La noche, oscura y solitaria, gobernaba el entorno. El silencio era más que palpable. Solo se veía la luna, que se encontraba en un Cuarto Menguante brillante y las estrellas que, por mucho, eran los más llamativo. En ese ambiente, algo común pero diferente a la misma vez, se encontraba una ciudad muy amplia y poco conocida “Green Ville”. En una de las miles de casa que allí existían una destacaba. . .
—No creo eso posible, madre. . .
—Ah, ¿“no lo crees posible ”?
—No, por favor entiéndame. . .
—No te voy a entender, mal educado. Tienes que acatar nuestras órdenes, somos tus padres, lo hacemos por el bien del futuro de la familia.
—Madre, pero sólo estás precaviendo el futuro de la familia. . .
—¿Qué quieres decir con eso, Ulises?
—Nada, madre. . .
—Pues entonces, como siempre, está decidido. Dentro de tres meses se efectuará la boda.
—(...)_Frunció el seño y apretó su mano derecha, interiormente enojado. Sin embargo, activó, como si de un mecanismo orgánico automático se tratase, una sonrisa fingida y comentó brevemente _Con permiso, me retiro a mi dormitorio.
—Si, como sea. . .
En su habitación, minutos después.
—No puedo creer esto, por dios, no vivimos en la antigüedad ¿Por qué debería casarme por conveniencia con una chica a la cual nunca amaré?_Se decía mirándose al espejo, con un claro tono de tristeza y melancolía por el futuro que le espera.
Tocan a la puerta suavemente.
—Pasa, Miriam, por favor.
—Buenas, Ulises, ¿cómo te encuentras? Y, ¿cómo sabías que era yo, ya eres adivino?_Se ríe, para suavizar el ambiente.
—Bueno, eres la única que me visita en mi dormitorio después de las disputas con mi madre, porque mi padre ni habla. Y estoy, apartando ese tema, bien, gracias por preguntar.
—¿Qué vas a hacer al respecto, con esa situación? No creo que puedas hacer mucho, pero lo puedes intentar, ¿no lo crees?
—¿Qué se te ocurre, mi amiga-cómplice?_Se le acerca, por fin con una sonrisa bromista.
—Gracias por el apodo, pero no sé me ocurre nada. . .
—Oh. . .
—A no ser que. . .
—Sabía que algo tendrías en mente.
La pequeña pero fuerte anciana se acerca al chico y lo toma de sus manos
—Huye.
—¿¡Qué!?_Su rostro cambia de pícaro y gracioso a preocupado.
—Eso que te digo no es nada fácil de procesar ni de proceder, pero te puedo ayudar si te interesa la idea. Estoy completamente cansada de observarte “acatar” las horribles desiciones de tu madre, cansada de verte sufrir, teniendo la posiblidad de huir y ser feliz, tú solo, con tus propias desiciones.
—Es verdad. . . Pero es una media realmente severa y peligrosa.
—No te doy esa opción porque la pensé ahora mismo, de repente, no pienses eso. Llevo reflexionando esta idea no un día, no una semana, no un mes sino desde que naciste. Dentro de tres meses cumplirás los 16 años, edad que considero no tan necesaria para decirte un chico maduro, porque lo eres más que cualquier otro que conozca y desde muy temprana edad . Te digo esto, justo hoy, porque veo que ya no hay otra forma de escapar de tu horrible realidad con tu propia familia, que no sea huir física y psicológicamente.
—No quiero tomar una media tan difícil en un momento de impulso ¿Me entiendes? Aunque. . . no eres la única que ha pensado sobre este tema.
—Te comprendo totalmente, puedes estar completamente tranquilo. En cargo de que niegues está medida yo te ayudaré aquí en la mansión, como siempre lo he hecho, a intentar rebajar las posibles tensiones que te puedan causar.
—Y en caso de que lo acepte. . .
—No dudaré en ayudarte a ejecutar esa idea y a defenderte con escudo y espada.
Ulises, con un sentimiento de amor profundo por esa sirvienta, más familiar que por cualquier familiar consanguíneo, la abraza y derrama unas suaves lágrimas en su hombro. Él sabe que ella no quiere su mal, todo lo contrario, por eso y mucho más, la considera un verdadero familiar suyo.
![](https://img.wattpad.com/cover/367554637-288-k929727.jpg)
ESTÁS LEYENDO
«Serendipia»
Romance-Serendipia- Un hallazgo inesperado y afortunado. ¿Es posible hallar lo imprescindible en una situación de caos, volviéndose así... un tesoro?