11-Ataques

2K 209 23
                                    

Tras unos días, Tn pudo recuperarse del todo de su fiebre aunque todavía se sentía algo débil por todo el poder empleado. No recordaba absolutamente nada, pero sabía que había empleado su poder por los síntomas. La verdadera personalidad del chico les pidió que tuvieran mucho cuidado con el acosador. A pesar ahora de ser de nuevo ese Tn tímido, escuchó todo lo que había sucedido y finalmente le contaron todo. Había llegado el momento y ya era mayor.

—Así que...yo mismo sellé mis poderes—comentó temblando un poco por todo lo que acababa de escuchar por parte de las chicas y su hermana.

—Lo siento Tn—Enid le tomó la mano—pero estamos aquí, cualquier cosa dilo—el chico al tenerla tan cerca y sentir sus dedos, se puso algo rojo.

—Bueno, ya está bien—Miércoles los separó—me tienes a mi para defenderte. Además, si ocurre algo liberas tu poder y listo.

—Aunque...—dijo de pronto Lilliana—hay algo que no entiendo, creo que últimamente está saliendo su verdadera personalidad.

—¿Qué quieres decir?—la loba la miró curiosa.

—Es solo una posibilidad, pero puede que el hechizo que sellaba sus poderes se esté agotando. Eso sería a causa de liberar tantas veces por el peligro—respondió.

—Ciertamente es una posibilidad—comentó Miércoles—ahora lo primordial es dar con el acosador.

Esa tarde, Tn estaba en la habitación descansando y leyendo algo cuando escuchó la puerta. Era Enid quien le preguntaba que estaba haciendo. Debido al ataque, se prohibió ir a Jerichó por mera precaución. Dio unos pequeños saltos hasta acercarse a la cama y tumbarse a su lado.

—Que cama más cómoda y espaciosa—dijo.

—Es porque es más nueva—respondió—además, tú tienes muchos peluches.

—¡Claro que no!—replicó la loba inflando las mejillas.

—A este paso necesitaremos una academia más grande para guardarlos—comentó bromista.

Ella se quedó en shock ante tales palabras y se hizo la ofendida.

—¿Desde cuándo eres tan bromista?—preguntó—creo que prefería al Tn callado.

—Lo siento—se disculpó agachando la cabeza.

El tono, la cara y el verlo de esa manera provocaron en Enid un vuelco en su corazón. Lo veía tan de cerca, esos ojos...su cuerpo le pedía abalanzarse a él por completo para devorarlo. Ella respiraba lentamente, sentía como el calor de su cuerpo aumentaba por segundos. Entendió enseguida que empezaba a pasar por esa etapa de celo.

—Tn—se acercó y le dio un beso en la mejilla ante la sorpresa de éste.

Añadido a eso, el olor que emanaba era tan bueno que Enid sacó la lengua para relamerse, era como si una loba hambrienta que llevaba tiempo sin comer estuviera delante de un gran trozo de jugosa carne. Ella quería resistirse, nunca antes había sentido tal sensación y el sudor se hizo presente. Tragó un poco de saliva. Pero Tn la veía algo asustada, esa mirada no tramaba nada bueno. De hecho, sus pupilas ya eran la de una loba transformada.

—¿Enid?—preguntó temeroso.

—Tn—se fue acercando mientras lo sujetó de las muñecas.

El chico no podía escapar, estaba algo asustado para emplear su poder, pero si estuviera realmente en peligro el verdadero él habría salido.

—Venga Tn...tienes que salir de está—pensaba viendo a la loba cerca—¿por qué no libero mi poder?.

Y entonces llegó él-Enid x Tn x MiércolesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora