Charapter No. 05

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I'm not who I used to Be


Las semanas pasaron rápidamente después de la acalorada discusión en el aula vacía. Lyra se mantuvo distante de todos en Hogwarts, especialmente de los Gryffindor. La tensión entre ella y James era palpable, pero Lyra se había cerrado a cualquier intento de reconciliación.

Una tarde, mientras Lyra estudiaba en la biblioteca, escuchó rumores que la hicieron detenerse. James Potter y Lily Evans habían comenzado a salir. Al principio, pensó que eran solo chismes, pero al verlos juntos, riendo y caminando por los pasillos, supo que era verdad. Cada vez que los veía, sentía una punzada de dolor en el pecho, pero también una creciente sensación de rencor hacia ellos y hacia todo lo que representaban.

Decidida a no permitir que su corazón roto la debilitara, Lyra tomó una decisión drástica. Se dirigió a la oficina del profesor Dumbledore con una carta en la mano, su determinación clara en cada paso que daba.

Dumbledore la recibió con su habitual serenidad, aunque sus ojos brillaban con una preocupación genuina.

-¿Qué puedo hacer por ti, Lyra? -preguntó, su voz suave y amable.

Lyra tomó un profundo aliento antes de hablar.

-Profesor, me gustaría solicitar un intercambio a Beauxbatons. Creo que sería mejor para mí... y para todos.

Dumbledore la observó atentamente, su expresión comprensiva.

-¿Estás segura de esta decisión, Lyra? Beauxbatons es una escuela maravillosa, pero dejar Hogwarts no es algo que deba tomarse a la ligera.

-Lo sé, profesor. Pero necesito un cambio. Hay demasiadas... distracciones aquí -dijo, su voz cargada de resentimiento hacia los Gryffindor.

Dumbledore asintió lentamente, comprendiendo más de lo que Lyra decía.

-Muy bien. Haré los arreglos necesarios. Te deseo lo mejor en tu nueva aventura, Lyra. Recuerda que siempre tendrás un hogar aquí en Hogwarts.

Lyra agradeció a Dumbledore y se despidió. Mientras salía de la oficina, se sintió aliviada, pero también triste. Hogwarts había sido su hogar, pero ya no lo sentía así.

Al día siguiente, mientras empacaba sus cosas en la sala común de Ravenclaw, James apareció en la puerta. Su rostro mostraba una mezcla de sorpresa y desesperación.

-¿Es cierto, Lyra? ¿Te vas a Beauxbatons? -preguntó, su voz llena de incredulidad.

Lyra continuó empacando, su expresión fría y distante.

-Sí, es cierto. Creo que es lo mejor para mí.

James dio un paso hacia ella, tratando de encontrar sus ojos.

-Pero, ¿por qué? ¿Es por lo que pasó entre nosotros? -preguntó, su voz quebrándose ligeramente-. Lo siento, Lyra. No quería que las cosas terminaran así.

Lyra finalmente se giró para mirarlo, su mirada glacial.

-No tienes que disculparte, James. Tienes tu vida, y yo tengo la mía. Esto es lo mejor para ambos.

James extendió una mano, desesperado por llegar a ella.

-Por favor, Lyra. No quiero que te vayas así. Podemos arreglarlo.

Lyra negó con la cabeza, sintiendo cómo su corazón se endurecía aún más.

-No, James. Ya está decidido. Buen viaje, y buena suerte con Lily. -dijo, su voz cortante.

Todo Fue Un Mal EntendidoWhere stories live. Discover now