Capitulo 6: La sección prohibida

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-¿Que necesitas?-pregunto Sebastián algo asustado.
-Necesito llegar a la sección prohibida.
-Vale y....
-Tienes fama de colarte siempre que quieres.
-Si pero hace mucho que no lo hago, me dieron el último aviso de expulsión si volvía a colarme.
Mire a Sebastian seriamente.
-¿Que prefieres colarme en la sección prohibida y arriesgarte, o que le diga al director Black lo que hicisteis Imelda y tu?, créeme que tengo las de ganar si es así.
Sebastián suspiró y frunció el ceño.
-Bueno está bien, mañana por la noche nos toca el castigo en la biblioteca creo que podemos colarnos sin que nos vea la bibliotecaria.
Sonreí y le di una palmada en el hombro.
-Es un placer hacer negocios contigo.-dije sarcásticamente.
-No creas que lo hago por ti, lo hago para que no te chives al director, si me expulsan no podré ayudar a Anne, asi que más vale que al menos merezca la pena Maison.-dijo Sebastian en un tono amenazante.
-Aunque no merezca la pena me lo debes, así que sal de mi habitación ya que la vas a apestar con tu presencia.
-Odio intencambiar palabras contigo-dijo Sebastián.
Sebastian dejó a Milán y se fue, yo me tumbe y me dormí, estaba agotada.

Al siguiente día me levanté y fui a buscar a Mario a la torre de Gryffinfdor.
-Buenos días Mario-dije mientras me rascaba los ojos con sueño
-¿Qué tal dormiste, y como llevas lo de tu mascota?
-Al final fue todo una broma pesada de Imelda, Sebastián me lo trajo a mí habitación, parecia arrepentido.
-¿Sebastián arrepentido? Eso sí que es sorprendente.-dijo Mario con sorpresa.
-Lo bueno es que le he dicho que me lo puede compensar colandome en la sección prohibida, le he amenazado con decirle a tu tío lo que hizo el e Imelda.
Mario sonrió con algo de maldad.
-Deberias de decírselo a mi tío después de que te cuele en la sección prohibida, al final de todo se lo merece.
-Se que debería...pero un trato es un trato, además siento algo de pena por su hermana, al menos en hogwarts investiga para curarla y ella no tiene la culpa de que su hermano sea así.
-Bueno viéndolo así si que siento algo de pena, haz lo que veas necesario lo importante es que puedas encontrar información.
-Lo haré, seguramente haya algún libros que pueda ayudar. Aunque espero que Sebastián no me saque de quicio, si mi poder se dispara podrían pillarnos.
-No te preocupes por eso vamos a entrenar eso ahora-dijo Mario calmado.

Mario me llevo hasta los jardines, allí habían algunos alumnos disfrutando del día, incluso Leander estaba intentado subirse a la escoba pero se caía, era bastante gracioso de ver.
-Leander me parece que no se te da bien lo de montar eh-me reí
Leander se bajó de la escoba y se acercó a nosotros.
-Vaya vaya Maison hoy estas graciosa, estoy practicando para entrar en el equipo de Quidditch, solo necesito mantener el equilibrio pero créeme puedo montar y muy bien.- dijo Leander en un tono seductor mientras me miraba de arriba a abajo.
-No me sorprende que no ligues ni con los árboles- sugirió Mario.
Leander miro a Mario y su cara pasó de seducción a una cara de miedo.
-¿Pasa algo? O vas a seguir haciendo el idiota para que Lucy te haga caso.
-Yo no....yo no estoy intentando que Lucy me haga caso, solo estoy practicando mi equilibrio, además ella se ha reído de mí.-dijo Leander nervioso.
Mario miro con asco y me miró a mí.
-¿Porqué solo te hablan imbéciles?
Me reí por su comentario. Leander se fue con cara de pocos amigos, Mario y yo nos pusimos en un espacio bastante grande de los jardines.
Se puso delante mía.
-Bien vamos a empezar por controlar tus enfados.
Mario sacó una bolsa llena de peladuras de frutas y comida que parecía provenir de la basura.
-¿Que vas a hacer con eso?-pregunte sorprendida
-Ahora lo sabrás
Mario cogió un guante y metió la mano en la bolsa. Cogió un buen montón de comida y me la empezó a lanzar.
-¡Para! ¿¡Que haces!?-grite mientras me tapaba la cara.
-¡Sebastian es mejor y tú hermano también!-gritaba Mario lanzando comida
Me empecé a agobiar por qué no paraba de lloverme encima la comida y solo era el principio.
Mario paró un momento y sacó una pequeña jaula con duendecillos de cornualles, se abalanzaron sobre mi haciéndome cosquillas por todos lados.

Snake Soul  {Sebastian Sallow}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora