Demasiado inocente pt1

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Dia 3

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"Te amo, Daniel. Te amo desde el primer momento en que te vi, por favor, acepta mis sentimientos" Dijo Jay mientras le ofrecía una caja de chocolates al pelinegro. Sus mejillas estaban sonrojadas y sus manos temblorosas.

"Jay, yo... aprecio mucho saber que me amas, y es un gran halago saber que realmente puedo ser amado por alguien tan maravilloso como tú. Me has cuidado durante tanto tiempo que no sé cómo decir las palabras, pero... no siento lo mismo, perdóname." Dijo apenado "Has sido un gran amigo y una gran persona y no tienes idea del estima que te tengo pero simplemente no siento lo mismo, te veo como a mi mejor amigo" Vio como la expresión de Jay decaía "Pero no significa que debamos de dejar de ser amigos, sé que con el tiempo podremos superarlo y seguir siendo los mejores amigos" Dijo esperanzado.

Jay asintió con una expresión triste. Vio a Daniel abrir sus brazos y aceptó el abrazo. Enterró su rostro en su cuello y olió el aroma a su detergente y perfume. Se quedaron en silencio sin saber qué más hacer.

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"Las cosas han estado tensas con Jay" Pensó para sí mismo "Si tan solo hubiera aceptado sus sentimientos, tal vez no sería tan extraño estar junto a él." Siguió hablando para llenar el silencio en su camino. Finalmente era viernes por la tarde, normalmente caminaría junto a Jay a casa, pero no creía que estuvieran tan bien como para seguir con la rutina.

Siguió pensando de camino a casa, se replanteaba que habría cambiado de no haber rechazado a su mejor amigo, hasta que repentinamente empezó a sentirse extraño e incómodo. Por alguna razón empezó a sentir que alguien lo seguía así que apresuró el paso. Miró de un lado a otro y decidió desviarse un poco, su hogar estaba demasiado solo como para ser bueno. Caminó hasta una avenida donde pasaban algunos carros y siguió sin rumbo. Aún sentía la extraña sensación de ser perseguido pero decidió que tal vez fue producto de su imaginación.

En cuanto se adentró en un callejón para seguir su camino a casa el sonido de la tapa de un bote metálico que cayó al piso lo estremeció. "¡Hola, Daniel!" Dijo Goo con una sonrisa típica de él"

"¿Goo? ¿Me estabas siguiendo?" Preguntó. Su cuerpo se tensó y se puso en guardia.

"Sip, pero no es nada personal, sólo no pongas resistencia porque me pidieron llevarte lo más sano posible." Dijo Goo mientras se acercaba.

"¿A qué te refieres?" Dijo medianamente asustado. Soltó su mochila y la pateó lejos. Solo sería un estorbo si es que peleaban. "¿Quién te envió? ¿Qué quieren de mí?"

"¡Tantas preguntas, tantas preguntas! Pero para tu mala suerte, no puedo responder. Fue muy específico de no revelar su identidad y de llevarte con bien. Sabes que me muevo por dinero, Danny, así que realmente no debo dañarte" Dijo aún risueño. Sacó un pañuelo de su bolsillo "Cloroformo... No me gusta este método, pero es el más efectivo." Se acercó con cautela.

"¡Atrás!" Gritó y en ese mismo instante Goo saltó sobre él. Hubo una larga riña y forcejeos hasta que recibió un fuerte golpe en la mandíbula que lo hizo perderse por un momento. Goo aprovechó la ventana y se posicionó detrás de Daniel y con el pañuelo cubrió su boca y nariz. Daniel empezó a luchar golpeando con dureza el abdomen del otro, pero poco a poco sintió que le faltaba el aire y la fuerza. Sus rodillas flaquearon y empezó a dejarse caer. Sin querer eso siguió intentando luchar, tomó el antebrazo de Goo y lo intentó alejar, intentó tirarse, morder, arañar, cualquier cosa, hasta que finalmente dejó caer las manos. 'Ayuda... alguien, quien sea, sálveme..." pensó.

"Dulces sueños, lindo Daniel" Fue lo último que escuchó antes de caer desmayado.

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Cuando empezó a tomar conciencia nuevamente, se sintió adormilado. Poco a poco se acostumbró a la oscuridad y volteó en todas direcciones. No podía descifrar dónde estaba. Sus manos estaban atadas a su espalda y sus tobillos también estaban encadenados, apenas podía moverse lo suficiente como para acomodarse o acostarse.

One-shots  Jay x DanielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora