[𝗖𝗮𝗽]: 0 Prólogo

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7:56 p.m

Utahime Lori:

Me encontraba limpiando la última mesa que quedaba, faltaban unos cuantos minutos para que mi hora de salida llegará y está vez me tocaba cerrar la cafetería, pues la dueña, Mei Mei tenía algunas cosas que hacer por lo que no podía.

Había sido un día un poco agotador, muchos estudiantes de la universidad pasaron a comprar café después de las clases o a realizar tareas que tenían. Me relajaba mi trabajo, la sensación de cuando los clientes platicaban tranquilamente mientras bebían café o cuando tecleaban en sus computadoras con una taza de capuchino a lado me relajaba, era como si en ese lugar las personas simplemente se olvidarán de lo que pasaba afuera y tuvieran un momento agradable...



Termine con la última mesa y me dirigí a la cocina a limpiar el trapo en el fregadero; hasta que de pronto escuché la campanita de la puerta de entrada abrirse, lo que indicaba que alguien había entrado lo cual me parecía raro, normalmente los clientes ya sabían a que hora cerrabamos, por lo que no tendian a llegar a minutos antes de cierre, pero talvez era una persona que nunca había visitado la cafetería.


Me dirigí a la barra principal para recibir al cliente, a lo que después ví a un albino con un hermoso pelo blanco brillante con gafas en las cuales se podían visualizar unos bellos ojos azules que se encontraban observando el menú que ahí se encontraba, creo que era nuevo en la cafetería, pues no me resultaba conocido, pero... Era lindo y se miraba más o menos de mi edad...


──Buenas tardes, que desearía ordenar?...
. Decía con una sonrisa

──Hola... Si, me gustaría un café sencillo bastante cargado por favor...
. Decía mientras le correspondía a la sonrisa.

Empeze a preparar el café que me pidió, deseguro venía de un trabajo pesado y estresante, por algo me había pedido el café tan cargado.

Me encontraba vaciando el café de la cafetera en una taza un poco grande de color blanca a lo que escuché ──¿Cómo te llamas? No sabía que Mei ya tenía trabajadora──

¿Era conocido de Mei? Lo que quería decir que ya había visitado este lugar, pero por lo que escuché venía cuando yo todavía no trabajaba aquí...

──Emm, Utahime Lori, tengo trabajando aquí unos cuantos meses...
. Decía mientras se dirigía al albino con la taza de café.

──Oh, bueno, mucho gusto Utahime, me llamo Gojo Satoru, soy un viejo amigo de Mei Mei
. Decía recibiendo la taza de café con una sonrisa.

Satoru se llamaba... Con que amigo de Mei eh, creo que tendría que investigarlo con ella, tenía que saber más de el.

──Bueno, tengo que irme, la verdad hay mucho trabajo que hacer, nos vemos luego Utahime!
. Decía mientras se dirigía a la puerta de entrada.

──Si, adiós...
. Decía mientras agarraba el dinero que el albino había pagado.

Fue poco lo que platicamos, pero... Me sentí muy confiada y se veía que era una persona simpática, ojalá en algún otro momento, en otro día pueda volver a venir y atenderlo, talvez tener la oportunidad de saber más de el...

7:40 a.m

──Mei... Conoces a un tal Gojo Satoru?...
. Decía mientras colocaba los servilleteros en las mesas.

──Ah, si, es un viejo amigo mío, estudiábamos en la misma universidad, ¿Cómo lo conoces?
. Decía mientras miraba a Utahime confundida.

──Vino ayer a unos cuantos minutos de cerrar y me dijo que era un viejo amigo tuyo...
. Decía Utahime un poco nerviosa.

──Oh, que sorpresa, tenía meses sin venir, deseguro está en fechas de evaluaciones de sus alumnos, por eso no venia, es profesor de la universidad que esta aqui a la vuelta.
. Decía Mei mientras se ponía un mandil.

Era... ¿Profesor? A eso se debía su prisa por irse, no conocía a perfección como era la labor de un maestro, pero, sabía que cuando eran fechas de evaluaciones era algo que tendia a ser muy estresante...

──Bueno, ojalá y vuelva a venir... Tengo meses sin hablar con el.
. Decía Mei mientras se dirigía a la puerta de entrada a cambiar el cartel de cerrado a abierto.

──Si... Ojalá...
. Decía la pelimorada con una sonrisa.



Con esas simples palabras sinceras Mei pudo sentir que Utahime tenía sentimientos por su amigo y no tenía nada de malo en lo absoluto, después de todo, era un buen hombre.







Mi Linda Mesera ☕   𝗚𝗢𝗝𝗢 𝗫 𝗨𝗧𝗔𝗛𝗜𝗠𝗘 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora