Capitulo 1

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Mi corazón latía acelerado, tenía unas irracionales ganas de ir al bosque, cada luna llena me pasaba esto y realmente no sabía que era. Tome mi cuaderno de dibujo y un par de lápices y salí de la cabaña en la que me encontraba, mis padres de seguro dormían ya que eran alrededor de las dos de la madrugada.

Camine en dirección al bosque, memorizando algunas plantas o marcas en los árboles para no perderme de vuelta. Llegue a donde se encontraba un árbol bastante grueso que le sobresalían las raíces, me senté entre esas raíces y empecé a dibujar, mi mano se movía sola, cuando vi lo que se formaba me di cuenta de que era un lobo. En ese momento sentí que estaba siendo observada así que levante la mirada y me encontré con un par de ojos azules, un lobo.

Beeeeeeeep beeeeeeeeep beeeeeeeep

La alarma me despertó, eran las siete de la mañana, tenía que levantarme para emprender el viaje a la nueva casa en nueva ¿ciudad? No, era más un pueblo que una ciudad, a mi padre se le metió la idea de irnos a vivir a un lugar más tranquilo y seguro después del viaje a la cabaña de este año.

Me removí un poco en la cama para apagar el despertador y me volví a echar, mis ojos ya se estaban cerrando, pero...

--¡Mackenzie! ¿Ya te levantaste?-Escuche la voz de mi madre, lo que quería decir es: Ya levántate si no quieres que vaya yo a levantarte y sabes que eso no te va a gustar.

--Emmm si-le conteste mientras me levantaba.

--Bueno señorita-me contesto.

Me senté en la cama sin ni un poco de ganas, me estire y me levante.

--¡Pero que Mier...!-tome el cuaderno que estaba en el suelo y vi el dibujo que había hecho en el sueño, cada sueño dibujaba un lobo diferente, le di vuelta a las hojas y vi todos los lobos que había hecho en los sueños, desde el primero hasta el último, todos estaban ahí. Este cuaderno solo lo soñaba jamás lo había visto así, en la vida real, hasta ahora.

Tome la primera bolsa que vi y eche el cuaderno en el interior de esta y puse la bolsa en una de las maletas.

Camine hacia el closet y elegí (ropa en multimedia) y los lleve al baño, me di una ducha rápida y me puse un poco de maquillaje, no quería parecer un payaso.

Cuando estuve lista tome las dos maletas que contenían toda mi ropa y fui a la sala.

--Buenos días-salude, mis hermanos me respondieron con un hola y un beso en la mejilla al igual que mis padres.

--¿Listo?-les pregunte a mis hermanos, son gemelos, están altos, tienen el cabello castaño y son un año mayores que yo.

--Si, dame esas maletas- Jay las tomo y las llevo a la camioneta, todos salimos al parecer nomas faltaba yo, nos subimos a la camioneta y lo primero que hice fue ponerme los auriculares.

Todo sería nuevo, yo empezaría de nuevo.

--Enana despiértate-Uno de los dos me sacudía los hombros, tenía mucha flojera como para abrir los ojos así que me quede en esa misma posición.

-- Déjala, tiene el sueño pesado, pero yo me quedaré con la habitación más grande-dijo el otro.

Ñah, que se la quedara...espera ¿Qué?, me levante lo más rápido que pude y mire a Kendall achinando los ojos.

--Ni se te ocurra Kendall Anderson.

--Ni se te ocurra Mackenzie Anderson-dijo en un intento de copiar mi voz.

Corrí, sabía que Kendall también lo había hecho, talvez había tomado algo de ventaja pero yo no corría muy rápido que digamos y Kendall me iba a adelantar en cualquier momento, pero espera... ¡¿CUAL ERA LA HABITACION MAS GRANDE?!Maldito Kendall me las va a pagar, quizás yo estaba corriendo a la pieza más pequeña.

--Uhh, la enana ya no sabe a dónde ir.

Corrí a la única habitación con la puerta abierta y entre a... ¿el cuarto de Jay?, escuche un ruido detrás de mí y ahí vi a un Kendall demasiado sonriente.

--¿Qué paso?, ¿Mackenzie se quedó con el cuarto pequeño?-dijo Kendall mientras me sacaba la lengua, talvez era el mayor de los tres (si, el mayor, le ganaba a Jayden como por 2 minutos) pero se comportaba como el más pequeño, yo le respondí sacándole la lengua, okay digamos que yo tampoco era muy madura.

Salimos del cuarto de Jayden y el me guio a donde se encontraba una puerta blanca.

--Querida hermanita, este es tu cuarto.

Lo primero que vi fue una cama redonda, bastante grande y con varios cojines de distintos colores vivos. Tenía un balcón, había dos puertas, me imagino que una para el baño y la otra para el guardarropa, abrí la que estaba más cercana a mí, la del guardarropa, era lo suficientemente grande como para poner dentro toda mi ropa que tenía y que aun quedara un gran espacio vacío. Esta pieza me gustaba bastante, las paredes estaban pintadas de rosa pastel.

--Wow, es hermoso. -dije mirando a Kendall.

--Si, bueno prepárate, mañana a la escuela otra vez.

--¿Qué?, pero acabamos de llegar-dije haciendo un puchero

Lo único que hizo fue revolver mi cabello y negar con la cabeza y con eso salió de la habitación.

Las maletas estaban junto a la puerta del closet, las tome y las eche al closet, mañana ya las acomodaría, me acorde de los cuadernos del dibujo, así que saque la bolsa y de ella los cuadernos de dibujo.

Fui al balcón ya después de haberme bañado y cambiado mi ropa por otra más cómoda.

Desde aquí se alcanzaba a ver un árbol que estaba en nuestro patio trasero y una parte de la calle, en ese momento vi a un chico que salía de la oscuridad que ofrecía la noche y se posaba justo donde la luz de luna daba, soltó un gran suspiro y siguió caminando, pero se detuvo abruptamente y volteo hacia donde yo me encontraba, al verme sonrió, una sonrisa que prometía muchas cosas y no exactamente buenas.

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Hola, gracias por leer la historia!!

~Lex

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