Kaia.
Este lugar es un puto asco, aveces ni siquiera puedo pegar un maldito ojo, por este lugar desastroso.
El aroma a marihuana me provocaba náuseas, las asquerosas miradas de aquellos hombres me dan asco. Me aterra la idea de que alguien pida por mi.
Yo no quiero esto, pero ahora debo hacerlo, aunque lo único que quiero es morirme. Me da asco solo ver como todas estas chicas se prostituyen obligadas por el.
Me había obligado a que bailará en un puto tubo, tenía que usar ropa demaciado reveladora.
La asquerosa mirada de Tom estaba puesta sobre mi, mientras me deslizaba por el tubo.
Estoy hace dos semanas aquí, por suerte Tom no me a vuelto a violar. Pero su sola mirada me provoca nauseas.
Trata de concentrarme en la música y hacer bien el baile, no queria tener problemas con Tom.
Veía como su mirada seguís cada uno de mis movimientos, no le preste atención y continúe.
Lo más asqueroso fue ver cómo las perras se sentaban sobre el, y el las maonoseaba metiendo sus manos por debajo de la ropa de las tipas. Mientras lo hacía enfocaba sus ojos en mi, aproposito comenze a coquetear con un tipo que había allí.
Movía mis caderas coquetamente mientras subía y bajaba por el tubo, sentía la pesada mirada de Tom. Seguía moviendome sensualmente por el tubo.
Cuando la canción término, baje sensualmente y pase por el lado de Tom, donde parecía estar casi follando con esas tipas.
Todos me comían con la mirada, pero a la vez me miraban con miedo. No entendía el porque, pero si me hacía sentir tranquila. El echo de que ninguno de estos depravados me harían algo, más asco me da el echo de que algunos son casados y con hijos.
La música sonaba bastante fuerte, las demás bailaban desnudas frente a todos los hombres que habían. Camine hacía dasha, después de todo no era tan mala como parecía.
-¿como estas, linda?-pregunto una vez que llegue junto a ella.
Ella me entregó un abrigo bastante grande, que cubria hasta la mitad de mis muslos. Ella se encontraba contando dinero, los prostíbulos de Tom, son una entrada perfecta para vender droga, marihuana y sus tráficos.
-bien, pero algo asqueada. Ya sabes el porque.- dije apoyando mis codos sobre el mostrador.
-kaia, tienes la suerte de que Tom no te haya vuelto a violar.- murmuro acariciando mi mejilla.
-tienes razón, pero yo no quería esto.- dije.
Ella solo me miro, ella nunca se había prestado a las necesidades de Tom. Ella es más de hacerlo con Bill. Desde las dos semanas que estoy aquí, me hice bastante cercana a dasha. Será porque no es una perra problemática como las demás.
Dasha comenzo a preparar los tragos que pedían, ella no era una prostituta. Actua y se viste como tal,
pero no lo es. Tom le tiene demaciada confianza por que es la chica de su hermano, ella es mayor que yo, tiene la misma edad del descarado de Tom.-Tom te esta comiendo con la mirada.- dijo sacandome de mis pensamientos.
Mire hacia la dirección donde miraba dasha y me encontré con la mirada penetrante de Tom, puesta en mi cuerpo.
Sentí escalofríos al conectar mi mirada con la de el, sus ojos estaban penetrando los míos. Una rubia casi desnuda estaba sobre el, besando su cuello. Pero Tom tenía su mirada fija en la mia, parecía que el me estaba matando con la mirada.
Me estaba haciendo miles de cosas con su mirada. Desconecte mi mirada de la suya y mire a dasha.
-preparame lo más fuerte que tengas.- dije.
-esta bien, pero ni pienses que te cuidare como la última vez.- dijo comenzando a preparar el trago.
Tom.
Mi mirada esta puesta en cierta pelinegra, aunque ella parecía ignorarme. Se que mi mirada le pone los nervios de punta, no puedo quitarmela de mi mente, sus gemidos aunque fueron de dolor, mientras la violaba.
Quiero volverla a escuchar, pero trato de controlarme. Ella ni siquiera la palabra me dirige, yo ni siquiera le hablo para molestarla.
Baje de mi regazo a la rubia que tenía sobre mi regazo, la tome de la mano y la dirigi a la habitación privada que tengo en el club.
Mire por última vez a kaia, y entre a la habitación con la rubia. Distraerme con una rubia para olvidar mis ganas de volver a violar a kaia.
Kaia.
Tomaba trago tras trago, tratando de olvidar todas mis desgracias. Cada vez me embriagaba mas, comencé a fumar mientras comenzaba a bailar.
Comencé a deslizar mis manos por mi cuello, bajandolas por mis pechos hacía mi cintura hasta llegar a mis caderas, moviendo mis caderas, de un lado a otro.
Mordía mis labios bailando al ritmo de la musica, me sentía más libre. Cada vez el alcohol hacía más efecto en mi, cerré mis ojos dejándome guiar por la musica. Solte más mi cuerpo moviendome con más fluidez.
Me sentía más libre sin que Tom me estuviera viendo. Me comencé a mover más sensualmente, ahora sentía la mirada de todos sobre mi.
Aun no entendia el porque todos me miraban con temor, con temor a que algo les pase si me miran. Eso siempre pasa cuando Tom esta cerca, pero ahora no lo esta. Así que todos aprovechan para mirarme.
Sentí unas manos en mis caderas, por lo que me deje llevar, comencé a menearne cada vez más sin saber quién era.
Estaba completamente ebria, no estoy consciente de lo que hago. Al parecer el extraño aprovechó eso, dasha estaba ocupada por lo que no se percató.
Aquel hombre me metió en una de las habitaciones, me tambaleo y me choco contra las paredes, de lo ebria que me encuentro.
-ahora si dulzura, serás mia.- susurro una voz muy gruesa.
Me quiso besar y yo retrocedi empujandolo.
-no, estas loco.- dije arrastrando las palabras.
El intento forzarme otra vez, me tiro a la cama y yo le di una parada. El comenzo golpearme.
-¡quédate quieta maldita perra!- dijo dandome una fuerte bofetada.
Mi labio se rompió al sentir el golpe, pero eso no me detuvo a comenzar a tirarle golpes.
Tenía tanto miedo que comenze a gritar, cuando el tipo comenzo a tratar de arrancarme la ropa. Me levante corriendo de la cama, el me sujeto del brazo y yo comencé a darle golpes.
Estaba tan asustada, quería que alguien me ayude. Cuando volvi a darle un golpe al tipo cuando intente abrir la puerta, el me dio un fuerte puñetazo en mi rostro dejándome completamente aturdida, provocando que todo a mi alrededor se volviera negro.
-¡quita tus asquerosas manos de ella!-

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"𝐃𝐢𝐞 𝐅𝐨𝐫 𝐘𝐨𝐮"|| 𝙏𝙤𝙢 𝙠𝙖𝙪𝙡𝙞𝙩𝙯
FanfictionQuien diría que en una noche, mi vida cambiaría por completo, por aquel hombre... El mismísimo diablo en persona, el que me haría vivir un infierno, el con solo verlo me daba asco... Pero del odio al amor hay un solo paso ¿no?, me estaría volviendo...