Y si todo fuera una mentira

Cap 3: Después del sueño

—¡Lukas! ¡Lukas Beken!, despierta muchacho.

—Jajaja, se quedó dormido el estúpido.

—No puede ser tan tonto.

Escucho voces de la multitud de fondo, no tan nítidas pero las escucho, ¿Me quedé dormido y ni cuenta me dí?

Abro los ojos rápido después de aquellas palabras hirientes. Estoy temblando, me noto un tanto abrumado y los ojos me pesan hasta más no poder.

—Si profesor, estoy aquí. Perdón por haberme quedado dormido, no fue mi intención.—exclamo extrañado pero firme. Y el profesor sigue dando la clase.

Que terrible fue esa pesadilla, no puedo creer que todo fue producto de mi imaginación, porque tan solo esas escenas no eran nada bonitas y no poder moverme o gritar lo hacía peor. Y ahora que lo pienso, ¿si ayudé a esa señora en realidad, no?, espero que haya sido parte del sueño.

...

Suena el timbre y ya la última clase había concluido. Me siento agotado como siempre y eso nadie me lo quita, pero bueno tengo que seguir mi día. Ahora sí hablaré con Geraldine realmente.

—Geral, ¿cómo estás? ya salí de clases por hoy, ¿dónde nos vemos o como hacemos?

—¡Luki mi niño lindo!, estoy excelente como siempre ¿y tú?, yo también ya salí. Nos vemos en la entrada del centro comercial y vamos al cine juntos —comentó feliz a través del celular.

—Que bueno que estés bien, estamos igual ujum. Nos vemos a las 6:30 pm para la última función, besos —digo despidiendome y cuelgo la llamada.

Ya en mi casa logro bañarme y comer lo necesario. Ahora sí puedo salir al cine con Geraldine, solo que los recuerdos del sueño todavía no me dejan tranquilo, no puedo simplemente olvidarlo y ya.

Reviso mi cartera e increíblemente no salió ninguna mariposa. Tenía el dinero necesario para toda la salida del cine, tanto el dinero de la entrada como el de los snack. Y mi bolso ya está listo, nunca puede faltar en ningún momento, es mi vida entera, aunque solo lleve dentro mi suéter, audífonos y laptop.

Mi vestimenta para la salida es: mono negro cómodo, franela negra con símbolos blancos en japonés y unas zapatillas blancas. Con eso creo que me veo bien y al menos me siento cómodo. Ya puedo irme de aquí.

Por último reviso si no me falta nada buscando a mi alrededor y efectivamente no. Ya tengo todo perfecto y estoy arreglado lo mejor posible, con estas condiciones y con la pinta que trae el resto el día creo que todo va a salir increíble.

Ya llegando veo la estructura del centro comercial; cristales, ladrillos y más cristales, así es como se ve. Una de las grandes entradas me recibe y al fondo logro ver el cine. No veo a Geral así que termino por entrar. Me acerco lento y veo que no se encuentra tanta gente, pensé que iba a estar más lleno pero realmente estaba normal, y los pocos que veía eran puros fans de paranorman. En eso me siento en una de las mesas a lo largo del cine a esperar.

El ambiente se ve bonito y cálido, con luces blancas que iluminan cada centímetro y con ganas de estar ahí. Sorprendentemente llegué unos cuantos minutos más temprano, cosa que nunca me pasa por lo lejos que me queda todo, pero se siente bien.

Para hacer todo más rápido prefiero pagar la entrada antes, así que voy a la taquilla y a la señorita le pido dos entradas. Concluyo feliz porque elegí los mejores puestos, en todo el centro y atrás de todo, sumamente perfecto.

Al terminar de pagar todo y conseguir los tickets escucho que me llaman.

—¡Luki!, bonito de mi corazón, ya llegué —se escucha a lo lejos.