THE ONE

Capítulo 25 - Me gustaba

*Narra Pedri*

Me despierto antes de que la alarma suene, afuera ya comenzaba a amanecer, pero el cielo aún se veía un poco oscuro.

Debía ir a un club deportivo fuera del pueblo donde iba a estar trabajando con un entrenador calificado por el Barça para la lesión de la pierna. Usualmente entrenaba o iba a jugar en ese lugar siempre que venía a visitar a mis papás y a Óscar ya lo conocía, confiaba en él.

Vera aún sigue dormida a un lado de mi, así que me levanto en silencio para no despertarla, cojo ropa de entrenamiento de mi cómoda, mi mochila y las botas.

Antes de salir al baño para asearme, me permito mirarla por unos segundos. Ella estaba acostada boca arriba con uno de sus brazos estirados a un lado y el otro sobre su abdomen. Su pecho subía y bajaba lentamente y sus labios estaban un poco separados. Llevaba una camiseta mía y unos shorts, ya que aunque fuera el último mes del año con los dos encerrados en mi minúscula habitación nos íbamos a morir de calor de dormir con otra cosa.

Dejo de verla cuando escucho una puerta cerrarse, veo a Fer salir de su cuarto aún con cara de dormido y voltea a verme cuando me ve ahí parado en la entrada de mi habitación.

- ¿Estas listo?

- Solo me cambio.

Fer me lleva hasta el club y de ahí se va a la tasca, él siempre que se encontraba aquí ayudaba a mis padres abriendo el local y empezando a preparar las cosas, así les alivianaba un poco la carga.

Yo saludo a mis conocidos y después me encuentro con Óscar para empezar la mañana.

Dos horas después siento que estoy a punto de morir, no tanto por la pierna, sino porque me costaba el doble hacer todos los ejercicios, y eso que no eran nada difíciles. Como odiaba que todo mi progreso se fuera a la basura por otra estúpida lesión.

- Descansa Pedri. - Mi entrenador me da un golpe amistoso en la espalda y yo me tumbo sobre el césped estirando mis piernas para ver el partido que se estaba llevando a cabo en la cancha.

Cojo mi mochila donde tengo mi botella de agua y también tomo mi móvil. Abro el chat de Vera cuando veo que tengo varios mensajes de ella.

Vera🐒:
Hola
Donde están todos?

Pedri:
Apenas vas despertando? 🫣
Que vaga
Mi padres se fueron temprano a la tasca, seguro Fer pasa en un rato a recogerte.

Vera🐒:
Desperté hace horas😳
Vale, nos veremos ahí?

Pedri:
Si, termino en una hora.
Lleva traje de baño, así vamos a la playa después de hacer un poco de turismo😉

Vera🐒:
Vale
😗

También veo que tengo mensajes en el grupo de los chicos del barça, pero no los leo porque eran demasiados, ya lo haría después.

Voy a apagar mi móvil cuando me llega otro mensaje, abro el chat y veo que se trata de Miriam, quien me ha enviado las fotos que me tomo el día que estuvimos en la piscina. Me revuelvo en mi lugar incómodo y abro su conversación.

Miriam:
*Fotos*
Que guapo sales🤤, ojalá volvamos a repetir

Pedri:
Gracias por las fotos!

Borro el chat al contestarle y pongo en silencio y la archivo, no quería que me llegaran mensajes de ella y que Vera pueda verlos.

Ahora que ella estaba aquí y aún sabiendo que nosotros no éramos más que amigos con derechos, no puedo evitar sentirme como una mierda por lo que hice, más porque sabía que Vera no estaba haciendo lo mismo y ella esperaba que en ese aspecto fuera correspondida.