Luego de toda la charla agitada en el estudio, Poco y yo decidimos salir a tomar aire fresco. Nada mejor que un par de ricos hot dogs de Doug para calmar los nervios.
Nos sentamos en una banca del parque, admirando el paisaje mientras le daba buena cuenta a mi comida. Poco hacía lo propio a mi lado, aunque podía notar la tensión en su cuerpecito.
Por mi parte, no podía sacarme de la cabeza a esa tal Melodie. Me hervía la sangre de solo imaginarla haciéndole la vida imposible a Poco, solo por diversión. Juro que si alguna vez se cruzaba en mi camino, no respondería de mí. Aunque claro, la probabilidad de eso era ínfima. Este parque es inmenso.
Con ese último pensamiento, apoyé la cabeza en el respaldo cerrando los ojos, deseando relajarme. De pronto, escuché un casi imperceptible "Oye..." proveniente de Poco.
Abrí los párpados perezosamente, solo para encontrarme de golpe con un rostro pálido y furioso a escasos centímetros del mío. Dos luceros verdes me fulminaban con rabia contenida. El corazón estuvo a punto de salírseme del pecho.i.
— M-Melodie... —Balbuceé, sintiendo mi voz flaquear ante su furibunda mirada.
Ella se irguió entonces, separándose apenas unos centímetros pero manteniendo su expresión de pocos amigos. Pude notar efectivamente que era varios palmos más alta que yo, quizás una decena.
— Draco... —Siseó entre dientes, pronunciando mi nombre con claro desdén— ¿Se puede saber a qué diablos crees que juegas?
Intenté responder con calma a pesar del sobresalto, apoyando los codos en mis rodillas.
— Mira, yo no jugué a nada. Simplemente me ofrecieron este espacio y lo aproveché. Si el Ceo prefirió darme prioridad, no es asunto mío —Repliqué con sinceridad.
Pero Melodie entrecerró los ojos, cruzándose de brazos de forma amenazante.
— Claro, como no. Tú y tu enorme ego deben estar muy contentos, ¿no? —Espetó con sarcasmo— Pues lamento informarte que no pienso quedarme de brazos cruzados mientras un presumido como tú me roba el show.
Alcé las cejas, empezando a mosquearme también. Sin embargo, antes de que pudiera replicar, Poco intervino tirando nerviosamente de mi manga.
— Chicos, por favor... No busquen problemas — rogó con voz temblorosa
Ignorando la súplica de Poco, mantuve la mirada fija en los ojos enfurecidos de Melodie. Su altura quería hacerme sentir pequeño, pero no permitiría que me intimidase.
— Mira princesita, no me vengas con amenazas —Respondí con calma forzada— No fue mi culpa si tu show se retrasó. Así es este negocio a veces.
Ella soltó una risa burlona cruzándose de brazos. Su postura desafiante empezaba a sacarme de quicio.
— Puff, claro. Hablas como todo un experto en el "negocio", pero todos sabemos que eres solo un novedoso más —Replicó con sorna— Apuesto a que si no le dieras tu culo al Ceo, no tendrías ni guitarra.
Apreté los puños entendiendo su alusión al Ceo. No pensaba quedarme callado mientras me subestimaba.
— Al menos puedo llenar estadios por mí mismo, cosa que dudo que tu hagas sin mostrar tu abdomen o andar con faldas cortas.
Mi último comentario pareció encender algo en Melodie, pues sus ojos echaban chispas. Sin embargo, no me dejé amedrentar. Sostuve su mirada desafiante a pesar del pánico creciente de Poco a nuestro lado.
— ¿Qué dijiste sobre mí, DUENDE asqueroso? —Siseó Melodie con una calma aterradora. Sus dedos se clavaban en sus propios brazos con tanta fuerza que casi los traspasaba. Sentí un escalofrío recorrer mi espalda, pero no daría ni un paso atrás.
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ꜰᴇᴇʟ ᴛʜᴇ ᴀᴅʀᴇɴᴀʟɪɴᴇ - ★ ᴍᴇʟᴏᴅɪᴇ x ᴅʀᴀᴄᴏ ★
أدب الهواةDraco es el nuevo astro del rock que acaba de llegar a Starr Park, un importante recinto musical. Con su actitud rebelde y su potente voz ha conquistado rápidamente al público. Pero su reinado se ha visto amenazado por la aparición de Melodie, una i...