¿valio la pena?

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Ambos lobos se miraban entre ellos.

—Yo digo que le digamos—dijo Ámbar.

El lobo mayor daba vueltas.

—No lose, siento que perderemos la confianza de Nayeon—dijo con leve temor.

—Pero tu lo viste, ese tono, era igual al antiguo Hyunjin—dijo Ámbar diciendo lo obvio.

—Viajemos al mundo humano, nuestro cachorro no debe de venir—dijo rápido, antes de escabullirse.

...

Ambos lobos aparecieron en la mansión Hwang, donde lo que mas llenaba aquel lugar eran feromonas de soledad, excepto las de Niki, aquellas casi no se sentían.

—Felix, hijo—lo llamo con un grito.

El nombrado bajo corriendo las escaleras al reconocer aquel tono, más creyó que vendría acompañado de cierta persona.

—Am, son ustedes—dijo desanimado.

Hyunjin llego con la misma emociones, lamentablemente termino igual que Felix.

—Debemos hablar, y no es nada bueno—dijo Ámbar.

Felix se preocupo y los hizo sentarse.

—Iré directo al punto, Nayeon asesino a su omega— dijo rápido y seco.

Felix se levanto de golpe.

—Con esto no se juega, padres. Nayeon no aria eso—dijo desconfiado.

—Ella nos los dijo, dijo que ella se lo había pedido que no podía vivir en un mundo donde ella no estuviera, y ella la asesino. Pero lo extraño es que cuando lo dijo, lo dijo con el mismo tono de cuando Hyunjin fue, bueno, ya sabes—dijo tratando de no dar muchas explicaciones.

Felix endureció su rostro al recordar aquellas cosas, esa habitación la cual aun existía, estaba destruida, pero aun existía.

—Dime exactamente que fue lo que dijo—le pidió Felix con claro tono de enojo.

—ella dijo que la asesino porque ella no podía darle la vida que quería, que tenia un deber como Hwang Nayeon y "una omega" no aria que eso no sucediera— dijo bajo, pero con sus palabras.

—Luego con lágrimas dijo que la matara porque no viviría en un mundo sin su Alfa, y ella la asesino y dijo que luego de un tiempo su alma llegaría de alguna manera a nuestro reino y que podía recuperarla, que si no tendría que vivir con la carga de haber asesinado a su omega. —dijo terminando su relato.

—Voy a matarla—fue lo único que dijo Felix. "una omega" esa omega estaba en todo el derecho de tener una buena vida, Nayeon como su Alfa se lo debía, estaba en su derecho.

Hyunjin se levanto preocupado.

—Cariño, piensa las cosas—le pidió.

Felix lo miro incrédulo.

—¿Piensa las cosas? Ni tu me asesinaste y ella sí, mi hija mato a su omega. Y si necesito hacerla razonar a las malas lo are—dijo enojado.

Hyunjin lo sostuvo.

—Tenías razón hoy en la mañana, si no es a las buenas será a las malas. Padre, sostenlo—le pidió Felix.

El lobo mayor no sabia a quien apoyar.

—Okey, será a las malas también—

Felix agarro el brazo de su Alfa y lo doblo para poder escapar, este grito del dolor, pero para cuando reacciono Felix se encontraba en su forma lobuna yendo al reino de sus padres.

Se tiro al lago y con rapidez llego, ya era una costumbre. Corriendo en su forma lobuna identifico a su hija.

—Tu, lo quiero escuchar por ti. ¿lo hiciste? —le pregunto con enojo.

Nayeon sabia a que se refería, endureció su mirada y asintió. No le podía mentir a alguien como su madre, no tenia ni un pelo de tonto.

Una cachetada resonó por el lugar. Una, dos, tres.

—¡YO NO TE CRIE ASÍ! Me decepcionas—dijo con rabia—yo te defendí, no les quise creer, como mi hija asesinaría a la persona mas importante en su vida, ¡COMO MI HIJA ARIA ESO! Pero no, lo hiciste. Y lo peor, yo creí que tu no serias como tu padre, luche por enseñarte bien y eres peor—soltó con rabia, mas no se arrepentía.

—Madre yo no sabia que mas hacer, ella me pidió algo que no puedo darle—dijo enojada y en el fondo triste.

Felix carcajeo con rabia.

—¿No puedes? —dijo incrédulo—necesitabas decirme que la encontraste, que ella no puede venir y que deseas quedarte con ella, que la amas para dejar tu puesto, pero no, te rendiste y dejaste que tu orgullo de Alfa ganara. Tu no sabes la historia de tu padre y yo, pero creme que yo si se lo que tu omega sintió ¿y sabes como se siente? —le pregunto con sus ojos de color rubí de la furia, ni su lobo soportaba la actitud de su hija—se siente horrible, ser rechazado por tu mate, que te lastime y que no de nada por ti, se siente horrible, como si quemara, como si te arrebataran tu razón de vivir, como si tu sangre estuviera llena de clavos o como si tu sangre fuera lava, como si cien dagas fueran directas a tu corazón, así se siente y así la hiciste sentir, pero creme, que la razón por la cual la asesinaste ya no vale, fue en vano, porque como Hwang Felix, tu madre, pierdes el cargo como la tercera loba de este reino, y como Alfa y mi primogénita estas obligada a liderar la mafia Hwang, porque solo personas con un corazón tan mierda como el tuyo merecen aquel puesto—termino de soltar su rabia, aunque aun quemada ya no era tanto.

—No puedo, ya estoy aquí, su muerte no será en vano. Ella debe de venir aquí cuando se demuestre lo pura que es su alma—dijo con desesperación.

—Si puedes, y estas obligada a hacerlo. Y debiste pensarlo antes, tu omega no es un alma pura pues por tu culpa ella tomo la decisión de querer morir, y ese pensamiento daño su alma—dijo con rabia. —ya la perdiste, Nayeon, dime ¿Qué conseguiste? Déjame decirte que fue lo que conseguiste. ¡NADA! Eso conseguiste, nada—

Felix se dio vuelta y vio a Hyunjin y a sus padres allí parados sin decir nada.

¿de verdad Felix le quitaría aquel puesto a su hija? ¿o seria mientras sentía ira? 

Esclavo del Rey de la Mafia-HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora