El corazón cada vez se siente más cerca de caer.
Él sabe que es fuerte pero le cuesta entender, la vida es una montaña rusa dónde si o si tenemos que aprender.
"Lo que duela hoy te hará más fuerte mañana".
El dolor es algo por lo que nadie quiere pasar, pero es algo que todos debemos afrontar.
A veces la vida te eleva, para luego devolverte al suelo.
Es ley, todo lo que sube tiene que bajar .
El corazón siempre quiere el bienestar de los demás.
La mente quiere que el corazón tenga paz.
El alma pide que ambos se pongan de acuerdo.
Pero los dos son demasiados tercos para eso.
Mientras el corazón lucha por mantener la paz en otro lugar.
La mente lo observa sin opinar.
La mente sabe que el corazón no tiene paz. Pero deja que delante de los demás, demuestre lo contrario a lo que sucede en realidad.
La noche llega, ambos agotados ya.
Uno cansado de fingir paz, el otro cansado de debatirse si debe o no hablar.
—No digas nada—pidió el corazón—, ya sé lo que dirás.
—Ve dentro de ti, corazón—dijo la mente obviando su petición—, ¿Tienes tú acaso paz para dar?
—Yo no, pero tal vez logre que alguien más la tenga.
—Corazón, Dios siempre en primer lugar, pero luego venimos nosotros. Encuentra primero tu paz, y ya luego si quieres, le ayudas a los demás.
El corazón asintió sin decir más, pues aunque le doliera aceptar, la mente tenía razón... una vez más.
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Escritos de una chica perdida
Literatura FaktuEsta soy yo, la chica rota, perdida, la que siempre te dará una sonrisa por fuera, pero que en realidad está destruida por dentro. Esta soy yo, la chica con el corazón roto por un amor no correspondido, la chica de mente perdida por tantos problemas...
