Parte 2

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Dónde lo dejamos.

Una disculpa por la tardanza.
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Ignorando su propio pensamiento, Alicia reanudó la lectura.

"Hmmm, mi fuerza y velocidad ya no están a la altura ni siquiera del Espíritu Heroico promedio, aunque puedo usar mi refuerzo para compensarlo..." Alicia entrecierra los ojos. "al menos hasta cierto punto". "...un momento, ¿él...?" Procesando.

"Nunca estuvo a su máxima capacidad", completó Claudia por ella.

Ellie, la monja rubia de cabello corto, habló con duda ante sus palabras. "Disculpe, ¿cómo es eso?"

Claudia la miró por un momento. "Desconozco el motivo, pero asumo que debe ser referente a su condición actual de... 'estar vivo'."

(Asumes bien, pero es un poco más complicado que eso) pensó Gaster, disfrutando de un café.

"Entonces, como es humano nuevamente, todo lo que hizo... ¿nosotras también podríamos hacerlo?" Alicia comentó, llamando la atención. "Solo digo que, si él es humano y es capaz de vencer a Kuroinu por sí mismo, ¿eso no significa que nosotras igualmente podríamos?"

"Olvidas un detalle, princesa Alicia," intervino Olga, atrayendo la atención de la mencionada. "En la misma historia mencionan un 'reforzado', lo que puede significar que sus capacidades superan a las del humano promedio. E igualmente, como se dice en la historia, también parece ser más débil que antes."

"¡No lo olvidé!", respondió Alicia. "Solo me planteé la idea de resolver el problema nosotras mismas, sin la necesidad de ayuda externa."

"Alicia-oneesama, ya sabemos cómo termina esa historia," comentó Prim, su expresión un tanto decaída al recordar malas experiencias mostradas al llegar. Un sentimiento que era comprendido por las demás, habiendo experimentado lo mismo.

Alicia sintió un nudo en la garganta, se sentía culpable de empeorar el estado de ánimo de su familia y amigas/compañeras. "Lo siento, hablé sin pensar," susurró, pero fue suficiente. "Mejor continuaré. Creo que todos queremos saber si eso afecta a Shirō-dono de alguna manera, aunque no creo que ser humano sea tan malo, ¿verdad?"

Ésa era una desventaja de volver a ser humano. Era un hecho ampliamente aceptado que incluso el sirviente más débil podía vencer a un combatiente experto reforzado.

"Hmp~" Chloé intentó contener la risa. "Parece que tú misma respondiste tu duda," dijo recuperando el ánimo. Pareciendole incluso irónico.

"No sé qué pensar, eso fue... ¿irónico?" Se cuestiona Layla, la monja castaña de cabello rizado, sin estar segura de si debía comentarlo.

Su compañera de la iglesia, Beatrice, la monja de cabello rubio oscuro, parecía tener la misma opinión. "Creo que sí lo fue, aunque quizá no deberíamos mencionarlo."

Alicia la escucho perfectamente y suspiró por ello. "Déjalo así. Olviden que dije algo," pidio, continuando con la lectura.

' A menos que seas el subdirector de la Torre del Reloj. Esa mujer puede hacer temblar de miedo incluso a los Apóstoles Ancestrales.

Barthomelo Lorelei era nada menos que un monstruo a sus ojos.

Hablando de monstruos.

Si la memoria no le falla, Rin una vez destruyó un pilar de piedra con una patada reforzada... pero no recordaba de qué realidad era.

El peso de las espadas le dio al Counter Guardian una sensación de comodidad mientras alejaba los crecientes pensamientos choáticos dentro de su mente.

Kuroinu leyendo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora