𝕌ℕ ℂ𝕆ℝ𝔸ℤ𝕆ℕ ℚ𝕌𝔼 ℕ𝕆 𝔻𝔼𝕁𝔸 𝔻𝔼 𝕊𝔸ℕ𝔾ℝ𝔸ℝ

152 19 2
                                    

==============================

𝔼𝕃 ℍ𝕀𝕁𝕆 ℙ𝔼ℝ𝔻𝕀𝔻𝕆

==============================

Conner se despertó con un intenso dolor de cabeza.

Apenas podía abrir los ojos y sentía entumecida cada una de sus extremidades. Como pudo, se envolvió a sí mismo entre sus brazos. Aún no se había dado cuenta del lugar en que se encontraba, pero algo en el ambiente le hacía sentir miedo.

Permaneció en esa posición hasta que el cansancio lo llevó nuevamente a la inconsciencia. Cuando abrió de nuevo los ojos, se sintió un poco mejor que antes, pero el miedo que sintió antes no disminuyó en lo absoluto. Quiso levantarse de donde estaba, ya que tenía la esperanza de encontrar alguna salida para escapar de su encierro, pero cuando trató de dar dos pasos seguidos, su cuerpo lo llevó directo al suelo.

Un fuerte quejido escapó de sus labios ante el dolor causado por la caída. Trató de mantener oculto su disgusto ante la situación, porque no sabía si sus captores lo estaban vigilando. Pero a medida que pasaba el tiempo en esa habitación con luz roja, su pecho se oprimía cada vez más.

Los sollozos escaparon involuntariamente de su boca, al igual que las lágrimas, y las dudas sobre lo que pasaba no le facilitaban las cosas.

—Superhombre. — llamó al héroe, creyendo que este lo escucharía y vendría en su auxilio. —Superman, ¿dónde estás? — lloró, pero por más que lo nombrara, el reconocido superhéroe no venía a su auxiliar.

Empezó a creer que había sido capturado por Cadmus, lo que le hizo emitir un grito lleno de horror ante la idea. Trató de levantarse para intentar escapar, a duras penas logró ponerse de pie, su cuerpo aún se sentía débil y amenazaba con llevarlo al suelo otra vez.

Pero hizo su mayor esfuerzo para acercarse a una pared y luego le dio un puñetazo con toda la fuerza disponible que tenía, aunque al hacerlo, no hizo más que lastimarse los nudillos. Aterrado, caminó despacio hacia una esquina, donde escondió su rostro entre sus piernas cuando logró sentarse en el suelo sin lastimarse en el proceso.

—Superhombre. —murmuró sin poder contener su llanto. — Por favor, ven a salvarme. — dijo, para luego empezar a llorar sin control, esperando que su llanto no molestara a los científicos, porque aún quería seguir siendo el mismo antes de que le lavaran el cerebro.

==============================

𝔼𝕃 ℍ𝕀𝕁𝕆 ℙ𝔼ℝ𝔻𝕀𝔻𝕆

==============================

Conner no sabe cuánto tiempo pasó desde que despertó la última vez. Bien pudo haber pasado media hora, dos horas o un día entero, pero él no había sido capaz de darse cuenta debido a lo que sentía. Su corazón latía fuertemente, tanto que podía escucharlo sin la necesidad de utilizar su súper audición, su cuerpo se estremecía de vez en cuando, y cuando el llanto no parecía ser una molestia suficiente, empezó a tener arcadas.

Nunca antes había experimentado la sensación de su estómago queriendo devolver todo lo que contenía, pero la primera experiencia de aquel malestar fue totalmente desagradable. Conner lloró sin parar, tanto que llegó a pensar que en algún momento se iba a deshidratar.

Pero antes de que la deshidratación llegara, la esperanza de ser salvado estaba a punto de escapar de sus manos.

No sabía qué esperar, no sabía en qué pensar para sentirse tranquilo, pero parecía ser que estaría condenado de por vida si seguía en ese lugar.

𝔼𝕃 ℍ𝕀𝕁𝕆 ℙ𝔼ℝ𝔻𝕀𝔻𝕆 𝔻𝔼 𝕊𝕌ℙ𝔼ℝ𝕄𝔸ℕDonde viven las historias. Descúbrelo ahora