I'm Not A Boy

4.- I don't care

Había pasado tiempo desde que había "discutido" con Hunter, que su cabeza aun no estaba clara, difícil obviamente que lo estuviera si por dentro su sistema nervioso parecía un coctel, sin saber que emoción agregar más al buffet de "innecesarias", que respirando hondo, opto por ir a su habitación, puesto que quizás una pequeña ducha le ayudaría a tomar la decisión que lo llevaría a pecar nuevamente, oh a hacer las cosas bien poniendo distancia, alejándose por completo de lo que próximamente sería un verdadero desastre de lo que había sido su amistad con el azabache ojiazul.

Ya en el lobby del hotel, para mejorar su "buena suerte" tuvo el imprevisto de chocar con alguien, al cual de inmediato reconoció por su timbre de voz, cosa que le hizo mantener su cabeza gacha susurrando un casi inaudible: "— Lo siento. —" debido a que había sido con Tom, con quien había chocado.

Quiso reanudar su camino hasta su habitación, evadiendo la mirada del policía, pero este le detuvo del brazo, y comenzó a hablarle, cosa que en verdad ahora precisamente no necesitaba.

No después de la "discusión y propuesta" que tenía presente con Hunter.

— Jake necesito que hablemos, es en serio, se que después de todas mis conversaciones, de todas las que hemos tenido y las cuales mi teléfono ha interrumpido... necesito contarte algo que quizás cambie mucho la perspectiva sobre nosotros. —

Tom había hablado tan rápido y de forma tan seria, que su cuerpo tembló al ver que su escapatoria de aquello no era una opción, que dejo de tensarse y aflojó, volteo lentamente a verlo, y sintió su propia saliva pasar de forma abrupta por su garganta. Tom se encontraba ahí parado junto a él de forma seria, casi vulnerable por que se notaba por sus ojos que el sueño no lo había solido acompañar la noche anterior, sus ojos verdes se veían tristes, casi melancólicos, que algo se removió en su interior.

No quería ser el mismo idiota que este pasaba engañando, pero...había algo esta vez en él que lo hacía seguirle, que lo obligaba a asentir con su cabeza para dejarse guiar.

Su ducha esta vez tendría que esperar.

— Muy bien Tom ¿De qué querías hablar? Que sea rápido por favor porque tengo un asunto importante esperando y...

Había sido rápido también, cortante al ver que el ojiverde lo había guiado hasta su habitación, no quería entrar, pero al ver cómo le había hablado, Tom no encontró mejor forma de responder a aquello besándole, besándole de una forma tan abrupta, tan salvaje que no pudo siquiera procesar que demonios se encontraba pasando y porque este literalmente había utilizado su cuerpo para abrir la puerta de la habitación.

— T-Tom ¿¡pero qué demonios!? ¡suéltame! — Exclamó cuando tuvo oportunidad de separarse de este, cuando pudo respirar, a lo que el oficial, lo tomó como si de una princesa se tratara llevándole hasta su cama, dejándole ahí, en lo que se subía junto a su cuerpo, aprisionando sus brazos con una de sus manos por arriba de su cabeza.

— Mentí Jake, mentí... nunca existió alguien más, siempre fuiste tu pero no podía decirte nada. De hecho, no puedo hacerlo, por mi maldito trabajo, por Jensen, por protegerte, pero he estado enloqueciendo viendo la cercanía que él ha creado contigo, dime has hecho algo ya con él... Jake no me digas que tu asunto importante es él... Jake, no me digas que tú y él...

Tom tenía los ojos aguados a punto de llorar y eso a Jake le dolía, le dolía como no tenía idea, aquello junto con su revelación le hacía recordar los dos años de espera, todo, que cerró los ojos llorando también junto a Tom, que recostó su cabeza en su pecho, soltando todo como si de un niño se tratara.

— Él es mi amigo...— Solamente susurro, abrazando la cabeza ajena, dejándose llevar por lo que le decía su corazón, sintiendo como también una parte de él le dolía ya que Hunter, no solamente había sido solo su amigo, o, sí?

Hunter, quien ya había salido del bar del hotel se encontraba afuera de la habitación de Jake, mientras marcaba su número en su móvil esperando su respuesta, cosa que como tal no recibió, causándole una leve preocupación, decidió caminar por el pasillo queriendo ir a buscar a Miriam pensando que el chico de cabellos azules podría estar ahí. En verdad que tenía ganas de hablar con él, que todo aquello de la propuesta que le había hecho quedase en el olvido ya que no quería presionarlo a nada, quería pedirle disculpas, y, es más, quería que después de todo aquello, siguieran tan amigos como lo habían estado siendo, aunque claro, con la diferencia que él estaba locamente empesismado en querer que aquella noche que pasaron juntos se repitiera.

—¡Miriam!, ¡soy yo Hunter! — Toco la puerta que daba con la habitación de la anciana al llegar ahí, esperando a que esta le abriera.

Cosa que paso unos tres minutos después, mostrando a esta de forma casual, y con cara de interrogación ya que mayor contacto nunca habían tenido, mucho menos el cruzar palabras algunas.

— ¿Qué deseas hijo? — Expreso la anciana sin abrir por completo la puerta, observando al de tes pálida de arriba abajo, viendo lo nervioso que se encontraba, y como este rascando su nuca le preguntaba por su nieto adoptivo, algo que la hizo sonreír y negar con su cabeza.

— Lo siento hijo, pero Jake no ha venido, es más pensaba que estaría en su habitación, o tu ya sabes, debe de estar por ahí tratando de hablar con Tom, porque vaya que no se da por vencido ese niño. Si tan sólo pudiera fijar sus ojos en alguien más...— Termino por susurrar la anciana, a lo que el suspiro decepcionado pensando que este estaría ahí, pero luego de oír lo de Miriam, hizo de sus manos puños, y con un leve movimiento de cabeza se dio media vuelta para retornar a la habitación de Jake.

<<Quizás esté hablando con Tom como dice Miriam...así que lo mejor será pensar que, a lo mejor lo vería a la hora de cenar en el lugar acordado, ¿no...?>> Se dijo así mismo Hunter, yendo ahora a su propio cuarto, para pensar qué demonios pasaría con él y con Jake esta noche, y si es que este aparecería a la hora acordada.

— Así que por eso no contestabas mis llamadas, ni me las devolvías... ajá y quieres que te crea y que de plano aquí mismo y ahora nos reconciliemos. — Debatía Jake, al oír toda la historia que Tom le contaba y aseguraba, aunque claro sin tener en cuenta que ahora estaba modo preso, ya que para no poder huir ante toda esa explicación Tom lo había esposado dejando una de sus manos libres, mientras que la otra estaba esposada a la cama.

— El hecho de que Jensen pudiera rastrearte y hacerte daño me aterraba, no quería que nada les pasara a Miriam y a ti, no podía permitir que te hicieran algo, por eso debía comportarme así, por eso debía mostrar algo que no era, por eso el trato Jake, yo jamás quise hacerte daño...

Se defendía el mayor, frente al chico de cabellos azules, quien solo lo miraba con cara de no creerle mucho, queriendo también que este lo soltara ya que, tenia algo pendiente, y tenia que saber salir de ahí.

Sorpresivamente, por ahora no quería estar con Tom, sino que quería ver a Hunter, siendo que había esperado esta conversación del policía hace tiempo. Sin embargo, ahora era como si en verdad ya no le afectara como le hubiese podido afectar antes.