La noche había llegado y Moisés todavía no estaba seguro de ir hablar con ikeni.
-No tienes nada que perder- se dijo así mismo para salir del palacio no sin antes decirles a los oficiales que iría a visitar a su familia a la Vila de los hebreos, el camino hacia el nilo fue corto aunque hubiera querido dejarlo plantado su humilde corazón no pudo.
-Hola-dijo el general cuando vio al joven hebreo
-Hola- respondió Moisés cortante- espero que seas rápido ikeni- hablo
-Lo siento tanto Moisés- trato de acercarse al nombrado pero este lo detuvo- se que debí decirte lo que pasaba con karoma desde el principio fui un cobarde-
-Si lo eres- dijo el hebreo- llegue a pensar que karoma era tu prima- sonrió con amargura pero por alguna razón no le afectaba tanto la relación de ikeni- la verdad me decepcionaste ikeni confíe en ti pensé que eras diferentes a los demás pero veo que eres peor-
-No digas eso Moisés- se defendió
-¡Si lo digo ikeni eres peor!-
-Pensándolo bien no tienes derecho a reclamarme nada tú duermes con Ramsés casi todas las noches-
-Enserio ahora vienes y dices eso por lo menos tu sabías de mi relación con el rey nunca te mentí tú muy bien sabías todo Ikeni-
-Por favor dame una oportunidad-
-Una oportunidad cuando te vas a casar-
Ikeni no sabía que hacer que decir Moisés simplemente lo rechazaba.
-Fue un imbécil pensé en decirte pero simplemente no me atrevía quizás tienes razón soy un cobarde perdoname por favor Moisés-
-Está bien ikeni- dijo Moisés y el general sonrió con sus ojos brillosos- pero no te hagas ilusiones esto que teníamos se acabó solo puedo ofrecerte una amistad- dijo mirando al general que ahora estaba serio- Ya no puedo confiar en ti como otra cosa lo siento-
-Pero si puedes confiar en Ramsés- dijo con odio en sus palabras- el es peor que yo Moisés y confías en el-
-Que no se te olvide que éstas hablando del horus vivo en la tierra ikeni- dijo con una karma que solo el poseía-Y no te permito que te dirijas a Ramsés como cualquier hombre , el no es un simple general ikeni- dijo para marcharse
-¡Te enamoraste de el! ¿Verdad?- dijo hacíendo que Moisés dejará su caminata para mirarlo-
-No lo sé- dijo con sinceridad , ikeni iba a decir otra cosa cuando se apareció el general bakenmut
-¿Que está pasando aquí Ikeni?-
-Nada bakenmut- dijo el general
-Con su permiso- dijo Moisés para retirarse
-Asi que nada ikeni-
-Te lo explico luego-
-No necesito que me expliques nada escuché todo ikeni y como amigo y como tú jefe te recomiendo que te alejes de Moisés el rey está muy encaprichado con el, no quiero verte muerto y si te acercas a el con intención de otra cosa hablaré con karoma está claro- dijo mirando a ikeni que solo asintió
....
Ramsés estaba más que ancioso su primogénito estaba apunto de nacer y quería estar al tanto de todo pero por la pronta noticia que le habia dado maquil tendría que ausentarse por dos o tres semanas y para eso su primogénito estaría en el palacio.
-Pacer necesito hablar contigo- dijo Ramsés mirando al sacerdote- voy estar a fuera del palacio por algunas semanas por motivos del reino quiero que estes a cargo de nefertari se que ella es tu hija y no necesito mandarte a cuidarla-
-Cuente con eso mi soberano- respondió
-Me llegó la noticia de que el hijo del rey de moad está en camino-
-Espero que todo salga bien mi soberano y que los dioses esté con usted y sus soldados-
-Gracias pacer saldré esta noche con las tropas para encontrarme con zur en el camino-
-Todo estará bien mi soberano y por nefertari no se preocupe-
Ramses sonrió para luego salir de la sala del trono necesitaba relajarse no sabía cómo sería ese enfrentamiento contra Babilonia tenía tanto tiempo que no participaba en una guerra que era difícil no ponerse algo nervioso.
Camino hacia la habitación donde se encontraba el hebreo que tanto quería y que no le importaba en lo absoluto su origen.
-Soberano- dijo este cuando vio a su rey- ¿necesita algo?- pregunto
-Si- dijo acercándose- te necesito a ti Moisés- abrazo al nombrado para luego darle un beso tierno- que te parece si vamos un rato al Nilo-
-¿Es una cita?- pregunto sonriendo
-Algo así ¿aceptas entonces?-
-Claro que acepto pero está vez sin afrodisíaco por favor- dijo Moisés al soberano el cual abrió los ojos con asombro
-M- Moisés puedo explicarlo- dijo nervioso Ramsés como Moisés supo del afrodisíaco
-No tienes que explicarme nada bueno por ahora quizás hablemos del tema cuando estemos en el Nilo pero ahora necesito terminar de arreglar algunas cosas-
-Entiendo mandaré a buscarte en 20 minutos ¿Si?- Moisés asintió y luego le dio un apasionado beso a su rey.
Otro capítulo para no perder la costumbre.
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Eres mío
RandomDonde el rey Ramsés se enamora de Moisés un hebreo que baila en la casa de zenet que pasará cuando el rey queda encantado por ese hermoso hebreo.