Memento Mori || Pietro Maximoff ||

Anchored in anger

We always start with good intentions, but lose ourselves along the way - Nothing More / This is the time (Ballast)

(Hace dos semanas atrás)

Había despertado, pero no me atrevía a abrir los ojos porque sabía que estaba rodeada de agua. Respiré profundo dentro de la máscara de oxigeno y me preparé para lo que sea que venía a continuación. De un momento a otro, sentí como los cerca de 30 cables conectados a lo largo de todo mi cuerpo comenzaban a introducir un líquido espeso de color negro. No logre aguantar el dolor y comencé a gritar, solo haciendo que varias burbujas salieran a través de la máscara. Comencé a moverme en un intento de alejar los cables de mí, pero las cadenas que afirmaban mis brazos y piernas apretaron su agarre. Podía sentir sus rostros observando el espectáculo.

"Dejarte llevar, mi querida Samantha. Deja que entre a tu cuerpo y te transforme en lo que más deseas"

"No puedo... el dolor..."

"Te prometí darte lo que querías, yo no rompo mi palabra. Seremos libres"

Deje de oponer resistencia y pude sentir como el líquido negro corría por mis venas. Comencé a sentir dolor en todos los órganos de mi cuerpo, sentía que me quemaba por dentro. Quería desmayarme, pero el factor curativo me impedía arrancar del dolor.

De un momento a otro todo se volvió negro. Las cadenas en mis extremidades dejaron de pesarme y los cables ya no estaban más conectados a mí. Todo el dolor se había esfumado, dejándome en una sensación de libertad. Era consciente de cada parte de cuerpo, de la punta de mis pies hasta el último cabello.

"Esto es lo que se siente al morir?"

"No mi querida- escuche una pequeña risa dentro de mi cabeza- qué es lo primero que quieres hacer?

"Quiero recuperar mi libertad"

El vidrio que me rodeaba reventó en millones de pedazos, accionando la alarma. El agua se escapo por todos lados de la habitación. Nada me sostenía y aún así no caía. Abrí los ojos y me encontré flotando a casi dos metros del suelo. Pude notar como todo mi cuerpo estaba rodeado de una neblina de color negro, similar al poder de Wanda.

Retire la máscara de oxigeno y los cables. Las cadenas no presentaron un impedimento. Miré a mí alrededor y todos parecían sorprendidos. Él se paro frente a mí y sonrió sínicamente

-sabías que lo lograrías, aunque por un instante pensé que te habías muerto- dijo riendo- pero me alegra saber que mi Netvor sobrevivió- levante mi brazo y él termino frente a mí. La misma neblina que estaba alrededor mío lo sostenía del cuello a mi altura. Comencé a cerrar mi puño y sentí la presión que ejercía en su cuello

-no soy tu Netvor- dije. Mi voz sonaba diferente

-vamos, mátame, sé que lo quieres hacer. No eres un monstruo si no matas a tu creador

-tú no eres mi creador- dije y aumente la presión

-no, claro que no. Tu creador está esperando a que le rindas homenaje a su amada Muerte- volvió a sonreír- veo que disfrutas ser tu misma. Pensé que terminarías rechazando a la gema, pero veo que se llevan bastante bien.

-no dejaré que le hagas daño a nadie más- dije, apretando los dientes

-vamos mátame, lo espero

-era un monstruo antes de que me convirtieras en esto

Su cuerpo sin vida cayó al suelo. Comencé a bajar hasta que mis pies descalzos tocaron el suelo húmedo. El resto de la gente a mí alrededor se acerco a mí con la clara intención de detenerme, pero el movimiento de mi mano hizo que todos cayeran inconscientes.

Miré mis manos, la neblina estaba concentrada en ellas. Podía sentir cada cosa a mi alrededor, aturdiéndome en primera instancia, pero luego todo parecía tener sentido en mi cabeza.

Los pasos me avisaron de que todos los guardias del lugar iban en mi dirección. Miré en dirección al norte del edificio y pude sentir como las celdas eran abiertas. Volví mi vista a la habitación y me vi rodeada de guardias. La niebla pareció tomar forma y formó en mi mano una hoja, similar a la de una espada, del mismo color.

"Hazles pagar por cada gota de sangre que derramaste"

Mi ropa estaba manchada de sangre y varios cuerpos estaban a mí alrededor. Los que alcanzaban a correr les avisaban a los demás de que salieran del lugar. Camine sobre los cuerpos descuartizados y salí del lugar, dándole caza a cada una de las personas que estaban en el edificio. Pude ver como accionaban la autodestrucción del edificio. Si no podían detenerme, intentarían matarme.

El fuego comenzó a invadir el lugar de un momento a otro, acabando con todo a su paso. Todo a mí alrededor se sentía como una extensión de mí. Podía ver el fuego, podía sentirlo, pero este no me causaba daño, sentía como me acariciaba, como el pelo en mi espalda. Pase por el lugar de las celdas y pude ver cómo estaban vacio. Había logrado salvar a mis amigos.

Ahora solo quedaba yo en el infierno.

Comencé a caminar sin rumbo hasta que la brisa del exterior removió el pelo de mi cara. No quería levantar la vista, pero mis pies sentían la tierra bajo ellos. Era libre.

Levante la vista y me encontré con varias personas viéndome. Las recordaba.

"Hazles pagar por cada lágrima que derramaste por ellos"