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¡Tierra llamando a Spreen!


¿Nos sentamos acá? — preguntó Spreen, señalando dos asientos del micro y seguidamente, recibiendo un asentimiento de Juan.

La escuela había organizado una excursión a un museo de arte. Spreen y Juan decidieron ir, y para fortalecer la farsa se sentaron juntos en el viaje y se mantuvieron cerca durante todo el recorrido.

No puedo creer que tengo que estar pegado a vos como garrapata para que nos crean — se quejaba el pelinegro, mientras miraba las pinturas y esculturas de la sala.

Oye, yo también preferiría estar con mis amigos antes que contigo — se quejó también el castaño con los brazos cruzados.

Por suerte el hecho de que estuvieron cerca todo el tiempo hizo que varios de sus compañeros cayeran un poco en la farsa, pero otros seguían sin estar seguros; ellos no se mostraban nada de afecto.

Por otro lado Juan y Spreen terminaron acostumbrándose a la compañía del otro y eso hizo que compartieran sus opiniones sobre las pinturas y esculturas libremente

Esta es bien rara, pero me gusta el estilo de dibujo — opinó el castaño — Es bien antiguo — dijo señalando la pinturas que estaba mirando con el pelinegro.

Pienso lo mismo, a veces lo raro tiene su toque — le dio la razón el pelinegro, recibiendo una sonrisa del castaño.

Spreen notó que sus compañeros seguían murmurando entre ellos, así que delicadamente colocó su brazo sobre los hombros de Juan, lo que no inmutó a los demás, eso podrían hacerlo dos amigos tranquilamente

Pero algo que ni Spreen ni nadie esperaba era que Juan lo abrazara. Quizás eso no fue gran cosa para los demás, pero a Spreen realmente lo sorprendió

¿Q- Qué flasheaste? — preguntó el pelinegro más quieto que un tronco

Estamos fingiendo, ¿verdad? Solo sígueme el juego — contestó el castaño

Spreen no respondió y simplemente rodeó la cintura de Juan con sus brazos. Estaba muy avergonzado

Algunos opinaban, otros solo miraban. Sinceramente, Spreen ni siquiera parecía estar tocando tierra; estaba dentro de una burbuja, pensando en muchísimas cosas

Tantas cosas que no se dio cuenta que ya todos se habían ido a la siguiente sala y los habían dejado solos ahí

¡SPREEEEN! — lo llamó el castaño ya por quinta vez — Por fin, dios, ¿qué haces? Ya se fueron todos — dijo el castaño, aún intentando soltarse del agarre — ¿Podrías soltarme? — dijo finalmente, rindiéndose

¿Eh? ¡ah!, sí, perdón — dijo el pelinegro, soltándolo lo más rápido que pudo — Ya que estamos solos, ¿te coparía escaparnos del grupo y seguir el paseo por nuestra cuenta?  — intento cambiar el tema para que no se volviera una situación incómoda — Sabemos la hora en la que todos van a ir a comer a la plaza de enfrente, simplemente volvemos para ese horario

Juan se quedó pensando. Iban a meterse en problemas si se daban cuenta de que no estaban, pero la vida es una, ¿no?

Okey — respondió sonriendo el castaño — Habían unas pinturas por allá que estaban bien chidas, pero no las vimos — dijo, agarrando la muñeca del pelinegro mientras buscaba la habitación

——

Hola, reaparecí, juro que puedo explicar porque me desaparezco... Bueno, en realidad tengo como 15 episodios hechos, pero deje de escribir más porque estuve muy ocupada en la escuela y no quería subir episodios sin crear más porque después me quedo sin nada que subir y tardó más de lo que ya tardó, entiéndame 🙏

Pretty lie! - SpruanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora