Quería que pasaran rápido las horas pa ir a la placilla de la villa donde vivía la Fer. Quedamos en juntarnos a las 6 para hablar. Estaba nervioso, no sé qué pasaría después de lo de ayer por la mente de ella. Tenía miedo de que me cortara.
Llegué al lugar a las 5 y media de la pura ansiedad. Miraba hacia la casa de la Fer para verla salir. Cuando faltaban solo 5 minutos para la hora acordada apareció. Andaba con un crop negro y un pantalón blanco. Que maldita perra. De solo ver tremenda mujer, que a sus 16 años estaba bastante desarrollada, con esos pantalones su trasero se veía perfecto.
- Hola Mat.
- Hola preciosa, ya no aguanto. Porfa dime qué pasa.
- Es respecto a lo que pasó ayer, en mi cumple. Siento la situación que te hice pasar, mi mamá es intensa a veces. Discúlpame también por hacerte pasar por la humillación de tener que ocultar lo nuestro, pero tenía mis razones.
- Fer tranquila, yo comprendo todo. Solo que me molestó que tu amigo dijera eso. Tu eres mía.
- El no sabía que yo estoy contigo.
- Deberías decirle.
- Si ya lo hablé, de hecho también hablé con mis padres... Y...
- No lo aceptan, verdad?
Su silencio lo dijo todo. Una lágrima rodó por su mejilla, después de mirar sus manos entre las mías.
- Amor yo quiero estar contigo, yo quiero seguir contigo, y lo seguiré estando, pero necesito que me respondas con sinceridad.
- Si preguntame lo que querai.
- ¿Tu... me amas? O solo me quieres por el sexo?
Un frío recorrió mi espalda, como un balde de agua fría. Temía que algún día me preguntara eso, y sería justamente cuando se diera cuenta que lo que más deseaba era su cuerpo.
- Pero por supuesto que te amo Fernanda, por qué me preguntai eso?
- Es que... siempre soy yo la que primero dice te amo, no nace de ti.
- No es necesario que te lo recuerde, siempre te lo he demostrado.
- Me gustaría que me lo recuerdes siempre. No quiero que cada vez que nos juntemos sea solo para coger. Quiero... que tengamos planes diferentes, como lo hacen las parejas.
- Fer somos jóvenes, tenemos que aprovechar nuestra sexualidad. Es algo norm...
- Siento! Siento que no es normal, Mat. Lo único que hacemos como pololos es coger, me puedes entender?
Su mirada era de dolor. Buscaba comprensión en los míos. Yo... solo quería a la Fer pa follar, y lo conseguí. Ahora ella se dio cuenta que no siento nada por ella más que lo sexual, pero no quería perder eso.
- Fer, discúlpame pero yo quiero estar contigo por que te amo. El que tengamos sexo más seguido es por lo mismo, me gusta estar así contigo.
- Mat quiero que seas sincero. Por favor, si me dices la verdad ahora va a doler menos que si alargas la mentira.- me dijo entre lágrimas.
Me dolía verla así, le tomé cariño durante los 5 meses que llevábamos pololeando. Pero no la amaba, solo quería poseerla.
- Fer... Quieres que nos demos un tiempo?
- Entonces no me amas?
- Si te amo, pero veo que tienes dudas. Quizás cambiaste de opinión respecto a tu amigo.
- Mat ya basta! Sabes que? Vamos a darnos un tiempo. Creo que es lo mejor.
Se puso de pié y se fué. Intente impedir que se fuera pero se fue corriendo mientras lloraba. Me dolió el corazón que todo acabará así. Ahora no tendría a la Fer pa follar. Tendría que volver a la vieja técnica de las visitas de Manuela. Me fuí a mi casa en micro, pensando en el camino sentí que tenía un pequeño vacío. Era algo leve, quizás por recordar la carita triste de la Fer.
ESTÁS LEYENDO
MATEO
Genç KurguMateo es un joven chileno, que dentro de su adolescencia sobreexplora el ámbito sexual, madurando dentro del área al pasar los años.