relajarme pero siempre saca algún insulto nuevo.-dije frustrada.
-Entiendo, pero no podéis seguir así siempre de castigo en castigo no ganaréis nada, además solo me quedan unas pocas semanas en hogwarts y cuando no esté tendrás que defenderte de el.
-No quiero que te vayas, eres con el único que puedo hablar y el único que me comprende.
Le mire unos segundo y le abrace con fuerza.
-No se cómo podré con todo esto sin ti-dije medio llorando.
Mario me siguió el abrazo.
-Tengo que irme, pero de momento sigo aquí y creeme no me voy a olvidar nunca de ti, cuando sea auror iré a verte te lo prometo, ahora tranquilizate y cuéntame lo de tus padres.
Asentí con la cabeza y me seque las lágrimas.
-El profesor Fig me contó que mi madre era una bruja muy poderosa, que tenía el arte de la magia antigua, pero no sabía manejarla al igual que yo, mi padre le engañó con una muggle, porque se cansó de los brotes de mi madre y no quería saber nada del mundo mágico, mi madre real murió en el parto.

Mario abrió los ojos con sorpresa y incredulidad.
-Entonces....tu madre real murió y has estado pensando que tu madre era tu madre pero no es tu madre.
-Es muy lioso pero si, además mi padre siguió el apellido Maison por el poder que conlleva, odio que la amante de mi padre lleve ese apellido ni siquiera es suyo.
-Wow vaya si que es muy dramático todo, pero tus supuestos padres te abandonaron ¿no es así?
-Si así es, la mujer de mi padre me despreciaba y al darme los brotes cada vez más fuertes decidieron echarme de casa, a mí hermano no lo echaron, pero mi padre siempre le llevaba a lugares y le daba libros raros, realmente nunca salía de su habitación ni siquiera intercambiábamos muchas palabras.
-Espera ¿tienes un hermano?-dijo Mario sorprendido.
-Si...nunca lo tengo en cuenta porqué ni siquiera me hacía caso, no me defendió cuando me abandonaron simplemente se quedó en silencio y se fue con su libro a su habitación.

Mario se veía demasiado sorprendido intentaba procesar todo en su mente al igual que yo.
-Joder Lucy eso es mucho para lidiar, ¿¡Has estado dos semanas sola con eso en la cabeza!?
-Si y con las peleas de Sebastián, Fig tuvo que irse a hacer varias tareas, no he tenido a nadie con quien hablar de esto hasta este momento.-dije bajando la cabeza y con un tono triste.
-Voy a ayudarte todo lo que pueda, vas a demostrarle a tus padres que no eres rara, si vienes de una familia de magos tan poderosa estoy seguro de tu tienes mucho potencial por explotar, de hecho tú apellido debe de estar por algún lado.
-Lo he intentado, en los castigos de la biblioteca cuando tenía un tiempo libre me escondía y buscaba información, leí bastante pero no encontré mucho.
-¿Has probado en la sección prohibida?-sugirio Mario.
-La sección prohibida...no, no creo que haya nada allí.
-Pues claro que hay, no te creas que solo esconden libros de magia oscura, también información que los estudiantes no pueden llegar a saber, por ejemplo la magia antigua es peligrosa y debe de estar allí. Te diría que pruebes a entrar si te toca castigo allí.
-Claro, y como entró necesito la llave de la bibliotecaria.
-Sebastian, se que es un gilipollas pero a tiene fama de entrar en la sección prohibida varias veces, convencele de alguna forma.
Mire algo insegura de su idea, convencer a alguien que me odiaba es una tarea muy difícil.
-Lo intentaré, aunque no creo que de mucho resultado.