Buenos aventureros se han estado reuniendo dentro del gran gremio de aventureros de la ciudad, pronto nos deleitaran con sus asombrosas aventuras luchando contra monstrous y viajando a lugares míticos.
Buscando siempre la grandeza, nuestros protagon...
Alrededor de los eventos entre gremios, se formaron grandes edificios hoteleros y restaurantes.
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*Restaurante "Toro Blanco".
En un elegante restaurante donde personas de finos gustos y bolsillos llenos de monedas podían disfrutar de unos aperitivos mientras escuchaban el dulce sonido del piano, ente éstos se lograba apreciar alguien que no coincidía con el resto de comensales.
La mayoría de los clientes eran personas adineradas, nobles, políticos, dueños de grandes empresas los cuales tenían cuerpos obesos o flacuchos, sin embargo, aquel comensal tenía una intimidante presencia con un cuerpo forjado por los combates.
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A pesar de su apariencia o modo de vida, tomaba los cubiertos y masticaba de una manera muy educada, cambiando de cubiertos dependiendo cada platillo que le servían.
Su porte llamaba la atención de todos, cualquiera creería que comería como el resto de aventureros, como simple un simple animale.
Algunos ricachones deseaban sacarlo del lugar, pero quien no conocía al "Coyote Azabache", claramente nadie deseaba meterse en problemas contra un ser que logro pasar la línea entre los seres fuertes y débiles.
Gabriel no molestaba al resto a propósito, sin embargo, aun así, le daba gracias que un montón de seres insignificantes se molestaran con él, si lo así quisiera nadie del restaurante saldría vivo, eso le hacía gracia mientras continuaba degustando de su platillo y copa.
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*Platillo.
Planeaba tomar un huevo de codorniz, cuando repentinamente sintió la presencia de alguien en medio del restaurante, alguien peligroso se había acercado demasiado a él, probablemente por estar disfrutando su almuerzo.
Al voltear su mirada noto a una linda chica acercándose a él, todos la miraban con los ojos muy abiertos, un ángel que robaba las miradas.
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*Luz Mayoris "La Santa".
Luz: - No te hagas el de la boca chiquita -.
Se sentó a un lado de él, rápidamente varios meseros se acercaron a tomar su pedido trayendo rápidamente su solicitud.
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*Tarta.
Gabriel: - Creo que eres tú quien debería comer bien -.
Se sintió algo incomodo pues si antes ya lo miraban raro, ahora que todos miraban a su mesa era peor.
Luz: - ¿Andas en asuntos de trabajo? -.
Lo miró fijamente indicando que más vale que no fuera problemático.
Gabriel: - Sí, estoy de guardia para uno de estos tipos -.
Dijo algo molesto pues prefería a ir a cazar algo que andar de niñera.
Gabriel: - ¿Y tú?, qué hace en este lugar alguien del grupo del "Héroe", ¿no deberías estar luchando contra las fuerzas del mal o algo así? -.
Le habló mientras miraba sus facciones faciales, tal vez algo muy importante sucedería en este sitio.
Luz: - Vengo por algo de suma importancia -.
Tomó aire.
Luz: - Vengo a molestar a mi hermanito -.
Todos atentos a lo que mencionaba casi se caían de sus sillas, mientras ella se reía fuertemente.
Gabriel se sintio algo tonto por tomar en serio lo que decia esta mujer, pues era alguien muy extraña que se divertia con sus ambiguedades.
Entre los asientos del estadio su hermano sintió un extraño escalofrío en su espalda, esto solo significaba que su hermana mayor se encontraba cerca, esperaba que no llegará al estadio en su combate porque eso sería muy molesto.
*Nota: Parte final. Como siempre sus dudas, comentarios, aportaciones son bien recibidas ya que me ayudan a mejorar las narraciones y poder entregarles unas historias más entretenidas, interesantes o intuitivas.
