Je t'aime | Lando Norris.

10 - Paparazzi.

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¡Fotos más personales de Adrianna Russell y Lando Norris!

Hoy una cuenta muy famosa entre el fandom de Adrianna: @AdriannaDaily, público en twitter unas fotos que generaron conversación en el fandom de los fans de Adrianna y F1, aunque más en concreto, los fans de Lando Norris.

La gente no está tirando hate, pero si están sorprendidos ante tales demostraciones de amor "públicas", aunque realmente no son públicas porque la segunda foto fue tomada afuera de la casa George Russell, hermano de Adrianna y la primera, en el carro del Británico. Los fans no están muy de acuerdo en que se difundan estas fotos, porque es invadir la privacidad de ambas figuras públicas.

Me levante por una llamada, no me sorprendí en lo absoluto al abrir los ojos y encontrarme apoyada del pecho de Lando. Me levanté levemente, para que no se diera cuenta, pero en cuanto agarre mi teléfono, me jalo hacia él, acostandome nuevamente sobre él.

Reí ante ese gesto y solo le susurré: "No me iba, solo voy a contestar la llamada", Lando se movió poquito, dejando que me sentara en la cama para contestar la llamada.

—¿Mande? —pregunté, después de ver que era mi papá él que llamaba.

—¿Te estas acostando con Lando? —dude en que contestarle, pero primero llegó a mi cabeza la pregunta, ¿Cómo él sabría eso?

—No, estamos llevando la convivencia. —conteste, mirando sobre mi hombro a Lando, aliviandome al ver que no me estaba prestando atención.

—Deberías checar tu twitter. —es lo único que dijo y luego colgó.

—¿Ya terminaste? —preguntó Lando, yo asentí y él me volvió a hacer un espacio para que me acostara con él.

Me acomode bastante rápido y Lando antes de quedarse dormido me dio un beso en la frente, definitivamente no lo estaba esperando, esperaba algún beso en los labios, me sorprendió.

27 de julio - 38 días después.

No tenía ninguna intención de levantarme temprano, pero viajaré a Roma dos días junto con Kelly, Lando y Max para tener unas mini vacaciones. Mientras voy a en el avión, recuerdo la plática que tuvimos hace unos cuantos días.

Estábamos en el sillón de la sala, mirando hacia enfrente, sin decir nada, aún.

—¿Entonces nunca me odiaste? —Le pregunte, nos habían vuelto a dejar solos en la casa, y por fin podíamos tener la plática que tanto habíamos evitado.

—No, simplemente no estaba en mi mejor momento, no tenia muchas ganas de hablar.

Asentí levemente.

—Mira, ahora me siento muy confundida, no en mis sentimientos hacia ti, estoy segura de que me gustas un poco, más bien estoy preocupada, no quiero que mi anterior experiencia amorosa afecte nuestra relación. —confesé, aquí fue cuando me volteo a ver, y agarró mi mano.

—Yo te espero todo el tiempo que necesites.—dijo.

—¡Adri! —me llamó Penelope, la hijastra de Max, hija de Kelly. Sacandome de mis pensamientos.

—¿Qué pasó P? —todos le dicen así y ella misma se presenta como P.

—¿Tienes algo de comer? —preguntó, sentada en el asiento de al lado, que estaba vacío. Busque a Kelly con la mirada, y no me sorprendió encontrarla dormida.

Saque de mi mochila un chocolate chiquito, se lo entregue, me agradeció con un beso en el cachete, y se quedo conmigo.

—Maxie dijo que tú y el tío Lando eran novios, ¿Lo son? —dijo, mientras yo le limpiaba los cachetes, ya que se los había manchado del chocolate.

Dude en que contestaré, para empezar, es una niña de 5 años, no debería de saber que es un novio. Pensé en regañar a Max por decirle eso a la pequeña, pero luego me di cuenta de algo, él no sabe que la relación es falsa, además, George me dijo que Lando y yo realmente parecemos novios.

—Si, lo quiero mucho. —le conteste, ella me sonrio y contesto "yo tambien lo quiero".

Cuando Lando volvió a mi lado, P se levantó para darle el asiento, volviendo al lado de Max, que la cargo y empezó a jugar con ella.

—¿Tienes algo que hacer el domingo? —preguntó, hoy es lunes, Kelly y yo volveríamos a Estados Unidos el miércoles/jueves, así que dudo tener algo que hacer el domingo.

—No, ¿Porque? ¿Me vas a invitar a una cita? —pregunte bromeando.

—Algo así. —contestó, me sorprendió un poco—, él domingo es el gp de Bélgica, ¿Me quieres acompañar?

Dudé en las intenciones de esta pregunta, si bien podría ser porque quiere que lo acompañe, también puede ser solamente para que los medios nos vean.

—Quiero que vayas porque quiero pasar tiempo contigo, quiero que nos conozcamos más y se me hace una buena idea empezar conociendo nuestros trabajos y esas cosas.

Me sentí aliviada de que esa fuera la razón, le asentí y le di un piquito.

—Bien, te acompaño.