02 - Extraño

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Los rayos del sol entraban por la ventana de la habitación dando aviso a un nuevo día, acompañados con una suave brisa de viento que movía gentilmente las cortinas.

La luz cada vez entraban más en la habitación iluminandola en su totalidad, Eren se removió inquieto en su cama por la claridad que iba apareciendo.

Poco a poco fue abriendo sus ojos, parpadeó un par de veces para poder adaptarse a la luz del mañana y se levantó un poco para quedar sentado en la cama. Quejándose al sentir una punzada en su espalda baja.

Su mirada quedó viendo fijamente a las sábanas que apretaban sus puños, mientras los recuerdo de la noche anteior invadían su mente solamente al despertar, más tenía una expresión neutral en su rostro.

Tenía unas notables ojeras y sus ojos parecían haberse apagado al perder ese brillo en ellos, aparte de estar un poco hinchados, no había logrado dormir toda la noche después de lo sucedido y solamente había puesto a llorar mientras se maldecía a sí mismo, autodespreciandose.

Sintiéndose la cosa más asquerosa del mundo, o así podía describir su cuerpo.

Poco a poco fue saliendo de la cama, no tenía ánimos de nada pero al menos debía disimular de que todo estaba bien.

Después de que el hombre se fuera y se desahogó consigo mismo, como pudo recogió sus prendas y se las colocó, habían unas sábanas de repuesto guardadas en unas cajas y las utilizó para cambiar las otras que estaban manchadas, le había dolido demasiado el cuerpo por la fuerza que utilizó pero ya no se quería sentir asqueado.

Caminó hacia la puerta y salió de la habitación rumbo a los baños, sabía que se veía fatal, por eso debía de lavarse el rostro para no levantar sospechas.

Su mirada estaba en el piso mientras avanzaba, a pasos lentos avanzaba ya que el dolor aún estaba presente y le temblaban levemente las piernas.

Al tener su vista abajo no se dió cuenta que alguien con bastante prisa se acercaba y chocó su hombro con el de la persona.

-L-Lo lamento mucho -se disculpó sin levantar la vista, pero vió la punta de una bufanda roja colgada en el pecho de la persona y rápidamente levantó la vista.

-Eren, ¿Que haces aquí? Deberías estar descansando -Dijo Mikasa preocupada al verlo de pié, Eren llevó su vista a las manos de ella, las cuales sostenían una bandeja llena de comida la cual sabía que era para él.

-Mikasa... - Dijo en un susurro.

-¿Eren que son esas ojeras?, ¿No estuviste durmiendo cómodamente? -dijo apresurada, Eren se sobresaltó de que ella se diera cuenta rápidamente y solo desvío la mirada, no quería que también se diera cuenta de que estaban un poco hinchados o no dejaría de hacer preguntas.

- S-Solamente tuve pesadillas, eso es todo. Además de que la cama se le resaltaban unos resortes que no me dejaron dormir bien -mintió.

-Debiste habérmelo dicho antes, hablaré con los superiores de que haber si pueden cambiar tu cama -habló decidida, estaba a punto de dar la vuelta pero Eren la detuvo del brazo.

-D-Descuida Mikasa, está bien. Solo fue por esta vez pero lo logré arreglar. Ehhh, ¿Que te parece si desayunamos?. Muero de hambre -dijo nervioso Eren desviando el tema con una sonrisa nerviosa, Mikasa lo vió por unos segundos no tan convencida pero al final se rindió.

¡Bebé... ¿¡Bebé en camino!? - 𝚁𝚒𝚛𝚎𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora