Capítulo 28: 🥀Los engranajes del Destino🥀

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Habían pasado sesenta días, desde el último viaje que diese el rey Edward. El otoño llegó a Beyorn y, por ende, llovía con frecuencia. El rey y la reina se encontraban solos en la habitación. Esta última se sacaba los accesorios del cabello, le pidió a una sirvienta que le preparase el baño. Mientras, el rey acabó de quitarse las botas y se acercó a ella.

Edward le besó en el cuello, a la vez que Aurora lo miraba por el espejo.

Ok—Estáis tan hermosa como siempre.

—Agradezco vuestros halagos, amor mío — Aurora se giró en el asiento del tocador, le tocó el rostro y le dio un beso en los labios.

El rey le regaló una sonrisa, la cual desapareció y se tornó una mirada de preocupación, al escuchar que la reina se quejaba de dolor en el bajo vientre.

—¿Qué os ocurre, amor mío?

—No ha sido nada, solo un leve dolor.

El rey le acarició el vientre a la reina, quien le sonrió con la intención de tranquilizarlo.

—¿Estáis segura?

—Por supuesto, no debéis preocuparos.

Aurora se alzó de la silla delante del tocador, tras hacerlo el dolor en el bajo vientre adquirió más fuerza. Intentó contener un chillido de dolor, pero resultó inevitable y se encogió debido a tal molestia.

Horrorizado y preocupado a partes iguales, Edward le acarició la espalda.

—Creo, mi reina, que no os halláis bien. Reconozco que sois perseverante, mas no es necesario que ocultéis vuestras dolencias.

Aurora quiso replicar, pero el dolor le impedía pensar. Tras unos instantes, cuando intentó dar un paso adelante, un líquido transparente corrió por sus piernas y la bata ligera que llevaba puesta se humedeció.

—¡Guardias, buscad en este instante a las comadronas! —la voz del rey tembló un poco, un sudor frío le corrió por la frente.

Al instante, los guardias cercanos acudieron al pedido del rey. Momentos después, las comadronas se encontraban ante ellos.

—Majestad, le voy a pedir que salga de la habitación —habló la primera en entrar y la más anciana.

Pese a que los nervios amenazaban con hacerle perder el temple, Edward logró reunir las palabras indicadas.

(Saga) Legado De Sangre I: Fuerza De AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora