Capitulo Siete

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Agarro con fuerza la tapa del inodoro, sintiendo como la bilis asquerosa sale de mí garganta para poder liberarme de el malestar en mí estómago

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Agarro con fuerza la tapa del inodoro, sintiendo como la bilis asquerosa sale de mí garganta para poder liberarme de el malestar en mí estómago. La discusión con Colín aún persistente en mí mente, y sus lamentos a gritos sonando como ecos en mí mente mientras tomaba un caruaje para ir a "My cottage" hace solo unas horas.

Luego de vaciar por cuarta vez mí estómago en el pobre retrete, me dejó sentar en el suelo para poder encontrar algo de aire y descansar mis rodillas ya demasiado dolidas por vomitar tan seguido en estás últimas semanas. Después de unos minutos de descanso merecido, me levanto y enjuago mis dientes para poder salir de este baño lo más rápido posible.

Caminando por los pasillos de madera con hermosos cuadros, el malestar en mí cuerpo se vuelve a aliviar pensado en los recuerdos de Benedict y yo en cada rincón de esta cabaña no tan cabaña. Río bajo ante mí pensamientos de un Benedict ermitaño sin querer salir al mundo exterior solo para poder estar todo los días conmigo.

Me detengo en un cuadro de mí misma, recordando el camisón azul de seda y el sillón rojo que benedict usa en su estudio. (por primera vez los recuerdos llenando de alegría mí mente.) Teniendo grabado en mí mente sus ojos verdes que nunca querían salir de mi cuerpo pero al mismo tiempo demasiados centrados en los detalles de su arte.

Suspiró por, lo que yo creo, milésima vez en el día y siendo consciente de los acontecimientos que tuvieron lugar en estos días podría haber gastado todos los suspiros de una vida. Mi mente vuelve al recuerdo de Colín y su voz quebrada resonando con fuerza después de mí partida, para mí propio gusto, demasiado cruel.

Soy una cobarde. Es el primer pensamiento que viene a mí mente, y curiosamente es demasiado cierto en estos momentos. Aquí en la cabaña de mí amante y el amor de mí vida, oculta de los ojos de cada persona de la Ton y la misma familia que siempre estuvo para mi. Solo para reírme y sentirme feliz después de destrozar la vida de Colín, en vez de cobarde, esto ya roza lo desagradable.

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Sintiendo la briza mover mí cabello mientras bajo del caballo, sintiendo como mí cuerpo tiembla y el recuerdo casi atormentador de Sophie llorando taladra mi mente como una apuñalada en la garganta. Tomando un momento para recomponer me, o mejor dicho para dejar de sentir el asqueroso sentimiento de fracaso en mí pecho.

Sintiendo como mí cuerpo se tambalea para empezar a caminar por el pasto elevado que a momentos golpea mis pantorrillas. Viendo a lo lejos "My cottage", apresurando mí caminar para poder entrar a ese lugar seguro y recibir el abrazó de mí amante con desesperación.

Abriendo la puerta tan pronto como llego a la entrada, sin intentar pensar en como subí los escalones de dos con dos como en ese momento que deseo dejar de recordar. Quitando mí chaleco sin mirar a dónde a acabado, y tirando de la corbata que antes sentia que estrangulaba mí cuello.

En qué momento paso?...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora