Corazones libres| Zodiaco CF2°

Capítulo ¹

"INICIO DE CLASES"

[✧] Ariana.

Aburrido.

La mejor definición para decir como son las clases, lo único entretenido es los chismes que llegan a mis oídos al caminar en los pasillos. Segundo año de preparatoria y ya me quiero jubirla, quiero estar como mi abuela simplemente ganando dinero, viajando y siendo posiblemente una suggar de algún estúpido pero atractivo chico.

Suspiré, mirando como Garret estaciona el auto enfrente de la casa, sin quererse bajar como siempre toca el clapson, sin importarle que este afuera de mi casa y mirándolo con mucho odio, no necesitaba verlo cara a cara para saber que sonreía divertido por molestarme tan temprano en un primer día de clases, antes que pueda dar un paso Grace saco la cabeza de la ventanilla de copiloto y me saludo como si el día de ayer no nos hubieramos visto.

—Trae ese placido trasero acá, srta. Aries! —la alegre voz de Géminis me irrito una vez más, la energía de vivir tan temprano la vida no sé de dónde lo saca.

Una vez entre al auto azote con fuerza la puerta, para molestar a un geminis en especial.

—¡Hey! Vuelve a hacerlo y tú pagarás la gasolina de un mes! —me amenazo mirándome desde el retrovisor, le sostuve su mirada y abrí la puerta para volver a azotarla— ¡Maldita sea, Ariana!

Extendí los billetes hacía al frente y la geminana los tomó. No es que les faltara dinero para gasolina, cuando se trata de dinero en la familia Géminis, ahí les sobra, pero su manera de ellos de castigar a todo aquel que maltrate el auto es pagando por gasolina o el daño causado en el vehículo.

—Gracias por tu donación, es bien recibida —agrego divertida por la pelea de inicio a clases— no sé por que siempre ustedes dos pelean en cada inicio a clases despues de vacaciones.

—Es que odio madrugar, odio estudiar —gruñí con flojera, dando un sorbo al vaso termico donde coloqué mi café de la mañana.

Cerré los ojos, sabiendo que pasarían por Tea y luego nos iríamos a la universidad, sentía mi cuerpo tan pesado que después de un largo bostezo no supe nada más de mi realidad.

El calor aumento poco a poco hasta el punto de ser insoportable como el ardor en mi cara, abrí los ojos con pesadez sin saber por que el idiota de Garret apago el aire condicionado.

—¿Qué carajos? —murmure confundida al no ver a nadie en el auto, una nota estaba en mi termo de café.

“Ya empezaron las clases, corre bitch.
-G".

Gruñi arrugando la nota, abrí de golpe la puerta, escuchando como la alarma sonaba, me importo un carajos el ruido y el escandalo que pudiera causar, era problema de Garret, por no despertarme, mis pulmones ardían al igual que los músculos de las piernas, no podía parar de correr para tomar un descanso, sino estoy mal ya llevo mas de tres horas de clases perdidas. Cuando estoy por llegar a la puerta de la clase que me tocaba, el timbre sonó, los alumnos salieron y a unos pasos apareció Tea, confundida por mi agitada y sudorosa apariencia.

—Hey, ¿Qué te paso, dónde estabas? —pregunto ofreciendo un bote de agua, el cual tome sintiendo como el cuerpo se refresco poco a poco.

—Los malditos de mis primos no me despertaron y tú tampoco! —la enfrente y ella frunció el ceño sin saber de que hablaba.