su mascota

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todo estaba oscuro, se sentía desconocido, algo en mi me decía que estaba en peligro trate de levantarme pero no pude, no sentía mi cuerpo, me dolía todo, igualmente aun si lo intentará todo sería en vano vi mis manos esposadas a la cama ¿qué fue lo que hice ayer? me sentía perdido, comencé a gritar y tratar de quitar las esposas de mis manos pero es imposible, escuche la puerta abrirse ¿seré rescatado? soobin entró sin decirme nada me asuste demasiado al verlo sentía que perdía el aire y lágrimas brotaban de mis ojos.

—yeonjun... ¿yeonjun porque no pude violarte? —dijo soobin acercándose a mi.

me asuste al escuchar su voz y sus fuertes palabras, no puedo creer que intento hacer eso me retorcía en la cama para tratar de salir pero mi cuerpo no daba para más, soobin mira el circo que hago para el con una sonrisa ¿cuánto daño me hará?

—eres tan débil, ni lo intentes no escaparas de mi.

el señor soobin se acercó a mi lentamente y me comenzó a besar sentía su lengua dentro de mi giré mi cabeza de lado a lado pero es imposible quitarlo de encima, metió sus manos debajo de mi camisa pero después bajo hasta tocar mi intimidad, me siento tan inútil. soobin es tan asqueroso, comencé a llorar nunca pensé que esto podía pasar.

—¿por qué lloras? ¿acaso no te gusta? —menciono susurrando al oido —deberías llorar para rogarme porque te la meta.

sus palabras me perturbaban demasiado, tengo miedo de que me fuerce a tener sexo con el aunque creo que ya lo está haciendo.

—no quise violarte por mas que mi tentación era alta, quería escucharte, ver tu rostro con claridad.

no entiendo el porque me hace esto que fue lo que le hice, porque cuando me ve solo piensa en sexo, esto es tan tonto, se que parezco un inútil frente a él pero me molesta tanto no poderme defenderme ni un poco.

—soobin por favor déjame ir, no tengo nada para darte, así que no se que es lo que quieres de mi.

—lo que quiero de tí es tu cuerpo, desde que te vi en el restaurante tuve la necesidad de tenerte, ¿no saldrás de aquí verdad? —dijo mientras sacaba una navaja de su pantalón —si quieres huir te irá muy mal —exclamó pasando la navaja por mi cuello.

soobin se acerco a mi y comenzó a olerme como un perro, para después besarme y morderme, odio lo que me está haciendo sentir ahora mismo, soltaba unos pequeños quejidos debido al dolor.

—yeonjun aun no quiero acostarme contigo, no hagas esos sonidos, ¿quieres que te bese más?

lo vi bajar hasta mis piernas las cuales beso hasta dejar marcas, odio su tacto, desearía que todo esto sea una pesadilla, estoy tan cansado de todo esto, peго algo me dice que apenas es el comienzo, cuando por fin se alejó de mi me sentí algo aliviado observe como buscaba algo entre sus cajones junto a la cama saco un arma y apunto hacia mi, sentí mi vida pasar a través de mis ojos, note un listón entre sus manos con el que cubrió mis ojos, me preocupaban sus movimientos pero esta ves no quise defenderme con una arma en la mano en cualquier segundo podía matarme pero pues ya no se que es peor.

tengo los ojos vendados y no escucho nada pensé que tal vez el se había ido hasta sentí la pistola apuntando mi cabeza pensé "hoy es mi fin".

soobin pasaba la pistola por todo mi cuerpo lentamente mientras mordía mi cuello podía escuchar sus risas, mi piel se erizaba, la arma se sentía tan fría y el cuerpo de soobin caliente.

—tu cuerpo está temblando, tan lindo, serás mi mascota a partir de ahora ¿verdad?

sus palabras me confundían al igual que sus acciones me gustaría saber que es lo que hay en su mente, ¿por qué yo?

—se que te encantará que juegue contigo, podemos hacer cosas mas emocionantes después, o tal vez ¿quieras hacerlo ahora?

violinist - soojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora