Amor entre enemigos de por vida

Sencillo

Nick

Dos semanas, eso fue lo que dure en este fastidioso hospital, dos semanas en la que era una revisión constante de mi herida en la espalda, la cual había sido más profunda de lo que pensé, mientras que las demás heridas y los golpes ya estaban mucho mejor. Seguí recibiendo visitas en estos días, menos de Judy, no voy a negar que eso me puso triste pero Skye me dijo que no podía arriesgarse a ponerme en peligro, una tonteria para mi pero no pensaba discutir sobre eso. 

-¿Estás listo Nick? - dice Skye a mis espaldas, se había ofrecido para llevarme a mi departamento hace unos días mientras hablaba con mi madre, la cual no dejaba de decirme que le parecía una hembra muy linda aunque tímida, aceptó de inmediato su ofrecimiento y me hizo prometer que le avisaría en cuanto estuviera en mi departamento.

-Estoy listo, vámonos de este lugar - digo soltando un suspiro de fastidio mientras observo esta habitación, ahora me parecía deprimente. Me levanto de la cama y miro mi ropa que no hace mucho me había puesto, mi madre los trajo pero estoy seguro que fue Finnick quien lo puso en la bolsa, lo se porque no combinaba para nada.

-Te has enamorado de esta habitación - sonríe Skye burlona

-Ni loco - me doy prisa para llegar a su lado y trato de tomar la pequeña maleta que lleva, ella evita que lo haga y se va directo a la puerta - déjame ayudarte 

-Eso debería decirlo yo - sonríe y abre la puerta

Salimos del hospital sin inconvenientes, me sentía muy bien al dejar al fin esa habitación y el olor a medicamentos, la herida ya solo dolía si hacía movimientos bruscos pero de ahí en más me sentía bien. Skye se veía atenta a cualquier signo de dolor que tuviera pero poco a poco de fue relajando.

Nunca creí que extrañaría la luz directa del sol mi cara, el aire fresco... o no tan fresco de la ciudad, le gran variedad de sonidos y todo el mundo exterior en general, me detengo unos momentos disfrutando la sensación hasta que Skye trata de llamar la atención de algún taxista cercano.

-Prefiero ir caminando- digo y ella me mira enarcando una ceja.

-¿Hasta tu departamento?

-¿Sabes dónde está?

-No, pero dudo que esté a 5 minutos a pie - 

-Jajaja pues no, pero tampoco está tan lejos, necesito estirar las piernas un poco - estiro mi pierna derecha provocando un trueno en mi rodilla, vaya vejez.

-Esta bien jaja - ríe - ¿por donde es?

-Yo te guiaré pero.... ¿Quisieras ir conmigo a un lado antes?

-¿A donde?- dice de inmediato

-Ven conmigo - extiendo mi mano, ella la mira algo dudosa pero poco después la toma.

Mi primer pensamiento en ir a un lugar para comer, estos días con una dieta muy limitada me ha dejado con mucha hambre, guío Skye por la ciudad hasta dar con un restaurante que me ha gustado mucho visitar desde que empecé con mis "estafas" con Finnick, claro que no era tan seguido pero siempre trataba de ahorrar un poco para venir con mi madre o yo solo.

El restaurante tenía una decoración muy sencilla y limpia, ideal para cualquier animal y para toda la familia, contaba con zona infantil y otra zona más silenciosa para que los adultos se relajen mientras comen. Mi primera impresión después de meses sin venir es ver que habían decorado un poco pero manteniendo su estilo sencillo, Skye observa el lugar y sonríe un poco, me sigue hasta el interior y tomamos una mesa disponible en el centro.

-Me gusta el lugar - comenta Skye sin dejar de dar vistazos a cada rincón del lugar - tiene una energía muy relajada, ideal para toda la familia 

-Eso mismo pienso yo, para mi es un buen lugar donde comer sin preocupaciones, además de que el servicio aquí es muy bueno, no tratan mal a nadie - sonrío mientras echo un vistazo al menú.