Numero Cuatro.

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Una mitad de pan, untado de mantequilla de maní vuela desde el pie de Julieta y queda pegado en mi esponjoso cabello rizado. Julieta brincoteaba encima de la mesa de bocadillos, eufórica, gritando partes aleatorias de canciones de Arctic Monkeys, sube un pie y lo deja caer sobre la charola de panesillos, haciendolos volar estos por la sala, el betún rosa esponjoso y rancio pinta la calva del Dr. Rodriguez.
-Muy bien, demaciado por hoy.- grita este de una forma muy amable.
Después de varias seciones de grupo con Dr. Rofriguez, ya habiamos tomado mas confianza, esta vez nos puso una actividad de expresión, o mas bien, desmadre, este quería hacernos sacar el yo interno, desahogarnos y esas cosas, yo solo me quede viendo a Julieta, como la gran mayoría del grupo.
Bueno, Liam grito algunas cosas, pero nada relevante.

-Me siento, mejor, aun no estoy del todo contento conmigo mismo, siento que no soy suficiente, pero esta bien.- digo, y todos miran como si les importara.
El Dr. Rodriguez me mira al mismo tiempo que acaricia su barba y peina su bigote.
-Muy bien Yeray, eres el mas nuevo del grupo y pareces adaptarte bien, por lo regular tardo mas en hacer hablar o mas bien hacer expresar a alguien, y no se si alegrarme o asustarme, ¡Soy otro de ustedes! Solo que soy el líder- se pone sus gafas y se desabrocha el botón del cuello de su camisa - muy bien nos vemos el viernes.

Ari no se ha metido en mis sueños, me asusta ya no poder verlo, ya no recordar como es, quiero verlo, quiero tocarlo, aunque sea en mis sueños simplemente.

Me detube un momento a ver los autos pasar bajo el puente, creo que este este es mi lugar favorito, me senté a conclillas recargandome en los barandales de este, con mis codos apoyados en mis rodillas, saco un cigarro y lo prendo. El aire hace mis rizos hacia atrás y me deja el rostro libre, son casi las ocho. Hoy cumplo dos meses con Andrea, mi mamá preparo una cena de celebración, Andrea llegara a las 9:30, irán sus papás y espero no arruinarlo. Aunque, siento como si no me importara.
-¡Yeray!- escucho y subo la mirada, es Julieta, en su mano trae una botella de Wodka y la pone en su boca para dar un pequeño trago.
-¿Que hay?- digo al mismo tiempo que me pongo la capa de mi abrigo.
-¿Porque tan solo Miranda? Me dice y me patea suavemente la rodilla.
Inhaló la nicotina, doy un pequeño suspiro y apagó el cigarro en el suelo. La miro y sonrió.
-Me gusta así- me pongo de pie, tomo la botella de wodka con mi mano derecha y doy pequeños golpes en el cristal de esta con los nudillos de mi mano izquierda, después me la llevó a la boca y doy un largo trago -¿Tu?- hago una pequeña mueca y le doy la botella.
-Esperaba a un amigo- dijo Julieta mientras una mueca.
-Otra de tus conquistas- me recargo en el barandal.
-Me lo he tirado- toma un trago hasta terminar la botella -Pero... Creo que es gay.
-¿Gay?- levanto una ceja.
-Si, el no tenia eso... Ya sabes- no, no lo sabia. Acenti aunque no sabia a lo que se refería.
-Me voy...- dije y me di una media vuelta.
Escupo en el suelo y esparso con la suela de mi zapato. Empiezo a caminar y meto mis manos a los bolsillos.
-¿Yeray?- escuchó con una voz grave pero limpia, una voz que ya había escuchado. Volteo y ahí esta el, el chico de mis sueños, me quedo con la boca abierta, y sacó otro cigarro y lo meto en ella, aprieto y enciendo, tengo un problema con la nicotina.
-Amm... ¿Te conosco?- sabia perfectamente quien era, solo quería ser mas interesante, doy unos cuantos pasos haga enfrente y saco una gran nube de humo.
-El otro día fumamos juntos, aquí mismo, estabas pálido, pensé que estarías muerto en estos momentos- Sonríe y mira a Juelita haciendo una sonrisa mueca de lado.
-Oh, era el de quien hablabas, el chico del deja vu- dice y chasquea los dedos -Esta loquito, pero es cool- se acerca y me quita el cigarro de la boca, el humo restante sale por mi nariz.
-Ya lo recuerdo- digo seco.
Comienzo a tamblar, pero me siento valiente, el frío esta congelando mis pestañas, me duele pestañear. -Ari.
-Si...- dice el, pasa sus dedos por su flequillo y sacude su chamarra de mezclilla acomodándola en su torso, abajo veo una remera roja con rayas azules, bajo la mirada y justo como lo pensaba, tenia sus deslumbrantemete limpias botas, casi me inco y se las beso. -Estaba comenzando a creer que la gente de aquí era rara, hasta que conocí a Julieta...- lo interrumpi.
-¿No eres de aquí?- el me mira como examinadome, le quita el cigarro a Julieta y inhala con fuerza y lo tira haciendo un pequeño rebote en el pavimento.
-¿No es mas que obvió?- dice y se pone en cunclillas. -Bueno...- sonrió levemente -La gente de por aquí es muy rara.
El sonríe mostrando los dientes, es como si el diablo sonriera, bella sonrisa, maldad oculta.
-Tengo que irme...- digo y doy la media vuelta.
-¿Quieres venir?- dice Julieta, parpadea y mira fugazmente a Ari.
-Iremos al pub que esta enfrente de Mc Donal's- dice el y levanta los hombros inclinando la cabeza hacia la derecha.
-Cumplo dos mese con mi novia- hago un ademán con mis manos reprobatorio, sonrió casi a fuerza.
Me doy la media vuelta y esta vez camino a paso firme, y bajo las escaleras del puente peatonal. Una pequeña roca da en mi espalda y subo la mirada hacia el puente.
-¡Puedes venir si te aburres-grita Ari y después se pone en la boca lo que quiero creer que es una menta.
Asiento con la cabeza y camino.

Sublime.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora