One-shots Jay x Daniel

¿Por qué?

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Dia 7

A/B/O

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El matrimonio entre Jay y Elena se celebró gracias a un arreglo entre sus familias. Ninguno de los dos estaba contento de casarse con alguien desconocido pero no tenían opción.

El día de la boda fue que finalmente se conocieron. Al quitar el velo del rostro de Elena fue que finalmente pudo ver el rostro de la mujer con quién pasaría sus días y la ceremonia finalizó con un beso insípido entre ambos.

La noche de bodas había sido dolorosa para ambos, pero el verdadero objetivo del matrimonio había sido dar un heredero que siguiera con la línea Hong. Elena estaba asustada por la clase de hombre que podría ser su marido, pero contrario a cualquier paranoia resultó que su marido era muy reservado, aquella noche la trató con ternura y después de que el nudo se desinflamara salió de la habitación en silencio dejándola en paz.

Cuando se mudaron para vivir juntos noto que Jay no pronunciaba ninguna palabra a pesar de que no tenía ninguna dificultad para hablar y mantenía la mitad de su rostro tapado con el cabello teñido de rubio. Pero a pesar de todo, eventualmente aprendieron a vivir juntos y se tomaron cariño.

Poco a poco ambos empezaron a acercarse al punto de poder estar en la misma habitación sin un aire de incomodidad alrededor de ellos y empezaron a parecer una verdadera pareja casada. Hacían la mayoría de cosas juntos; Cocinaban juntos, comían juntos, iban de compras juntos, etc.

Las interacciones entre ambos eran cada vez más comunes. Cuando Jay pasaba la mayor parte del día pegado al escritorio por trabajo, Elena le llevaba una taza de café con algún dulce para relajarlo. Cuando Elena sufrió por cólicos durante la semana de menstruación Jay estaba listo para prepararle algún té y darle compresas de calor para calmarlos.

Poco a poco la guardia de Elena cayó y su corazón se hinchó por la falta de barrera que protegiera su corazón. Quiso pasar la línea que ambos habían marcado para el otro y empezó con algunas caricias en el cabello ocasionales y halagos al aire. Después fue más servicial de lo que alguna vez fue con él. Jay aceptó estos pequeños avances sin realmente tomarle importancia pensando que su familia la estaba obligando. En un momento insistió en dormir en la misma cama pero al notar la incomodidad de Jay se detuvo.

Siguió acercándose hasta que pudo lograr que se abrazaran en el sillón mientras veían películas. Elena finalmente pudo sentir el calor del abrazo de su esposo y se sintió complacida por esto, su matrimonio ya no se sentía forzado, finalmente se sentía enamorada, y como no enamorarse al tener a alguien como Jay a su lado

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Desde su boda habían pasado alrededor de dos años, el padre de Jay había muerto gracias a un infarto debido al excesivo trabajo y pudo ver a Jay deprimirse poco a poco por este hecho, sus feromonas tenían un olor amargo y se negó durante un tiempo a salir de su habitación.

Aunque, de un momento a otro, este empezó a salir frecuentemente regresando con olor a alcohol encima de él. Le dolía ver a su esposo regresar completamente borracho siendo llevado por su chófer a cuestas, pero tenía confianza en que no estaba siendo engañada, jamás regresó con el olor a otro omega encima y el chófer siempre le informaba de las actividades de su esposo cuando salía. Hubo veces en las que no llegó, pero siempre fue informada de que pasó la noche solo en algún hotel por estar demasiado mareado para querer viajar en auto.

Un día en el que Jay volvió borracho, llegó solo. Se había caído en la entrada de su hogar y generó un gran escándalo ya que tiró un jarrón en un intento de evitar caer. Elena salió apresurada de su habitación buscando el motivo del ruido y vio a Jay levantar los trozos del jarrón murmurando cosas que no logró entender.