Capitulo Tres

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Camino con la vista pérdida en los hermosos extensos jardines de Aubry Hall, sintiendo una horrible pesadez en mí corazon artístico al ver a Sophie hablando con mí madre

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Camino con la vista pérdida en los hermosos extensos jardines de Aubry Hall, sintiendo una horrible pesadez en mí corazon artístico al ver a Sophie hablando con mí madre. Sabiendo el amor por ella hacia mí familia, y hacia mí.

Paso una mano por mí cabello, no con frustración o alguna forma de angustia por mis acciones prohibidas con la fuente de mí deseo y amor. Pero, viendo cada día sus ojos verdes amables y conformes. conformes de este poco amor, y ella seguía a mi lado. (aunque el porque esta fuera de mi entendimiento).

Lo sé, es nefasto, soy ahora un caballero sin algun tipo de dignidad, un caballero que no merece algún tipo de perdón (aunque se que nunca lo pediría). Yo se que ella lo sabe, ella no es tonta, pero si una enamorada, lo cuál te lleva a tirar la lógica por la primera ventana que vez.

Cada vez qué la toco, la abrazo o la beso, mí corazón sufre por quererla, mientras ella se regocija por amarme. Mis manos queman y mí pulsó de acelera con una forma punzante de un calor veraniego qué te deja sin aliento y con malestar. Yo la quiero, pero jamás podría decir que la amo.

En cambio, ella me ama pero jamás podría decir que soy del todo suyo. Soy su esposo, vivo a su lado y duermo en la misma cama cada noche (o algunas noches casi no, por razones qué todos saben). Cómo podría ella vivir con ésto? (eso me lo pregunto en cada noche, en cada beso y en cada toque), ella no es invisible para mí, pero mí atención en ella palidece al ver el mínimo rayo de fuego qué es el cabello de mí amada.

A ella no le duele amarme, (mejor dicho no le duele vivir en ignorancia por amor) y a mí duele mucho quererle. Porque jamás podría mirar sus ojos verde musgo y sentir qué podría dedicar cada pieza de mí arte a ellos, o a su cabello dorado como el oro líquido. No podría, porque me comería la comodidad y me dejaría deseando la pasión.

Salgo de mí ensoñación realista por el llamado de mí esposa, (más no mí amada). Pongo mí mejor sonrisa, qué aunque cueste creer es verdadera, porque le quiero pase a todo lo pensando. "Cada año los jardines están más hermosos. No, querida?." Observo sus ojos durante unos momentos, antes de apartar la mirada (no con cobardía, sino con dolor).

Escucho el leve sonido de su suspiró, sabiendo en lo más profundo de mí ser que ella desea qué esto sea un momento de amor (pero solo queda en eso, un deseo). "Los jardines de este lugar son sin duda lo mejor, querido. Es increíble que hayas vivido la mayor parte de tu vida aquí.". Sus ojos me miran fijamente, dejando en claro sus intenciones de disfrutar ese paseo.

"No la mayor parte, pero este lugar tiene muchos recuerdos atesorados por mí." Mi atención se dirije hacia el árbol con los columpios, sintiendo la neblina de los recuerdos de los labios rojos pegados a los míos y el cabello como el mismo fuego atrapado entre mis dedos. "Creo que mis mejores pinturas están aquí, junto a las 'lindos' recuerdos del Pall Mall. No le digas a Daph que dije eso."

Sonrío victorioso al escuchar su risa, dejando me con el pensamiento de porque esto no podría ser así. Solo una sólida amistad, dónde en este maldito Ton nos las arreglaríamos para poder vivir la vida con lujos y amor por separado. Pero ella me ama, y yo odiaría engañarla enfrente de sus ojos.

Mí atención otra vez se ve capturada en otra cosa, o mejor dicho en la dueña de mis liensos. Entrecierro mis ojos para poder verla mejor, sintiendo como mis manos hormiguean con necesidad y una sonrisa involuntaria crece en mis labios al verle en todo su curvilíneo esplendor. Viéndola de la mano con Colín, caminando por el campo para poder llegar a la carpa donde descansan las demás que no desean estar metidas en la salvaje pelea del Pall Mall de Los 'compasivos' Bridgerton.

Lo cuál de la nada, me deja con unas intensas ganas de no jugar y dejar qué mis hermanos pasivos-agresivos me pisoteen para solamente estar en el mismo lugar, espacio geografíco o espacio corporal que el de mí amada. Sonrío con la sonrísa marca registrada Bridgerton, sintiendo mí corazón latir deliciosamente ante el sonrojó obtenido de Penelope, amando como ella buscaba mí presencia con la misma intensidad que yo.

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Muerdo mis labios con fuerza al ver a benedict en medio del campo cerca de todos sus hermanos y del brazo de Sophie. Mí corazón empieza a latir con fuerza al nuestras miradas encontrarse, sintiendo como le devuelvo la sonrisa de forma rápida y suave.

Niego suavemente con la cabeza, girando me para poder mirar a colín, viendo sus ojos azules mirando me fijamente con una ligera neblina oscura. Me despidió de el con un beso en la mejilla, y unas pocas palabras sabiendo que es lo mejor por ahora.

Sintiendo mí cuerpo picar por las palabras no dichas, y mordiendo mis uñas ante el recuerdo de lo qué pasó esa noche. Sabiendo que lo qué dije fue de corazón a corazón, no me siento mal pero el dolor por alguien a quien creí amar ni desaparece tan fácilmente. No cuando el ama, y yo solo era una niña sin saber que esperar del mundo.

Amaba a Colín, pero no como amo a Benedict. Me obsesione, lo deseaba pero no lo quería. Lo necesitaba para saber que no solo era un indeseable alhelí pero no lo amaba del todo. A Benedict no lo necesito, no necesito que el vea de qué soy capaz y tampoco necesito estar el resto de mis días a su lado como una sanguijuela. A Benedict lo amo en secreto, algo prohibido pero qué deseamos juntos. El no me necesita pero me quiere, Y yo no sangro por el, pero lo quiero.

Los demás pensamientos se esfuman de mí cabeza al ver a benedict acercarse a mí con discreción, sintiendo como mí sangre bombea felicidad y mí rostro se transforma en una vivida pintura del amor. (Río en mis adentros ante tales palabras absurdas de una romántica empedernida.)

El mínimo toque de su dedo con mí mano, y el calor de su respiración cerca de mí mejilla me saca de mí ensueño. Abro mis ojos, y lo único que puedo ver es a benedict no solo mirando me, sino viendo me mientras qué yo también lo veo. "Un maravilloso día de juegos, verdad, Benny?. Creo qué Dahpne está preparada para la batalla." Sonrío ante la risa que logro sacar de el, sintiendo como mi respiración se vuelve fácil a su lado y ya no siento lo apretando del corsé.

La sonrisa que adorna sus labios en sueve pero grande, haciendo qué sus ojos morrones brillen y que mí corazón salte como fuegos artificiales. (Ahora veo porque la reina los ama tanto.) "Ciertamente, Nel. Aunque deberías ver a Anthony, el de verdad no quiere barrer el piso hoy." Las mínimas forma de broma en sus palabras me sacan una risa Impropia para una dama. (Pero el me sigue mirando como si fuera la más hermosa.) "Creo que espera impresionar a Kate. Lástima que ella también quiere ganar está guerra."

Sin saber a dónde lleva está conversación, me quedo pérdida en el y sus sonrisas brillantes junto a sus ojos llenos de amor. Sintiendo como casa parte de lo que pasó está semana fuera nada comparado con la felicidad que sale de el por mí. Y así de fácil, olvido los momentos incómodos, las lágrimas y el trato frío solo para envolverme en benedict como si fuera la pintura en su lienzo y el la tinta en mis páginas. Algo banal, pero necesario para nosotros.

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Hola gente bella, de nuevo soy la autora de esta historia. Les quería informar qué de ahora en adelante, voy a publicar cada lunes esta historia, nosé si va a ser siempre en un horario específico pero será siempre los lunes. Porfavor dejen sus estrellitas y sus comentarios, eso me haría muy feliz🌷!.

Hasta luego, gente bella 💕 🥰!.

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