MI ESPOSA GIGANTE (G!P)

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-- así que dices que eres la esposa que su alteza me dió en matrimonio? Creía que te llamabas JENNIE!!...

--Así que mi Jennie... pensó Lisa sonriendo.

(Hace un mes...)

La batalla fué realmente dura y agotadora, tanto era que ya no podían sostenerse del sueño y el cansancio.
Y fué así que en ése momento los emboscaron a altas horas de la noche aprovechando la debilidad que todo el pelotón de la  general no vió venir el ataque...

Y un fuerte dolor sintió atrás de su cabeza, uno de los rebeldes la golpeó fuertemente dejándola inconsciente.

El capitán y mano derecha de la  general logró escapar con Lisa montado en el caballo de ésta

Fué realmente difícil poderla subir pero tras lograrlo huyó y se escondieron en una cueva dónde dejó el cuerpo desmayado de la general, mientras el capitán regresó a acabar con los maleantes.

Pasaron las horas y Lisa se despertó desorientada y sin saber quien era.

Salió de la cueva con el hermoso caballo que la seguía muy de cerca, localizó una pequeña aldea dónde unos ancianos desinteresadamente la ayudaron, buscaron algo para alimentarla mientras ésta tenía pequeñas lagunas y recuerdos, y tras medio mes, el capitán pudo localizar a Lalisa dándose cuenta que su superior no recordaba su vida, y él le contó todo lo que conocía de él junto con la información sobre la esposa de la general, Jennie.

Con paciencia Lisa recordaba pequeños fragmentos de su vida, pero al escuchar lo que ocurría en su mansión y a su esposa olvidada, planeó todo para su llegada.

Las cartas, la pérdida de memoria ya casi recuperada y la información que le suministro su mano derecha sobre toda la maldita familia de su esposa.

Los sufrimientos, maltratos, humillaciones y demás, les iba a costar caro.

(Actualmente).

-- no, no no, digo, es Hyuna, Jennie es sólo una sirvienta que se te ofreció descaradamente, pero tú eres fiel a mi hija de hecho la adoras y la complaces en todo, mintió rápidamente y visiblemente asustada la mujer, sin percatarse que Jennie iba entrando a la habitación, y al parecer no había escuchado la conversación que pocos minutos antes había tenido Lisa y la desagradable mujer.

-- despertaste!! Dijo Jennie con los ojos llenos de lágrimas, la emoción de su corazón al ver nuevamente a su esposa era la mejor de las sensaciones que su cuerpo y su alma pudieran sentir.

-- porqué? Gritó furiosa mirando a su madre adoptiva haciendo unos gestos tan tiernos que Lisa quedó embelesada con ella, su mirada se torno más oscura y profunda, estaba llena de lujuria, ésa pequeña mujercita la ponía en segundos dura, durísima, se sintió extraña, ansiosa, su cuerpo reaccionó con la sola presencia de la pequeña casita deliciosa, la prende y la pone nerviosa y el desespero invadió su ser, la quería a ella, pero el teatro debía continuar, y con tristeza por ésa cosita rica porque la iba a hacer sufrir...

y reuniendo todas sus fuerzas para no pensar más en las deliciosas curvas de la hermosa castaña, no lo piensa mucho, y se levanta a detenerla, porque su plan debe seguir para tener pruebas para reportar a las dos arpías a la corte, por timadoras y abusadoras.

-- y tú quien eres? Preguntó alzando la voz, -- mejor ni me digas, no me interesa lárgate ya mismo antes que pierda los estribos, hablaba Lisa casi con asco mirandola para ser convincente ante la arpía y así creyera que la había convencido con las falsas explicaciones que salieron de su asquerosa boca.

Todas las duras palabras que gritó Lisa, le dolieron mucho, al ver el hermoso rostro de su esposa cubierto de lágrimas que ella estaba causando, (era muy doloroso), sólo esperaba poder explicarle y remediar todo, pero si no le decía algo así de duro y agresivo podía arruinar los planes trazados para descubrirlas y que obtengan su merecido.