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-"Tenemos un problema"-

Creo que hablo por todo el mundo cuando digo que esta frase es una de las peores frases que podamos escuchar en la vida, y peor aún viniendo de tus padres.

-¿Que ocurre papá?- preguntó Artemisa con cierto aire curioso mirando a nuestro padre con una expresión que revela miedo y angustia dejando el tenedor a un lado del plato.

-Veréis, este último mes ha sido como ya sabréis muy difícil para todos, vuestra madre se está recuperando de la operación en el hospital, y con todo el tema de que vosotras os habéis independizado, han pasado cosas que no deberían de haber pasado y me arrepiento mucho de haberlo hecho, de veras- dijo papá con una expresión seria y triste.

-¿Qué es lo que ha pasado papá?- dije impaciente esperando su respuesta.

-Debo pagar 2.000.000 € a una página web de apuestas italianas, o pasaré siete años en prisión- dijo papá bajando la mirada avergonzado.

-No puede ser posible, tiene que haber otra manera- dije muy preocupada mirando a papá preocupada.

-Nea, solo hay otra manera y me niego rotundamente- dijo papá serio levantando la vista.

-¿Y por qué no papá? Cuéntanosla al menos- dijo Artemisa curiosa.

-Quieren que una de vosotras se case con el que se va a volver director de la empresa- concluyó.

Ambas nos miramos con una expresión en shock. Y de repente mi cabeza empezó a pensar y pensar hasta que...

-Me ofrezco voluntaria- dije mirando a papá.

-Atenea no vas a casarte con un extraño porque yo haya sido un irresponsable- dijo papá rotundamente.

-Me da igual si es culpa tuya o no, si en mis manos está elegir entre sacrificarme yo y garantizar tu seguridad y felicidad, lo haré igualmente- dije con autoridad. -Además, tu cuidas a mamá con su recuperación del cáncer, tienes que estar con ella y no en la cárcel-

-Atenea, no voy a aceptar que vayas a vivir por más de un año probablemente a Italia solo por que yo haya hecho apuestas y ahora les deba mucho dinero- dijo papá serio.

Dios mio, no puedo creérmelo.

-Espera, ¿has dicho Italia?- dije sorprendida.

-Si Nea, Italia, pero me niego a que te obliguen a casarte con un extraño, podría ser una asesino Nea- dijo papá angustiado.

-Papá, irme a Italia sería una gran oportunidad para aprender más a cerca de la moda, allí hay muchísimas marcas muy reconocidas en todo el mundo- dije emocionada -Además, en la universidad al hacer las prácticas me dieron la opción de irme a Italia, y a parte la empresa donde estoy haciendo las prácticas es originalmente de Italia, podría pedir un traspaso y seguir trabajando de lo que más me gusta-

Entiendo la preocupación de mi padre y mi familia, pero tienen que entender que sería una gran oportunidad para seguir trabajando de diseñadora, y ¿quién sabe? a lo mejor hasta conocer a mi gran ídolo. Entiendo que quieran lo mejor para mi, pero ellos saben que no estoy bien aquí en España, y no es por la compañía, por que no podría pedir una familia mejor, es simplemente que no estoy disfrutando mi vida, vivo en un círculo donde todos mis días son iguales y siento una sensación de vacío. Puede que irme a Italia no solucione todos mis problemas, pero lo que si solucionará es que mi padre vaya a la cárcel cuando mamá mas lo necesita, y también tengo una corazonada que me indica que irme a Italia me dará un impulso en mi camino a ser diseñadora.

Dime que me quieresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora