Kuroinu leyendo

Capitulo 4

Nuevamente recibidas y reunidas en la sala, el elenco principal estaban listos para continuar desde donde lo dejaron. Estando igualmente presente su anfitrión, quien le otorgó el libro a...

"¿Eh? ¿...Yo?" Brynn cuestiona con duda, sosteniendo el libro entre sus manos.

Solo recibió un asentimiento del esqueleto.

La joven morena abrió dicho libro en la página correspondiente, carraspeó para aclarar su voz y empezó a leer: - Grünes Bergdorf - (Temprano en la mañana)

Ding Dong~

Ding Dong~

Ding Dong~

Todo sucedió de repente.

La sala ante una ya conocido presentimiento, prestando total atención a lo que se avecinaba.

A primera hora de la mañana en Grünes Bergdorf, la campana de la iglesia sonó a un ritmo inusual, seguida por los gritos de los guardias y los Caballeros de Ken.

"¡Todos dentro del salón de la iglesia ahora!"

"¡Invasión demoníaca! ¡Un grupo de unas cuantas docenas de orcos y diablillos avistados a unos cuantos kilómetros de distancia!"

"Brynn, ¿esto realmente ocurrió?" preguntó Claudia, con una seriedad palpable.

Brynn, titubeando: "N-no, esto nunca ha sucedido, el único contacto que eh tenido con las legiones oscuras fue cuando estuve en primera linea en ken." Mira a su compañera. "¿Verdad, Mel?"

"Dice la verdad, princesa, yo estuve con ella en aquel entonces."

Alicia, decide preguntar: "¿Fue antes de tu tranferencia a mis filas?" Reviviendo un asentimiento como respuesta.

Claudia asintió en entendimiento: "Esto cambia un poco la situación, pero también es una buena oportunidad para observar más de las habilidades de Emiya-dono."

Las demás estuvieron de acuerdo. Brynn continuó leyendo.

Esto creó una ola de pánico entre los habitantes del pueblo, mientras hombres, mujeres, niños y ancianos trepaban por la estructura principal protegida por un puñado de guardias del pueblo. Algunos de ellos ya temblaban porque nunca se habían enfrentado a orcos en sus vidas, pero habían escuchado historias de las cosas terribles que pueden hacerle, especialmente a las mujeres.

"¿Cómo es posible que aparezcan aquí? ¡Nunca había sucedido antes!"

"¡Rápido, escondan a las mujeres primero!"

Fue un completo caos. No hubo coordinación entre los guardias de los Caballeros. Los primeros estaban demasiado asustados para hacer algo, con la excepción de unos pocos que luchaban por controlar a la multitud por sí solos. Los Caballeros ya se habían unido a la línea del frente, con las espadas desenvainadas, listos para enfrentarse al enemigo.

Kaguya: "La falta de orden y coordinación puede ser perjudicial en estas situaciones."

Brynn: "Lo sé, fue mi error." Sintiendo una mano en su hombro, tratándose de su amiga, Mel, actual capitana de la guardia de Feoh.

Mel: "No te culpes por todo, también tu e dificultades."

Celestine: "Lo importante es ser consciente de ello. Ve esto como una oportunidad para aprender de los errores."

Sus palabras conmovieron a la morena, quien asintió con renovada convicción. "Daré lo mejor de mí, Celestine-sama."

Maia: "Oye, no te olvides de seguir adelante."