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—Oh, Dios mío, Jake.—Dijo Jungwon mientras veía la prueba de embarazo sobre la cama del castaño.—¿Qué le dirás a tus hermanas?

El castaño aún estaba sin procesar lo que había pasado. Él aún no se sentía listo para ser papá, tampoco sabía como serlo. No estaba preparado. Nadie nunca le enseño como ser papá. Pero en defensa de Jake: nadie sabe como ser papá a los dieciséis años. Y sin contar que el padre de su hijo es la persona con la que menos había imaginado. Heeseung. No sabía siquiera si él se iba a hacer responsable de ese niño. Su hijo

Y ahí fue cuando el pánico se apoderó de él.

¿Heeseung se haría responsable de ese niño?

Pues claro que tenía que hacerlo, pues él tenía tanta culpa como Jake la tenía.

Sus pensamientos se hicieron a un lado cuando escuchó como su celular sonaba. Le dio una mirada rápida a su amigo pelimarrón, Jungwon, a su lado, antes de tomar su celular y ver quien lo llamaba tan por la noche, pero el número era desconocido, así que colgó la llamada, pero volvieron a llamar y ahí fue cuando respondió.

—Hol-

—Me haré responsable del niño...

Hubo un largo silencio.

—¿Heeseung?

—Mira, Jaeyun. Yo se perfectamente que no nos soportamos pero, por cosa del destino vamos a tener un hijo, también es mi hijo. Nuestro hijo.

Más silencio...

—Heeseung-

—No, Jake. No tomaré un no como respuesta. También es mi hijo el que esta en tu vientre.— Dijo el mayor con un tono demandante.—Lo estuve hablando con mi familia y ellos me apoyaran en todo. Nos apoyaran en todo.

Jake sintió con si en su estomago hubiese un huracán de emociones, pues muy lejos de la realidad no estaba. El simple hecho de pensar en formar una familia con Heeseung lo hacía sentir... Extraño.

—Bien... No te quitaré el derecho de ver a tu hijo, pero no pienso casarme contigo. No quiero que mi hijo crezca en un hogar lleno de peleas y sin amor.

—Jake.—Dijo Heeseung con suavidad pero en forma de reproche.

—No, Heeseung. 

—Jake, eso es lo que quieren mis padre: que nos casemos.— Heeseung sonaba exasperado por la situación.— Solo por la economía del niño y la tuya. Quiero que sea feliz, si no quieres estar conmigo, no importa. Tu puedes estar con quien quieras y yo tamb-

—No.—Dijo el castaño con severidad, pero había algo en su voz que... sonaba como si en cualquier momento quebraría en llanto.—Eso jamás, mi hijo solo tendrá una figura paterna... Y si no eres tú, yo me casaré con otra persona que si me ame y mi hijo lo vea como su padre.

Heeseung se quedó en silencio por un largo rato.—Mis padres te quieren conocer... 

—...Bien, mañana por la tarde.—

Con eso finalizó la llamada con el padre de su hijo. Y sí, se echo a llorar en el hombro de Jungwon mientras lo abrazaba.

—¿Qué voy a hacer, Wonie? Yo ni siquiera se si quiera tenerlo.

—¡No digas eso, Shim Jaeyun! Tú tendrás a tu bebé. Al fin y al cabo el niño no tiene la culpa de los errores de los padres.—Reprendió a Jake severamente.—No lo puedes simplemente abortarlo.

Jake lloró aún más.—Pero n-ni siquiera he terminado la secundaria. No he ido a la universidad. No he cumplido muchas de las metas que tenía planeadas para mi vida, Won...

—Lo se, Yun. Pero no puedes quitarle la vida a esa criatura que llevas en tu vientre... Él ahora es y será parte de ti, Jakey.

El castaño se hizo bolita en su cama mientras pensaba en como sería su bebé, la sola imagen de ver a un pequeño travieso correr por toda su casa para abrazarlo le sacó una sonrisa. Si, tal vez era una responsabilidad muy grande de por vida, pero tendría lo que siempre quiso. Una familia.

No es que sus hermanas no lo fueran, pero, saber que esa personita es con la que estarás por el retos de tu vida, cuidará, consolará y le enseñarás todo un mundo nuevo para aquel ser tan puro como el agua de un manantial.

Definitivamente Jake jamás se arrepentirá de tener a esa criatura, a ese rayo de luz. Él le dará lo que nunca logró tener. Dará su vida si es necesario, pero de que lo tendría, lo tendría.

Minutos después, se levantó e invitó a su mejor amigo a acostarse en la cama con él, para platicar mientras concilian el sueño.


Sin duda que fue una noche divertida, llena de risas e ilusiones sobre el futuro bebé de Jake. Sin duda Jake tenía a los mejores amigos del mundo.




Al día siguiente, para sorpresa de Jake y de Jungwon, Heeseung los fue a recoger en su carro deportivo de color rojo. Este niño mimado era de lo peor.

—Esta puta niña...— Murmuró Jungwon, causando risa en Jake antes de acercarse al carro rojo estacionado frente a su casa.

—¿Qué mierda haces aquí, Heeseung?

—¿No es logico?—Dijo el mayor a Jake.

—¿Qué cosa?

—Jake, vamos a ser padres. Voy a venir a buscarte todos los días para asegurarme que no te va suceder nada.—Jake bufó y rodó los ojos.

—Vete a la mierda, Heeseung.—Dijo antes de hacer un gesto con la mano para que se acercara a su mejor amigo que estaba parado a unos pocos metros del castaño.—Vamos, Wonie. Adiós.

Jake empezó a caminar junto a Jungwon, ignorando todos los llamados de atención del mayor hacia el castaño. Hasta que el mayor se cansó y salió de su auto para tomar a Jake del brazo y darle la vuelta, No obstante, lo levantó y lo puso sobre su hombro sin ningún tipo de dificultad. Jake pataleo, gritó y protestó, pero no consiguió nada, Heeseung ya lo había metido en el asiento de copiloto y después se acercó a Jungwon para también hacer lo mismo con el pelimarrón, pero a este lo metió en los asientos traseros.

—¡Heeseung, apenas tengo dos semanas de embarazo! ¡Ni siquiera me ha crecido el vientre!—Dijo el castaño casi gritando cuando el mayor se subió y encendió el auto para ponerse en marcha a la secundaria.

—¿Y eso qué?— Cuestionó el mayor sin mirarlo y simplemente viendo a la carretera, Jungwon no opinó y solo se metió en su celular, muy cómodo ya que no tenía que caminar hasta la escuela.

—Hees, deberías venir por nosotros todos los días.— Jungwon recibió una mirada asesina de parte del menor diciendo claramente "Traidor"

—Eso es lo que haría, así Jake pelee, y puede hacerlo todo el tiempo que quiera.—Dijo heeseung con un tono divertido al haber recibido un golpe en el hombro por parte del castaño y Jungwon también rió.

—Los odió.—Dijo con un pequeño puchero mientras se cruzaba de brazos y miraba hacia fuera de la ventana. 

El viaje fue muy ameno y tranquilo, Jungwon y Jake de vez en cuando hacían comentarios de como sería el bebé y que deberían comprar muchas cosas para aquel pequeño que llevaba Jake en su vientre. Jake por inercia tocó su vientre con ternura y Heeseung vio esto, y también por impulso, colocó su mano sobre el vientre de Jake por el resto del camino, Jake no dijo nada, pues entendía completamente a Heeseung.

Ese pequeño bebito sería su hijo. El de ambos.

Insensible | HeeJake Donde viven las historias. Descúbrelo ahora