05. Portador de la muerte - Parte 2

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Link del capítulo en inglés:

https://archiveofourown.org/works/52923568/chapters/134493535{

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NOTA DE LA TRADUCTORA

Hola. ¿Cómo están? Espero que muy bien.

No me voy a alargar aquí. Solo diré que esta es la continuación del capitulo cinco. Disfrútenlo.

—AKI_YAC—

Tal vez sólo fuera un truco de su mente, pero el aroma de las flores de cerezo en el aire fresco de la mañana parecía aún más dulce ahora que caían sobre el suelo liberado

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Tal vez sólo fuera un truco de su mente, pero el aroma de las flores de cerezo en el aire fresco de la mañana parecía aún más dulce ahora que caían sobre el suelo liberado.

Sanji lo inhalo profundamente, dejando que llenara sus pulmones hasta el fondo, y sonrió. Era una mañana tranquila. Tan temprano en el día, la Capital de las Flores estaba casi en silencio, aparte de la ligera brisa que agitaba las flores de los árboles y el sonido de sus sandalias geta en el suelo mientras caminaba por los terrenos del castillo.

Habían pasado cuatro días desde que Luffy derrotó a Kaido y Momonosuke ocupó su legítimo lugar como Shogun de Wano. Eso significaba cuatro días en los que tanto Luffy como Zoro seguían inconscientes.

El daño que ambos habían recibido era muy grave, y Sanji sabía que sólo gracias a sus modificaciones genéticas recién despertadas no había sufrido un destino similar.

Todavía no estaba muy seguro de cómo se sentía al respecto.

Sosteniendo una bandeja con dos pequeños donabe y una tetera de té verde, Sanji se tomó su tiempo para dirigirse a la habitación que actualmente servía de enfermería en el castillo. Poco dispuesto a recorrer los pasillos y arriesgarse a despertar a los demás, Sanji había optado por tomar el camino más largo, escabulléndose por la parte trasera y atravesando los jardines después de haber hecho uso de la cocina del castillo.

No había garantías de que los dos idiotas estuvieran despiertos, y menos aún de que ninguno de ellos se quejara en voz alta de que Sanji les sirviera algo que no fuera carne y licor, pero a pesar de todo, Sanji había estado llegando todas las mañanas con una humilde ofrenda.

Sólo gracias a su haki de observación se dio cuenta de que Brook se le acercaba, tan atrapado había estado en la tranquilidad que lo rodeaba.

— Te has levantado temprano, Sanji-san —dijo Brook, colocándose a su lado.

Sanji le sonrió y se encojo de hombros—. Siempre me levanto temprano —le dio un codazo de buen humor en el costado—, y tú eres de los que hablan.

Era agradable, después de tantas semanas de caos y desorden, volver a tener algo de su rutina matutina habitual. En el Sunny, Sanji y Brook eran los más madrugadores. La presencia de Brook, que a menudo se unía a Sanji en la cocina para compartir una taza de té mientras él comenzaba a preparar el desayuno, había sido un cambio sorprendentemente bienvenido con respecto a las mañanas solitarias a las que se había acostumbrado en la tripulación del Sombrero de Paja. Aunque Sanji nunca lo admitiría en su cara, sus charlas mañaneras se habían convertido en algo muy preciado para él.

Porque eres tú [TRAD.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora