CAPÍTULO 2

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Su cuerpo dolía , pero al removerse en su sitio un escalofrío recorrió su espalda , se sintió inquieto y dudoso
No recordaba haber subido a su cama y mucho menos arroparse con sabanas tan suaves o sedosas.
Su cuerpo se sentía en las nubes, jamás había dormido tan plácidamente como ahora , al olfatear un poco del aire a su alrededor un encantador aroma a menta y bosque llegó a él.

Aquel aroma le recordaba a alguien en especial, sus mejillas se calentaron, era un magnífico olor, pero volvió en si , ese no era su cuarto y mucho menos su olor.
Sus párpados pesados se abrieron poco a poco, sus inquisitivos ojos verdes recorrieron cada punto de la gigantesca habitación, todo estaba perfectamente colocado, sin una pisca de polvo a su alrededor, es allí cuando despertó realmente, ¿donde estaba y cómo llego ahí ?

La alegría lo reconfortó , cualquier lugar era mejor que estar con los Dursley.

Apoyo sus pies en el suelo descalzo se paró lentamente, cada magulladura latía del dolor.
Su cuerpo estaba cubierto con un hermoso conjunto de seda color beige para dormir.

Un divertido pensamiento curso su mente.

Quien sea que viviera allí tenía un gusto demasiado elegante.

Excesivo para su gusto.

Salió de la habitación recorriendo cada pasillo de esa mansión, hasta llegar a uno donde sus oídos captaron una serie de palabras casi inaudibles , estaban algo alejadas.

Los siguió, una inmensa puerta se alzaba ante él, asomó su cabeza por la puerta.

Un sonido de exclamación salió de su boca , sus labios temblaban. Sin poder articular ninguna palabra.

Una serie de miradas ,dirigieron sus ojos hacia el , por la sorpresa quiso salir de ahí lo más rápido, pero sus piernas insistían en quedarse justo ahí como si de una planta se tratase.

Sus rodillas flaquearon , sentía el golpe venir , apretó los párpados con la intención de que el golpe no se sintiera como debía.

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El día anterior habían decidido que por lo pronto nadie en su familia hablaría al ministerio de magia sobre la aparición de Harry en Malfoy Manor.

Dejarían que el hablara por si solo, pero su salud era más importante ahora, no quería alejarse de él y es por eso que le propuso a sus padres y padrino dejarlo descansar en su dormitorio. Todo el día permaneció inconsciente, claro hasta hoy en la mañana que el castaño había asomado su cabeza por la puerta.
Todos en la sala se quedaron sorprendidos por su despertar ,pero aún más por el comportamiento del moreno.

Vio como este casi se desvanece en el aire y corrió a su rescate apoyándolo en sus brazos y cargándolo hasta uno de los asientos.
A sus espaldas pudo oír dos risitas, sabía a que se debían, pero decidió dejarlo de lado por el momento.

Harry se removió incómodo en el asiento, no sabía que sucedería después.

Todos lo miraban expectantes, un leve carraspeo de parte de la señora Malfoy llamó su atención, sus ojos se veían tan comprensivos.

Dejo su titubeó de lado.

Yo no se cómo llegue aquí.....– su voz se quebró al recordar todo lo sucedido  –Pero no quiero volver a donde estaba.

Aún no se sentía preparado.

Sus manos sobre sus muslos temblaban, se negó a alzar la mirada , las lagrimas insistían en salir.
Su poco olor imperceptible era agrio.. 

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