El Abismo De la Memoria: Secretos Perversos

Capítulo 6: Noche Confusa

Me despierto en la oscuridad, mi mente envuelta en una neblina espesa. Mis movimientos son mecánicos, como si estuviera siguiendo un guion preestablecido. Me encuentro cambiándome en el vestido negro, cada movimiento calculado, cada gesto carente de emoción.

No sé quién soy ni qué estoy haciendo aquí, pero algo dentro de mí me impulsa a seguir adelante. Mis manos se mueven con precisión mientras me visto, como si estuvieran siendo controladas por una fuerza externa.

Una vez que estoy lista, salgo a la noche sin una pizca de duda en mi mente. Mis pasos son silenciosos, mis ojos vacíos, como los de un autómata sin alma. La ciudad se extiende ante mí, sus luces destellando en la distancia como estrellas fugaces en la negrura de la noche.

No hay nadie que se dé cuenta de mi presencia, ni siquiera yo misma. Soy como una sombra entre las sombras, un espectro sin nombre ni rostro. Y aunque mi mente esté en blanco, sé que debo seguir adelante, cumplir con mi propósito sin cuestionar.

Sin embargo, en lo más profundo de mi ser, hay un destello de conciencia, un murmullo apenas perceptible que me hace cuestionar mi existencia. ¿Qué soy yo realmente? ¿Qué fuerza oscura me controla y me dirige hacia un destino desconocido?

No hay respuestas en la noche, solo el eco siniestro de mis propios pasos mientras avanzo hacia el abismo de lo desconocido. Y aunque mi mente esté en blanco, sé que hay algo más en juego aquí, algo más oscuro y retorcido de lo que puedo llegar a comprender.

Avanzo por las calles silenciosas, mi mente envuelta en una niebla densa que me impide ver con claridad. No sé quién soy ni qué estoy haciendo aquí, pero siento una urgencia implacable, un impulso oscuro que me empuja hacia adelante.

Mis pasos me llevan a un callejón oscuro, donde la sombra se espesa y la oscuridad se convierte en mi aliada. Algo dentro de mí se agita, un instinto primitivo que me indica que mi presa está cerca.

No sé quién es mi objetivo, pero puedo sentir su presencia en el aire, como un aroma familiar que se desliza entre los rincones más oscuros de la noche. Mis sentidos están agudizados, mi cuerpo tenso y listo para el ataque.

De repente, lo veo: una figura solitaria, envuelta en sombras, ajena a mi presencia acechante. Mis manos se tensan, mis músculos se preparan para el golpe final. No hay compasión en mi corazón, solo el deseo de cumplir con mi propósito, aunque ni siquiera yo misma sé cuál es.

El misterio se espesa en el aire, como una niebla que envuelve todo a su paso. ¿Por qué estoy aquí? ¿Qué demonios estoy haciendo? Las preguntas se acumulan en mi mente, pero no hay respuestas, solo el eco sordo de mis propios pensamientos confundidos.

Sin embargo, a pesar de mi confusión, no puedo detenerme. El impulso oscuro dentro de mí exige satisfacción, y yo soy simplemente su instrumento, una marioneta en manos de fuerzas más allá de mi comprensión.

Con un movimiento fluido, me lanzo hacia adelante, mi objetivo en la mira. No hay vuelta atrás ahora, solo la oscuridad eterna que me rodea, como un abrazo frío en la noche. Y aunque no recuerde lo que he hecho, sé que dejaré una marca indeleble en el mundo, una sombra oscura que se extiende hasta el final de los tiempos.

La figura en la oscuridad se detiene de golpe cuando me acerco, sus ojos llenos de pánico buscando una salida. Susurra ruegos desesperados, suplicando por su vida, pero yo no siento compasión.

–Por favor–, susurra, su voz temblorosa. –No sé quién eres, pero por favor, déjame ir. No te haré daño, lo prometo.

Mis labios se curvan en una sonrisa fría y despiadada mientras lo observo con indiferencia.

–Tus palabras no significan nada para mí– respondo con voz gélida. –Eres solo un peón en un juego más grande, y yo soy el jugador que decide tu destino.

La presa se retuerce en su lugar, su miedo palpable en el aire cargado de tensión.

Por favor– suplica de nuevo, sus ojos llenos de lágrimas. –Tengo una familia, una vida. No merezco morir.–

–No hay justicia en este mundo– respondo con desdén. –Solo hay poder y dominio, y yo soy quien tiene el control ahora. Tu destino está sellado, y nada de lo que digas cambiará eso.–

Con un movimiento rápido, me acerco a él, mis manos extendidas como garras afiladas, le corto la garganta y lo apuñaló varias veces en su pecho. Sus gritos llenan el aire mientras la oscuridad lo engulle, consumiendo su vida con voracidad insaciable. El olor a sangre llega hacia mi nariz y me llena de vida, ese peculiar olor.

No hay remordimiento en mi corazón, solo la satisfacción fría de haber cumplido con mi propósito. La presa yace en el suelo, su vida extinguida, mientras yo me alejo sin mirar atrás, una sombra implacable en la noche eterna.

Uno más para mi colección

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Al día siguiente, me despierto en mi apartamento como si nada hubiera pasado. La luz del sol se filtra por las cortinas, y por un momento, me siento tranquila, como si todo hubiera sido solo un sueño oscuro y perturbador.

Me levanto de la cama, estirando mis músculos rígidos, sin sospechar siquiera lo que sucedió la noche anterior. Mis recuerdos son nebulosos, fragmentos dispersos de imágenes que se desvanecen en la bruma de mi mente.

Me preparo el desayuno, tratando de ignorar la sensación de inquietud que se arrastra en el fondo de mi conciencia. ¿Qué ha pasado anoche? ¿Por qué siento que algo anda mal, aunque no puedo recordar qué es?

Sacudo la cabeza, intentando despejar mi mente de pensamientos oscuros. Debe de haber sido solo un sueño, me digo a mí misma, una pesadilla creada por mi imaginación desbocada.

Pero incluso mientras intento convencerme de que todo es normal, una sensación de malestar persiste, como si hubiera algo más, algo que se esconde en las sombras de mi memoria.

Ignorando la sensación creciente de preocupación, salgo de mi apartamento y me sumerjo en el bullicio de la ciudad, tratando desesperadamente de dejar atrás los fantasmas del pasado. Aunque, en el fondo, sé que algunos secretos son demasiado oscuros para ser olvidados tan fácilmente.

Mientras camino por la concurrida calle, una ráfaga de recuerdos invade mi mente, rompiendo la barrera de la confusión que había construido a mi alrededor. Un beso ardiente, la sensación de labios encontrándose en un éxtasis de pasión y deseo.

El sol se está poniendo y el cielo se tiñe de colores que solo podrían competir con la intensidad de lo que siento. Cierro los ojos por un segundo y ahí está, el recuerdo de sus labios sobre los míos, un beso que me robó el aliento y me dejó deseando que el tiempo se detuviera. Fue un beso que hablaba de promesas y secretos, un beso que decía más de lo que las palabras podrían expresar.

La gente me rodea, pero yo estoy sola con mi recuerdo, sonriendo como una tonta porque sé que ese beso fue solo el comienzo de algo inolvidable. Sigo caminando, pero parte de mí se quedó en ese instante, en ese beso, en esa noche que cambió todo.

Quinto capitulo ahhhhhh✨✨✨

QUÉ LOCURA COMETIÓ LA PROTA??

ESTA HISTORIA ES MÍA ❤️

BESOSKI🤪