Memories

Capítulo 42

Uno, dos, tres llamo al timbre y escucho como alguien gira la persiana para abrirme, muerdo mi lengua al ver parado enfrente de mi a Cristhian.

-Hola Lacey- me saluda sonriendo, está muy sereno, doy gracias a dios de que no se haya aferrado a la idea de odiarme, después de todo comenzaba a tomarle afecto, dejo escapar todo el aire que sostuve en mis pulmones y consigo sonreír de vuelta.

-Hola Cris- se acerca a mi y me besa la mejilla en señal de saludo.

-Pasa por favor- dice sincero y me abre paso para entrar a su casa, tal parece que está solo porque no se oye ningún ruido ademas del televisor.

-¿y a que se debe tu visita?- pregunta sonriendo y me revuelvo incómoda.

-Verás, he estado pensando, más bien en mi ultima visita al hospital prácticamente me dijeron que me iba a morir en cualquier momento- aclaro mi garganta cuando el me mira atento y preocupado, eso parece.

-me encerraron un mes apartada de la sociedad- rió por lo bajo y continuo -En ese mes estuve pensando en que si me moría...-

-No digas eso- dijo serio y proseguí -En fin si me llegaba a morir, no quisiera irme sin pedirte una sincera sincera sincera disculpa por...por todo exactamente- mi cabeza da vueltas y mi corazón late a un ritmo acelerado.

-Yo, dime quien soy yo para juzgarte, hice una completa estupidez y espero tu seas la que me perdone, por no haber ayudado a Liam mientras pedía ayuda cuando tu caíste inconsciente entre sus brazos, yo...estaba ciego de rabia- pasa las manos por su rostro y luego toma las mías - Lacey yo te amé, no más bien aun te amo, pero, se que tu quieres a Liam, ¿quien sería yo para impedirles estar juntos?- lo miré tierna-mente y la culpa me empezó a consumir.

-Te quiero Cris- suspiro y lo abrazo, este chico es un amor.

-Si, anda... ve a verlo- me anima y escolta hasta la salida, nos despedimos como si nada hubiera pasado dejándome cada vez más aturdida, pero bueno ve el lado amable, cena con Liam y su familia.

Confieso que toda esta cena me da un poco de mala espina, mis padres no son tan así de sencillos de cambiar su opinión, pero bueno, hay que sacar lo mejor de lo peor.

En fin que como no tengo nada mejor que hacer y como en casa mis atuendos no son...digamos muy apropiados para una cena con mi novio y los padres de mi novio, esa palabra es tan rara, novio, novio, novio, en fin, tomé un taxi, ya que desde mi accidente mis papás no me dejan llevarme el carro a ninguna parte, ni al colegio en todo caso y suponiendo que me dejasen llevarlo, pues yo ya olvide cómo se maneja, hay cosas en las que he avanzado recordar y hay otras de las que mi memoria no se acuerda para nada , pero bueno, iré al centro comercial a comprar una falda o un vestido o haber para que me alcanza.

Una vez llegando allí me sentí un poco rara al estar sola porque todos van en pareja o en grupos, pero bueno eso da igual yo siempre fui independiente, o eso creo, en fin, un aparador llamó mi atención en donde colgaba un bello vestido de ese maniquí era color violeta y vamos ese es mi color favorito, así que sin pensarlo lo compré, ya se que deben estar pensando ¿quién compra un vestido sin medirlo antes? pues yo, y para mi suerte todos me han quedado, tal vez sea que tengo cuerpo de pordiosera o no lo se, jaja me tiene sin cuidado, pero ahora que lo pienso solo tengo zapatos deportivos, vamos en tu otra vida fuiste no fémina, que vivan las no féminas, así que me fui a una zapatería al azar, si todo estaba cerca y en una sola tienda, para que estar busca y busca en varias tiendas, en fin entré a esa y me probé unas lindas zapatillas cerradas y que hacían juego con el vestido, esas si me tarde un poco en medirlas, pero al fin que las conseguí y salí feliz de esa tienda.

-Hey Lace- grita Luke desde el otro lado del centro comercial ignóralo grita mi subconsciente y apresuro el paso, todo bien hasta que se pone frente a mi con su estúpida sonrisa encantadora y trato de parecer casual.

-Hola no te había visto- sonrió tan forzosamente como puedo.

-Se que si, no hace falta que finjas- dice éste e intento escabullirme hasta la entrada.

-¿Cómo has estado?- lo miro extrañada.

-Igual que siempre y bueno considerando que todavía estoy vivita y coleando, debe ser un gran avance, pero ya me voy- digo y él me sigue.

-¿A dónde vas?- está vez lo fulmino frustrada.

-A casa ¿te importaría dejarme ir si no es mucho pedir? por favor- me sonríe apenado.

-Solo me dejas llevarte- dice y asiento.

-Vamos afuera está mi moto- ¿tiene una moto?

-okays- salimos del centro comercial al fin y agradezco a dios de solo haber traído una bolsa cargando para sostenerme de Luke, si, le temo a las motos, pero en fin, llegamos a casa sanos y salvos.

-Gracias- digo bajando y le entrego su casco.

-Ah de nada, espero y podamos ser amigos después de todo lo que pasó entre nosotros dos. dice algo tímido y me enciende del enojo.

Hay si no te preocupes que al fin y al cabo tu no tuviste la culpa de que sufriera bullying gran parte de mi vida.

-Claro, nos vemos después- nos despedimos y entro a casa algo enojado, pero entusiasmada, si soy bipolar.

-Me voy a arreglar- le digo a mi mamá, y es que me voy a bañar, rizar el cabello, vestir, maquillar, ponerme bella.

Holas chiquillos, gracias por esperar, a partir de ahora Memories se reabre (aplausos imaginarios) han aumentado los votos y visitas y eso me hace feliz, mañana nos vemos y no olviden votar y comentar. Besos con baba :*