SIREN | JenLisa

Epilogo

Siete meses después:

- Voto por teñirle el pelo nuevamente. - habló Taehyung, mirando en el espejo a Jennie.

- Bueno, a mi me gusta mucho este color. - habló esta vez Jennie, apartándose el flequillo de la frente.

- Exacto. Yo la veo guapísima así. - añadió Rose, y Taehyung rodo los ojos.

- Y exclamó la mocosa. Solo para ganarse el premio de la mejor hermana. - se burló Taehyung, sacándole la lengua, cosa que Rose imitó. Jennie solo pudo reír por el comportamiento de sus hermanos.

- Por favor, los dos son mis hermanos favoritos. - Jennie los abrazo.

- No te olvidaras de mi, ¿verdad? - todos se giraron y observaron a Nayeon, esta llevaba ahora el pelo peli-rojo y un bonito vestido de encaje azul.

Jennie fue a abrazarla y la pequeña correspondió por unos segundos, hasta que la aparto.

- Si viniste. -

- ¡Vas a destrozar las flores! - se quejo. - Ademas, es mejor que nos vayamos porque si no vas a llegar tarde, y a la novia le va dar algo. - habló con una sonrisa.

Jennie asintió y dio media vuelta para que sus hermanos la apreciaran. Taehyung y Rose silbaron fascinados, mientras que Nayeon reía por sus comportamientos.

- Estás hermosa. - dijo Taehyung.

- La novia más bella. - aportó Rose.

- Se quedará babeando. - Nayeon se acercó y le entregó unas rosas.

- Es un regalo de Hoseok y mío. El no pudo venir, está ocupado en Japón. -

- ¿Todo bien? - preguntó Jennie.

- Todo perfecto. - respondió Nayeon. - ¡Ya vamos, que nos esperan! -

Jennie dio un gran suspiro y se volvió a mirar en el espejo, arreglándose bien el vestido blanco y poniendo delante las rosas.

- Llego tu momento. No sabes cuanto me alegro de que lo hayas conseguido. - dijo Nayeon.

- Jennie, si algún día no estoy a tu lado... Si sientes que todo va mal y yo no estoy allí, solo vuelve a intentarlo. - Jennie no entendía con esa exactitud lo que su hermana quería decir, estaba nerviosa, pero asintió.

- ¡Ya vámonos, coño! - todos rieron y salieron de aquella habitación.

Jennie caminaba nerviosa hacia la playa, era una pequeña ceremonia tranquila, con amigos y familiares. Cuando sintió que sus pies tocaron la suave arena cambió su postura y camino decidida, con una bella sonrisa, y seguida por sus hermanos. La chica se acercaba lentamente a la pequeña carpa decorada de rosas y variedad de colores, todo era hermoso a su alrededor, y por fin se vio con esos ojos azabache, quien se encontraba igual o peor de nerviosa que ella. Lisa hablaba con Jisoo.

...

- Creo que ya se arrepintió. Fue muy rápido. Ósea, regreso a la vida, y yo ya dije cásate conmigo. - habló Lisa, arrancándose casi sus uñas de tanto que las mordía.

- Es mejor más pronto que tarde, ademas no creo que... Mira, allí viene, Limario. - señaló.

Como si esto estuviera sacado de una película cringe, una suave brisa sopló, despejando el escenario ante los ojos de Lisa y revelando a Jennie. Vestida con el traje blanco inmaculado, su figura parecía casi etérea. Caminaba con una determinación tranquila y cada paso que daba parecía estar en sincronía con el latido del corazón de ambas chicas.

- Está preciosa. - susurró Lisa.

- Me gusta que las dos hayan decido estar de blanco. - dijo Jisoo.