Capítulo 33

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El Bolígrafo♤

Céline

Salgo de la oficina - ¿qué esperan?.

- es tu esposa no la nuestra - escucho el ruido de la silla de Elian - esta bien, así quien no va - opinan los dos en coro.

Camino por el pasillo, mis tacones resuenan en la madera - mi señora - una de las mujeres me saluda, la observo y paso de largo.

- solecito, no corras - dice estando fuera de la mansión, Zeus toma mi hombro.

Una bala se impacta cerca de sus pies, este salta asustado, me giro y veo a Elian - ¡hombre que solo le tocó el hombro! - grita Misha.

- el hombro y una mierda, nadie toca a mi mujer - Zeus y Misha murmuran un loco de mierda.

- damas primero - comenta Misha alejado de mi.

- no pedí guardaespaldas - me ven.

- tu no pero el si - Zeus lo señala.

Ruedo los ojos, y caminamos hacia la camioneta, Dylan aparca frente nosotros, ruedo los ojos - ¿necesariamente tienen que ir los tres? - los tres asienten.

- es necesario solecito - Zeus hace una pausa - podrías matar a esa mujer y no queremos que estés en la cárcel, además somos tres hombres los cuales no puedes dominar.

- eso no pasará - me ven.

- ¿lo de la cárcel o el asesinato? - preguntan en coro.

- lo de la cárcel - ponen cara de horror.

Subimos a la camioneta y Dylan conduce en silencio, Zeus suelta una risa, frunzo el ceño.

- Hebe quedate quieta - arqueo una ceja, Misha me observa y ríe.

- Hebe es su hurón - no hago preguntas.

El animal salta hacia mi, suelto un grito porque me ha tomado desprevenida. Se lo entrego y me dedico a ver por la ventana.

- ¿por qué no hablas solecito? - aparto la mirada de la ventana, veo a Zeus.

Dylan aparca la camioneta sin decir nada, Zeus toma mi mano y me abraza - sácalo, solo así podrás ser tu de nuevo - lo veo.

- lo extraño, se supone que hoy iríamos a nuestra guarida - acaricia mi cabello.

- ¿podrías mostrarnos su guarida? - veo a Misha.

- tienen que trabajar con Elian - niego - suficiente con que me acompañen - los tres niegan.

- dime dónde es y te acompañamos - habla Dylan.

- ¿porque? - los tres me ven con cariño.

- con el tiempo lo entenderás, solecito - me quedo en el pecho de Zeus.

Le indico a Dylan hacia donde debe de ir, nos desviamos de el camino y una llamada entrante nos hace fruncir el ceño, Dylan responde y coloca el altavoz.

- ¿por que se desviaron de el camino? - frunzo el ceño.

- ¿cómo sabes que nos desviamos, escoria? - pregunta Misha.

- yo pregunte primero.

Zeus suelta una risa - vamos a follar a tu mujer, ella dijo que quería un trío y ve que Misha y yo estamos muy dispuestos, Dylan se acojono.

Le pego en el estómago y este ríe - Zeus - lo amenaza.

- tranquilo escoria, solo vamos a dar una vuelta y ya, no confías en tu mujer - lo molesta.

Una Melodía Mortal (+21)  (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora