P A R T E 9

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Cuando vi la puerta de mi casa salí a toda prisa del coche, corrí tan rápido que mi madre gritó mi nombre casi de forma desgarradora en un intento por detenerme, sentía mi respiración pesada, apenas podía sostener el aire en mis pulmones, tenía la sensación de que veía hasta borroso; no pude detenerme a apreciar que ya me encontraba en casa, no pude ni siquiera tomarme un segundo para oler nuevamente esa fragancia característica de la cocina, solo corrí escaleras arriba para entrar a mi habitación lo antes posible, quería encerrarme y quedarme ahí eternamente, al llegar a este todo estaba como lo había dejado e increíblemente parecía que solo me había ido una sola noche.

-Selena.- Mi papá casi sin aliento se encontraba justo en donde terminaban las escaleras, sus ojos cansados me miraron un tanto extrañado, pero luego sonrió, como si hubiese esperado mucho tiempo este instante en el que por fin me encontraba con ellos en mi hogar.- No corras así, asustas a tu madre.

Esa sola frase hizo que todo se derrumbara en mi interior, me alejé de mi habitación y corrí hacía el, así era como debí reaccionar cuando desperté, debía agradecer que me habían sacado de allí, y más aún, debía estar contenta de que ese lunático no se volvería a acercar a mí nunca, durante mi estancia en el hospital el amable terapeuta había sido muy paciente conmigo, habíamos trabajado en mi problema de conducta y ahora estaba bien segura que lo que había sucedido había sido una manipulación de parte del sujeto.

-No quiero volver a irme nunca papá, de verdad, los extrañé tanto, quería volver a casa corriendo.

Mi papá me abrazó con ternura y besó la coronilla de mi cabeza, estaba muy contenta de estar nuevamente aquí, nuevamente viva y completa, lloré casi de inmediato, sentí otros brazos rodearnos, era mi mamá, nos abrazaba con ternura... incluso la escuché dar un suspiro de alivio.

***

No tenía computadora o teléfono, mis padres habían sacado toda forma de contactar con el mundo exterior, me dijeron que podía usar el teléfono local pero no me sabía el teléfono de mis amigas así que no sabía como contactarme con ellas, no podía salir de casa pues me daba miedo ser reconocida por la calle así que pasaba el rato leyendo libros en mi habitación; durante la cena ya no veíamos televisión o escuchábamos la radio, mi casa se había convertido en un lugar silencioso, comenzaba a extrañar las redes sociales y pasar el rato viendo cualquier cosa en youtube, empecé a leer libros de mi padre de investigación y leyes, poco a poco me interesaba por esos temas, sin embargo yo tenía más ganas de continuar con mis estudios de enfermería, pero tendría que esperar un año más por lo sucedido, mi terapeuta aun no me daba de alta por lo que tenía que enfocarme mucho en mejorar para que pudiera despedirme de él y de todos aquellos pensamientos erróneos para que comenzara a vivir mi vida como al principio de todo esto.

Ahora era costumbre que me levantara temprano y me quedara sentada con los brazos apoyados en la barra de la cocina, mi madre bajaba y hacía el desayuno, ahora ponía atención a lo que hacía, a veces le preguntaba cosas acerca del lavado de la ropa y la plancha, comenzaba a hacer mis propios deberes de a poco, y aunque extrañaba el exterior esto me hacía perder un poco la noción del tiempo y me entretenía lo suficiente, aunque estaba desesperada por poder ir a cualquier sitio nuevamente.

-Sel.- Mi madre se asomó por la puerta de mi habitación, traía consigo el canasto de ropa limpia.- tu padre no llegará a cenar, dice que tiene mucho trabajo.

Cuando mi papá no llegaba a casa me daba un escalofrío por la espalda, sentía que si él no estaba podía pasar cualquier cosa, a menudo tenía pesadillas en las que Jeff entraba por mi ventana y me apuñalaba fríamente, otro sueño recurrente era la bolsa de basura con los restos de la chica sin nombre, goteaba sangre y podía ver sus manos destazadas sobresaliendo de la bolsa, intentaba guardar la calma pero por dentro tenía la seguridad de que era mi karma por no haber querido decir nada.

L O V E ( Jeff the Killer 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora