I can wait for you - young miko

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- nos vamos pa' mi apartment? -
Me susurró en el oído, mientras bailabamos.

- dale, de una -

Ya sabía por dónde iban las intenciones de Vicky, y yo no me iba a negar.

Cuando nos subimos al auto, comenzó a manejar hacia su departamento. Se notaba la tensión sexual en ambas.

En medio de un callejón, que estaba totalmente vacio, detuvo el auto.

- mami yo no me voy a aguantar hasta llegar al apartment -

Juntó nuestros labios en un beso desesperado, tomandome por sorpresa. Sus manos me causaban una sensación curiosa, recorrían mi cuerpo causandome escalofríos, escalofríos que nunca había sentido antes.

Nunca había estado con una mujer en mi vida, pero siempre hay primeras veces.

De un rápido movimiento, me hizo quedar sentada sobre ella, pasando a estar las dos en un solo a asiento.

- baby, yo amo como te vistes, pero e' bien complicado quitartelo -
Me rei, estaba intentando sacarme la tela de encaje que iba sobre la camiseta, pero no queria que la ayudará. Si seguía como lo estaba haciendo, lo iba a terminar rompiendo.

- espera boluda, está abrochado atrás -
Le dije riéndome, lo captó enseguida y me lo desabrochó dejandome solo con la camiseta, quitando la parte más difícil.

- tu te vistes bien complicado, cada truco tienes -
Habló mientras me quitaba la camiseta, y después el sostén. Me miraba a los ojos para notar mi nerviosismo, yo me sentia incapaz de mirarla, la vergüenza me invadía.

Gemi al sentir su boca dirigirse a mis pechos. Dejando caer mi cabeza, creo que por así decirlo, nunca estuve con nadie por mi propia voluntad o que yo quisiera.

Entre gemidos y los sonidos de la boca de Victoria al succionar y besar, me volvía loca.

Su teléfono comenzó a vibrar en el bolsillo de su pantalón, cosa que hizo que Victoria se detuviera.

Agarró el teléfono para contestar, protestando.

— Que mierda quieres, Isabella? —

— has visto a mi mamá? —

— no estoy en casa, deja de molestar —
Colgó la llamada y apagó el teléfono, para verme reír de su enojo.

— al carajo —
Volvió a mis pechos para sacarme de la risa, sentía mi centro arder, tenía muchísimo calor, y era capaz de hacer cualquier cosa.

Después de unos minutos así, volvi a mi asiento y ella arrancó el auto para su departamento.

Mi respiración era agitada, miraba el camino para distraerme de su mano en mi muslo. Mi remera cuando me la volví a poner quedó desacomodada, causando una imagen un cierto "provocativa" según Vic.

Cuando llegamos a su apartamento, no tardó en tirarme a la cama.

— no sabes cuánto esperé por esto —
Me quitó toda la ropa, dejándome en ropa interior. Sus ojos estaban de un tono más oscuro que lo normal, estaba despeinada, y la ropa sin acomodar, pero wow, que hermosa se veía.

Estaba tan distraída en verla, que ni siquiera me di cuenta que sus dedos estaban jugueteando mi entrada. Sin llegar a penetrarme, solo dándome caricias por los costados.

— Vicky, dios —
Mi exitacion era grande, pero necesitaba sentirla dentro mío, no podía seguir así.

— diablo, mami, esta' bien mojaita' —
Sentí dos de sus dedos recoger mi humedad, me llene de escalofríos con el mínimo tacto.

Me comenzó a estimular hábilmente con sus dedos, y dios mío, los gemidos eran incontrolables. Mis ojos se viraban hacia arriba, y cuando hundía más sus dedos en mi, sentía que me iba al puto paraíso.

La escuchaba susurrar cosas que eran inaudibles para mí, sus dedos aumentaban cada vez más y más la velocidad.

Nunca en mi puta vida había sentido un orgasmo, y creo que estoy a nada de sentir el primero.

— es la primera vez que estás con una mujer, no? —

Asentí, lo último que quería era que me empezara a hacer preguntas, solo quería concentrarme en lo que estaba haciendo.

Gemi casi que gritando, y dios.

(. . .)