- ¿Dónde se habrá metido esa maldita puta? Seguramente solo me usó como el resto de las chicas, no contesta su teléfono ¿acaso cree que voy a estar siempre al pendiente de ella? ¡ESTÚPIDA ZORRA!
Amnésico, Luis salió de su departamento para arrojar la basura, no le extrañó ver ropa e instrumentales llenos de sangre, al final su consultorio estaba despuntando y le estaba yendo bien; sin embargo, aún se preguntaba dónde estaría su secretaria, ya era la quinta persona que renunciaba sin avisar.
- ¿Tanto es el trayecto al puto bote de basura? Mañana despediré a esa perra... ¡NO ME LO VOLVERÁ A HACER JAMÁS!
Gritaba mientras, sin percatarse, las bolsas de basura caían sobre el inerte y frío cadaver de su secretaria, escondido en lo más profundo del contenedor, llena de aquellos materiales que su Jefe había utilizado para matarla en un arranque de ira.
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Sólo son historias madre...
TerrorHistorias cortas que nacen através de lo más profundo de mi retorcida mente.